/ lunes 19 de octubre de 2020

Crónica del poder │ Al encuentro del equilibrio presupuestal

Conocidas las versiones y opiniones de trabajadores y pensionados, del Gobernador Alejandro Tello, del Secretario Jorge Miranda; y del actuario Francisco Miguel Aguirre, que reconocen y colocan al Issstezac al borde del colapso y como institución sin viabilidad en éstos momentos y a corto plazo, se advierte que se ha convertido en asunto de interés público, que por una parte se busca fortalecer y rescatar para que sirva mejor a los trabajadores al servicio del Estado y por otra, la gente urge a transparentar ese listado de pensionados de privilegio, que de hecho obtienen recursos económicos en flagrante abuso de confianza y amparados en una "legalidad" hoy inaceptable.

Es acertado que la Junta Directiva y el Director General, Marco Vinicio Flores Guerrero, reorientan al Issstezac hacia un nuevo modelo institucional de auténtico, razonable y justo equilibrio presupuestal, que se aleje de la violentación de la ley, porque como Miranda Castro lo precisa, hoy se están otorgando prestaciones que están fuera de la ley, lo que genera escozor, porque "si abrimos a la opinión pública las pensiones que se reciben para que se vean quienes son los beneficiados históricamente y que no solo reciben una pensión de 50, 60, 70 y hasta 80 mil pesos, sino que también reciben otra pensión del Seguro Social", resulta una inmoralidad y desigualdad que no debe seguir porque se atenta contra los Derechos de la gran mayoría, de manera que ya no caben las complicidades de la autoridad y han de construir otro escenario de justicia y equidad.

Miranda y Vinicio son contundentes, esas prestaciones que se dieron en el pasado, hoy son insostenibles y se deben quitar todas las que están fuera de la ley, decisiones responsables y de Estado, hasta encontrar un sano equilibrio del trabajador frente al Estado y de los pensionados ante la institución y la sociedad, con pleno respeto a la legalidad, porque, advertidos ya los riesgos y peligros de un desastre, es irritante y más indignante que esos abusos de exorbitantes pensiones prevalezcan, ya que son un enriquecimiento ilícito y descarado asunto de corrupción.

Si la ley establece las condiciones para alcanzar el justo equilibrio presupuestal, resulta nocivo, ruín, oprobioso, insultante e inmoral, valerse de esa normatividad para justificar privilegios y excesos en la recepción de pensiones desproporcionadas, irracionalmente abultadas, de quienes incluso disfrutan o gozan de otras pensiones; o sea, dobletean con deleznable voracidad, lo que hay que denunciar con toda claridad y como un corrupto proceder de quienes todavía tienen el cinismo de resistir al reclamo institucional y de la sociedad.

La predilección de gobiernos anteriores

Encasilló a sus preferidos y cercanos a sus intereses políticos, pero hoy esos repudiables e inaceptable privilegios han de ser cancelados, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado de Zacatecas, está en la ruta de un proceso renovador hacia la consolidación institucional y el equilibrio presupuestal, a fin de fortalecer en el presente y a mediano plazo, la normalidad en la sanidad financiera. La sociedad, los gobiernos estatal y municipales, la pluralidad política, la diversidad social, la opinión pública, los maestros, trabajadores y los conscientes y responsables pensionados, y los medios de comunicación, esperan sea garantizado el visionario equilibrio.

Conocidas las versiones y opiniones de trabajadores y pensionados, del Gobernador Alejandro Tello, del Secretario Jorge Miranda; y del actuario Francisco Miguel Aguirre, que reconocen y colocan al Issstezac al borde del colapso y como institución sin viabilidad en éstos momentos y a corto plazo, se advierte que se ha convertido en asunto de interés público, que por una parte se busca fortalecer y rescatar para que sirva mejor a los trabajadores al servicio del Estado y por otra, la gente urge a transparentar ese listado de pensionados de privilegio, que de hecho obtienen recursos económicos en flagrante abuso de confianza y amparados en una "legalidad" hoy inaceptable.

Es acertado que la Junta Directiva y el Director General, Marco Vinicio Flores Guerrero, reorientan al Issstezac hacia un nuevo modelo institucional de auténtico, razonable y justo equilibrio presupuestal, que se aleje de la violentación de la ley, porque como Miranda Castro lo precisa, hoy se están otorgando prestaciones que están fuera de la ley, lo que genera escozor, porque "si abrimos a la opinión pública las pensiones que se reciben para que se vean quienes son los beneficiados históricamente y que no solo reciben una pensión de 50, 60, 70 y hasta 80 mil pesos, sino que también reciben otra pensión del Seguro Social", resulta una inmoralidad y desigualdad que no debe seguir porque se atenta contra los Derechos de la gran mayoría, de manera que ya no caben las complicidades de la autoridad y han de construir otro escenario de justicia y equidad.

Miranda y Vinicio son contundentes, esas prestaciones que se dieron en el pasado, hoy son insostenibles y se deben quitar todas las que están fuera de la ley, decisiones responsables y de Estado, hasta encontrar un sano equilibrio del trabajador frente al Estado y de los pensionados ante la institución y la sociedad, con pleno respeto a la legalidad, porque, advertidos ya los riesgos y peligros de un desastre, es irritante y más indignante que esos abusos de exorbitantes pensiones prevalezcan, ya que son un enriquecimiento ilícito y descarado asunto de corrupción.

Si la ley establece las condiciones para alcanzar el justo equilibrio presupuestal, resulta nocivo, ruín, oprobioso, insultante e inmoral, valerse de esa normatividad para justificar privilegios y excesos en la recepción de pensiones desproporcionadas, irracionalmente abultadas, de quienes incluso disfrutan o gozan de otras pensiones; o sea, dobletean con deleznable voracidad, lo que hay que denunciar con toda claridad y como un corrupto proceder de quienes todavía tienen el cinismo de resistir al reclamo institucional y de la sociedad.

La predilección de gobiernos anteriores

Encasilló a sus preferidos y cercanos a sus intereses políticos, pero hoy esos repudiables e inaceptable privilegios han de ser cancelados, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado de Zacatecas, está en la ruta de un proceso renovador hacia la consolidación institucional y el equilibrio presupuestal, a fin de fortalecer en el presente y a mediano plazo, la normalidad en la sanidad financiera. La sociedad, los gobiernos estatal y municipales, la pluralidad política, la diversidad social, la opinión pública, los maestros, trabajadores y los conscientes y responsables pensionados, y los medios de comunicación, esperan sea garantizado el visionario equilibrio.