/ lunes 27 de mayo de 2019

Casas de empeño… ¿qué hacer?

Las dificultades económicas del exterior y la falta de ahorro (ya sea en el ámbito familiar o personal) provocan la necesidad de recurrir a préstamos. Cuando es urgente contar con dinero para solventar algunas necesidades se buscan diferentes alternativas en el mercado, desde el crédito bancario, ante sociedades financieras de objeto múltiple y las casas de empeño.

Cuando las personas se encuentran en una situación de crisis económica, las casas de empeño resultan ser una opción más, ya que el recurso se puede disponer de manera rápida. Por ello, hay que buscar dentro de todas tus pertenencias la que más te convenga y por la que puedas obtener más efectivo. Recordando siempre que para recuperar tu objeto, hay que liquidar el crédito conforme a las condiciones contractuales.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomienda que en caso de que la única opción para obtener dinero sea empeñar, es primordial comparar las alternativas que existen, hay que visitar los diferentes establecimientos para contar con información que realmente permita decidir por la mejor opción.

Por lo anterior, se sugiere no dejar prendas en la primera casa de empeño que se visite o se conozca, debes darte el tiempo necesario para elegir la que más liquidez ofrezca, con una tasa de interés baja. Es decir, que las condiciones sean las más favorables para celebrar este tipo de contratos.

Además, es de suma importancia verificar clara y detalladamente la tasa de interés anualizada, ya que algunas casas manejan tasas muy elevadas. También hay que preguntar por el porcentaje de avalúo que prestan, pues es obligación de la casa de empeño informar de manera clara y concreta antes de formalizar el contrato.

Mediante una infografía aconseja consultar la demasía, pues en caso de no recuperar la prenda y sea vendida, la casa de empeño debe dar la diferencia entre el valor de venta y el costo de la pertenencia. También hay que revisar o preguntar sobre los refrendos, es decir, a cuantas renovaciones se tiene derecho y del aumento del plazo establecido para recuperar la misma.

Asimismo, no olvidar el Costo Anual Total (CAT) que debe aparecer en los contratos y debe estar desglosado en los estados de cuenta, ya que al igual que los créditos de los bancos, ya que los préstamos que ofrecen las casas de empeño establecen dicho indicador que sirve para hacer cuentas.

Recordemos que el CAT de acuerdo con el Banco de México, sirve para calcular el costo total del financiamiento de un crédito, es decir, es una medida porcentual que integra no sólo la tasa de interés sino todos los elementos que al final tendrás que pagar tales como la cuota anual, comisiones y demás accesorios. Si existen dudas se puede acudir a Profeco para obtener orientación al respecto.

Las dificultades económicas del exterior y la falta de ahorro (ya sea en el ámbito familiar o personal) provocan la necesidad de recurrir a préstamos. Cuando es urgente contar con dinero para solventar algunas necesidades se buscan diferentes alternativas en el mercado, desde el crédito bancario, ante sociedades financieras de objeto múltiple y las casas de empeño.

Cuando las personas se encuentran en una situación de crisis económica, las casas de empeño resultan ser una opción más, ya que el recurso se puede disponer de manera rápida. Por ello, hay que buscar dentro de todas tus pertenencias la que más te convenga y por la que puedas obtener más efectivo. Recordando siempre que para recuperar tu objeto, hay que liquidar el crédito conforme a las condiciones contractuales.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomienda que en caso de que la única opción para obtener dinero sea empeñar, es primordial comparar las alternativas que existen, hay que visitar los diferentes establecimientos para contar con información que realmente permita decidir por la mejor opción.

Por lo anterior, se sugiere no dejar prendas en la primera casa de empeño que se visite o se conozca, debes darte el tiempo necesario para elegir la que más liquidez ofrezca, con una tasa de interés baja. Es decir, que las condiciones sean las más favorables para celebrar este tipo de contratos.

Además, es de suma importancia verificar clara y detalladamente la tasa de interés anualizada, ya que algunas casas manejan tasas muy elevadas. También hay que preguntar por el porcentaje de avalúo que prestan, pues es obligación de la casa de empeño informar de manera clara y concreta antes de formalizar el contrato.

Mediante una infografía aconseja consultar la demasía, pues en caso de no recuperar la prenda y sea vendida, la casa de empeño debe dar la diferencia entre el valor de venta y el costo de la pertenencia. También hay que revisar o preguntar sobre los refrendos, es decir, a cuantas renovaciones se tiene derecho y del aumento del plazo establecido para recuperar la misma.

Asimismo, no olvidar el Costo Anual Total (CAT) que debe aparecer en los contratos y debe estar desglosado en los estados de cuenta, ya que al igual que los créditos de los bancos, ya que los préstamos que ofrecen las casas de empeño establecen dicho indicador que sirve para hacer cuentas.

Recordemos que el CAT de acuerdo con el Banco de México, sirve para calcular el costo total del financiamiento de un crédito, es decir, es una medida porcentual que integra no sólo la tasa de interés sino todos los elementos que al final tendrás que pagar tales como la cuota anual, comisiones y demás accesorios. Si existen dudas se puede acudir a Profeco para obtener orientación al respecto.