Tras la histórica derrota de Donald Trump en Estados Unidos y ante la evidente victoria de Joe Biden, más allá de legalismos, los hechos de los votos que se han contado y que ungen al nuevo Presidente e inquilino de la Casa Blanca, han de ser interpretados por el Presidente ANndrés Manuel López Obrador, como la necesaria recomposición de las relaciones con el vecino y que su nuevo gobierno vea a México como el vigoroso socio en el Tratado de Libre Comercio y que, aunque tenga otros datos electorales, ya debe reconocer al triunfador y asumirse como aliado político, comercial y estratégico.
Entre otros factores favorables para México, con la elección de Biden se han de fortalecer los lazos comerciales, revisar las políticas migrantes y cancelar las diferencias que impone el muro fronterizo; como también debe verse la lección política que ha significado el empoderamiento de la mujer en el caso de Kamala Harris, la primera en llegar a la Vicepresidencia de E.U., una elección de imponente trascendencia para la incesante lucha de las mujeres en el mundo, por la equidad e igualdad de oportunidades.
Es a partir de este acontecimiento electoral protagonizado por Kamala Harris, que en nuestro escenario político electoral, más se motiva el debate acerca de la paridad en las candidaturas a gubernaturas, para que de las 15 que se disputarán, 7 sean mujeres y 8 hombres, una reglamentación del Instituto Nacional Electoral, que de concretarse demostrará que nuestra democracia puede ser un comportamiento cotidiano y realmente compartido, un progresista e innovador modelo que más atraerá a ciudadanas y ciudadanos a una más responsable movilización por alcanzar gobiernos con la más amplia pluralidad y respetuosos de la diversidad social y de la paridad de género.
Por lo pronto, ya se ha generado una atmósfera de discusión, de análisis y debate. Ricardo Monreal ha sido contundente frente a la aprobación de este criterio de equidad sobre las gubernaturas y advierte que no permitirán que el INE invada poderes, que no suplanta las funciones legislativas del Poder Legislativo; en consecuencia, Lorenzo Córdova, el consejero presidente del INE, ha declarado que en la institución electoral no se legisla pero sí se adoptan medidas afirmativas que contribuyen a convertir en hechos el mandato constitucional de una contienda electoral en condiciones de equidad, certeza, transparencia y legalidad, porque con éstos criterios de paridad para las gubernaturas, se da un paso adelante para cumplir con la demanda social de paridad y equidad.
Los cargos unipersonales como las gubernaturas, no están excluidos de la paridad, y si no hay gobernadoras, es porque no postulan a las mujeres, sostiene Córdova Vianello. Al debate ya se incorporó la senadora Geovanna Bañuelos y asegura que su bancada y el Partido del Trabajo respaldan el proyecto que ha lanzado el INE, para que sea garantizada la paridad total en todas las candidaturas a cargos de elección popular, "las mujeres tenemos derecho a votar y ser votadas," argumenta la zacatecana, ya precandidata del PT a gobernadora.
En la vía política
Los Partidos Revolucionario Institucional, de la Revolución Democrática, Verde Ecologista de México, Encuentro Solidario, del Trabajo, Redes Sociales Progresistas y la Fuerza Social por México, están a favor de la propuesta ya aprobada por el Consejo General del Instituto Nacional Electoral y paradójicamente, las fuerzas políticas en los extremos, el Morena y PAN, se han pronunciado en contra y confiados en el recurso o controversia constitucional que Ricardo Monreal interpondrá ante el Tribunal Electoral o la Suprema Corte de Justicia. Abierto el debate.
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