/ miércoles 29 de diciembre de 2021

2021

El año que está a punto de concluir ha sido triste, complejo, difícil y paradigmático. El 2022 es la oportunidad de un nuevo comienzo, con el anhelo de poner fin a la pandemia.

En el 2021, como en el 2020, el acontecimiento más relevante ha sido la pandemia por COVID-19, una pandemia que marca una ruptura en la historia de la humanidad. El impacto de la pandemia en la humanidad puede leerse desde dos ángulos: por una parte, lo negativo de la enfermedad y sus consecuencias y, por otra, las lecciones que nos deja la pandemia. El COVID-19 ha sido una catástrofe en términos de los familiares, amigos y seres queridos que lamentablemente perdieron la vida. Sin duda, pérdidas irreparables que dejan un gran hueco en nuestras vidas. De acuerdo a la Universidad Johns Hopkins, al día de hoy en el mundo se han registrado cerca de 5 millones 400 mil decesos. La Organización Mundial de la Salud estima que el numero real de muertes por el coronavirus será dos o tres veces superior a los registrados por las instituciones de salud, lo que podría ser entre 10 y 15 millones de fallecidos. Entre las consecuencias del coronavirus hay que considerar además las secuelas del COVID-19 en la salud de las personas contagiadas; las enfermedades que se dejaron de atender; el confinamiento y el paro en la actividad económica, entre otros.

Por otra parte, el 2021 es un año paradigmático por la vacunación masiva contra el COVID-19. Es un gran avance científico la creación de una vacuna con la tecnología de ARN mensajero. El proceso para que una vacuna se ofrezca al público lleva años, pero dada la urgencia por la pandemia, el desarrollo de la vacuna contra el COVID-19 fue rápido. Además en estos días se dio a conocer la autorización de una pastilla contra el coronavirus. Grandes avances médico científicos. La pandemia también provocó un aceleramiento tecnológico: hoy es común trabajar, estudiar y hacer otras actividades de forma virtual, lo que además ha modificado la logística y los servicios de mensajería. Incluso ya se habla del metaverso. El coronavirus también está cambiando nuestros hábitos de salud e higiene y la relevancia de seguir las recomendaciones médicas.

Así, este breve balance de lo que el COVID-19 ha significado para la humanidad en este 2021, es la puerta de entrada a una nueva normalidad y el anhelo de poner fin a la pandemia.

El año que termina también es una oportunidad para agradecer por lo vivido y realizado; por los errores y las lecciones; es el momento de reflexionar. Agradezco, en primer lugar, a El Sol de Zacatecas y a su Director, Gerardo de Ávila, la oportunidad de escribir en este espacio de análisis. Agradezco especialmente a usted estimada y estimado lector que se ha tomado unos minutos para leer esta columna semanal.

¡Les deseo un exitoso 2022! ¡Feliz Año Nuevo!

El año que está a punto de concluir ha sido triste, complejo, difícil y paradigmático. El 2022 es la oportunidad de un nuevo comienzo, con el anhelo de poner fin a la pandemia.

En el 2021, como en el 2020, el acontecimiento más relevante ha sido la pandemia por COVID-19, una pandemia que marca una ruptura en la historia de la humanidad. El impacto de la pandemia en la humanidad puede leerse desde dos ángulos: por una parte, lo negativo de la enfermedad y sus consecuencias y, por otra, las lecciones que nos deja la pandemia. El COVID-19 ha sido una catástrofe en términos de los familiares, amigos y seres queridos que lamentablemente perdieron la vida. Sin duda, pérdidas irreparables que dejan un gran hueco en nuestras vidas. De acuerdo a la Universidad Johns Hopkins, al día de hoy en el mundo se han registrado cerca de 5 millones 400 mil decesos. La Organización Mundial de la Salud estima que el numero real de muertes por el coronavirus será dos o tres veces superior a los registrados por las instituciones de salud, lo que podría ser entre 10 y 15 millones de fallecidos. Entre las consecuencias del coronavirus hay que considerar además las secuelas del COVID-19 en la salud de las personas contagiadas; las enfermedades que se dejaron de atender; el confinamiento y el paro en la actividad económica, entre otros.

Por otra parte, el 2021 es un año paradigmático por la vacunación masiva contra el COVID-19. Es un gran avance científico la creación de una vacuna con la tecnología de ARN mensajero. El proceso para que una vacuna se ofrezca al público lleva años, pero dada la urgencia por la pandemia, el desarrollo de la vacuna contra el COVID-19 fue rápido. Además en estos días se dio a conocer la autorización de una pastilla contra el coronavirus. Grandes avances médico científicos. La pandemia también provocó un aceleramiento tecnológico: hoy es común trabajar, estudiar y hacer otras actividades de forma virtual, lo que además ha modificado la logística y los servicios de mensajería. Incluso ya se habla del metaverso. El coronavirus también está cambiando nuestros hábitos de salud e higiene y la relevancia de seguir las recomendaciones médicas.

Así, este breve balance de lo que el COVID-19 ha significado para la humanidad en este 2021, es la puerta de entrada a una nueva normalidad y el anhelo de poner fin a la pandemia.

El año que termina también es una oportunidad para agradecer por lo vivido y realizado; por los errores y las lecciones; es el momento de reflexionar. Agradezco, en primer lugar, a El Sol de Zacatecas y a su Director, Gerardo de Ávila, la oportunidad de escribir en este espacio de análisis. Agradezco especialmente a usted estimada y estimado lector que se ha tomado unos minutos para leer esta columna semanal.

¡Les deseo un exitoso 2022! ¡Feliz Año Nuevo!