/ lunes 12 de octubre de 2020

Autoexposición

El año próximo se renovará el poder representativo en Zacatecas. Las elecciones incluyen el cambio de Gobernador del Estado, 30 diputaciones locales y 58 Ayuntamientos. A diferencia de anteriores procesos esta contienda estará condicionada por la crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus SARS-CoV2. Los mítines con gran cantidad de personas tendrán que evitarse ante los riesgos de posibles contagios. El contacto físico de los candidatos con los posibles electores estará condicionado a un panorama incierto. Esta circunstancia natural ha orillado a los actores públicos a llevar a cabo una autoexposición a través de las redes sociales digitales para encontrar visibilidad social.

Si bien en Zacatecas la contienda política en internet no es nueva, en este proceso ya se observa en las redes de internet mayores niveles de exhibición de personajes públicos y políticos que lo que habíamos visto en años anteriores. Sin embargo, el rasgo más novedoso no es tal exhibición pública sino el hecho de que tal visibilidad no es producto del interés público, como sería una noticia en televisión originada por la cobertura de una rueda de prensa o el envío de un boletín publicado en los periódicos, sino que se trata de una visibilidad autocomunicada a través de la promoción de perfiles institucionales o personales en las redes de internet. Esto cobra relevancia no por el hecho de que busquen un nuevo cargo público el próximo sexenio -que puede ser y están en todo su derecho- sino que la autoexposición ocurra ante un proceso político en puerta.

En Zacatecas el 85% de los usuarios de internet tienen al menos una cuenta en Facebook. Es por esto que la red social se ha convertido en los últimos meses en el nuevo espacio para la autoexposición de personajes públicos. Entre quienes aparecen con mayor frecuencia como publicidad pagada en el scroll de las pantallas se encuentran Arturo Nahle García, magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas; Adolfo Bonilla Gómez, ex secretario del Campo del Gobierno del Estado y aspirante a la candidatura a gobernador por el Partido Revolucionario Institucional (PRI); Víctor Manuel Rentería, Secretario de Administración del Poder Ejecutivo; Alejandrina Varela, titular del Instituto de la Juventud del Estado de Zacatecas y el panista José Manuel Viramontes alias “Pepe Pasteles”, entre otros.

Debido a las campañas sucias que se registraron durante las elecciones de 2016 en Estados Unidos, el sistema político y económico de diversos países ha presionado a las empresas desarrolladoras de tecnología para garantizar contiendas más limpias y que se disminuya en lo posible la desinformación. Una de estas nuevas medidas fue adoptada en 2018 por Facebook, la red social con más usuarios en el planeta: 2 mil 449 millones de personas. Desde el pasado 5 de agosto Facebook decidió transparentar en México sus servicios y los de Instagram en materia de contratación de propaganda. La transparencia incluye una etiqueta en los anuncios políticos donde aparecen los detalles de quienes lo contrataron, a quienes va dirigida la campaña y un aproximado del gasto invertido en la promoción.

El año próximo se renovará el poder representativo en Zacatecas. Las elecciones incluyen el cambio de Gobernador del Estado, 30 diputaciones locales y 58 Ayuntamientos. A diferencia de anteriores procesos esta contienda estará condicionada por la crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus SARS-CoV2. Los mítines con gran cantidad de personas tendrán que evitarse ante los riesgos de posibles contagios. El contacto físico de los candidatos con los posibles electores estará condicionado a un panorama incierto. Esta circunstancia natural ha orillado a los actores públicos a llevar a cabo una autoexposición a través de las redes sociales digitales para encontrar visibilidad social.

Si bien en Zacatecas la contienda política en internet no es nueva, en este proceso ya se observa en las redes de internet mayores niveles de exhibición de personajes públicos y políticos que lo que habíamos visto en años anteriores. Sin embargo, el rasgo más novedoso no es tal exhibición pública sino el hecho de que tal visibilidad no es producto del interés público, como sería una noticia en televisión originada por la cobertura de una rueda de prensa o el envío de un boletín publicado en los periódicos, sino que se trata de una visibilidad autocomunicada a través de la promoción de perfiles institucionales o personales en las redes de internet. Esto cobra relevancia no por el hecho de que busquen un nuevo cargo público el próximo sexenio -que puede ser y están en todo su derecho- sino que la autoexposición ocurra ante un proceso político en puerta.

En Zacatecas el 85% de los usuarios de internet tienen al menos una cuenta en Facebook. Es por esto que la red social se ha convertido en los últimos meses en el nuevo espacio para la autoexposición de personajes públicos. Entre quienes aparecen con mayor frecuencia como publicidad pagada en el scroll de las pantallas se encuentran Arturo Nahle García, magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas; Adolfo Bonilla Gómez, ex secretario del Campo del Gobierno del Estado y aspirante a la candidatura a gobernador por el Partido Revolucionario Institucional (PRI); Víctor Manuel Rentería, Secretario de Administración del Poder Ejecutivo; Alejandrina Varela, titular del Instituto de la Juventud del Estado de Zacatecas y el panista José Manuel Viramontes alias “Pepe Pasteles”, entre otros.

Debido a las campañas sucias que se registraron durante las elecciones de 2016 en Estados Unidos, el sistema político y económico de diversos países ha presionado a las empresas desarrolladoras de tecnología para garantizar contiendas más limpias y que se disminuya en lo posible la desinformación. Una de estas nuevas medidas fue adoptada en 2018 por Facebook, la red social con más usuarios en el planeta: 2 mil 449 millones de personas. Desde el pasado 5 de agosto Facebook decidió transparentar en México sus servicios y los de Instagram en materia de contratación de propaganda. La transparencia incluye una etiqueta en los anuncios políticos donde aparecen los detalles de quienes lo contrataron, a quienes va dirigida la campaña y un aproximado del gasto invertido en la promoción.