/ lunes 21 de junio de 2021

Crónica del poder │ El monrealismo en su apogeo

Civilidad y respeto demostraron Alejandro Tello y David Monreal en su encuentro político y convivencia ideológica, lección que debiera trascender el quinquenio y también derivar entre los cuadros o figuras políticas a fin de impedir las degradantes batallas de aniquilamiento que a cada transición gubernamental se registran en nombre de la corrupción, y que dejen las diferencias, observaciones, cuestionamientos y denuncias en manos de la ley, que ésta se aplique hasta donde sea y en contra de quien sea porque hoy por hoy la impunidad es inconcebible.

El grito que, desde Palacio de Gobierno, frente a los medios de comunicación y el gobernador Tello lanzó el gobernador electo Monreal, es consecuente y congruente, hasta en sintonía con el discurso presidencial de Andrés Manuel López Obrador, en contra de la corrupción e impunidad, que todavía no acaba de aplicar y cuyos flagelos brotan como la hidra maldita que se regenera incontenible. Y claro, para anunciar esa consigna son necesarias calidad moral y autoridad política, que David Monreal ya ostenta gracias a la legitimidad que le han dado los votos mayoritarios de los ciudadanos.

"Voy a ser implacable con el tema de la corrupción, con el tema de la impunidad, para dar paso a la honestidad, al compromiso de trabajo y a la lealtad al pueblo de Zacatecas". Advertencia y expresión que también se interpretó oportuna ante la visita del presidente de la República, porque es propósito de DAVID instalar en el estado la Cuarta Transformación, para lo cual exhortó a los funcionarios públicos tellistas, a los que serán de su gobierno a partir del 12 de septiembre, a los federales y municipales, a que se conduzcan con responsabilidad, honestidad y transparencia, a fin de que prevalezcan la austeridad, transparencia y eficacia en el servicio a la sociedad.

Resulta obvio, que David Monreal intentará ensamblar al sexenio de su hermano Ricardo, de 1998 al 2004, con el suyo de 2021 a 2027,que por sus enormes expectativas se avizora promisorio y cuyos resultados habrán de tener efectos de gran impacto en la lucha presidencial de 2024, en la que ya está insertado con mucha fuerza el exgobernador MONREAL, hoy coordinador de Morena en el Senado de la República y a quien hoy los zacatecanos y jerezanos han de reconocer que el nombre de Ramón López Velarde, el poeta de la Patria, sea inscrito con letras de oro en el recinto senatorial, gesto y comportamiento que bien refleja la lealtad monrealista a los valores culturales de Zacatecas, en este caso a la grandeza literaria y artística del creador de la Suave Patria.

Se entiende que esa convicción política legítima y natural por consolidar los sexenios monrealistas por la más vigorosa construcción de Zacatecas, considera que los sexenios de Amalia García Medina y Miguel Alonso Reyes, y el quinquenio de Alejandro Tello, ni siquiera han pasado ni pesado en la historia política del estado o cuando menos para los Monreal, han sido una etapa de retroceso, de saqueo, de corrupción y de impunidad, como así lo han manifestado en los debates de campaña. Es decir, cuando menos, esas etapas gubernamentales entre los períodos de Ricardo Monreal y el que inicia con David Monreal, para ellos han sido irrelevantes, nada han significado en el desarrollo integral de Zacatecas, al contrario, han sido tiempos perdidos y para el olvido, porque ahora lo que trasciende es la Cuarta Transformación, que en Zacatecas se instalará a partir del 12 de septiembre. Así se traza el futuro estatal al grito de Juntos Hacemos Historia.

Civilidad y respeto demostraron Alejandro Tello y David Monreal en su encuentro político y convivencia ideológica, lección que debiera trascender el quinquenio y también derivar entre los cuadros o figuras políticas a fin de impedir las degradantes batallas de aniquilamiento que a cada transición gubernamental se registran en nombre de la corrupción, y que dejen las diferencias, observaciones, cuestionamientos y denuncias en manos de la ley, que ésta se aplique hasta donde sea y en contra de quien sea porque hoy por hoy la impunidad es inconcebible.

El grito que, desde Palacio de Gobierno, frente a los medios de comunicación y el gobernador Tello lanzó el gobernador electo Monreal, es consecuente y congruente, hasta en sintonía con el discurso presidencial de Andrés Manuel López Obrador, en contra de la corrupción e impunidad, que todavía no acaba de aplicar y cuyos flagelos brotan como la hidra maldita que se regenera incontenible. Y claro, para anunciar esa consigna son necesarias calidad moral y autoridad política, que David Monreal ya ostenta gracias a la legitimidad que le han dado los votos mayoritarios de los ciudadanos.

"Voy a ser implacable con el tema de la corrupción, con el tema de la impunidad, para dar paso a la honestidad, al compromiso de trabajo y a la lealtad al pueblo de Zacatecas". Advertencia y expresión que también se interpretó oportuna ante la visita del presidente de la República, porque es propósito de DAVID instalar en el estado la Cuarta Transformación, para lo cual exhortó a los funcionarios públicos tellistas, a los que serán de su gobierno a partir del 12 de septiembre, a los federales y municipales, a que se conduzcan con responsabilidad, honestidad y transparencia, a fin de que prevalezcan la austeridad, transparencia y eficacia en el servicio a la sociedad.

Resulta obvio, que David Monreal intentará ensamblar al sexenio de su hermano Ricardo, de 1998 al 2004, con el suyo de 2021 a 2027,que por sus enormes expectativas se avizora promisorio y cuyos resultados habrán de tener efectos de gran impacto en la lucha presidencial de 2024, en la que ya está insertado con mucha fuerza el exgobernador MONREAL, hoy coordinador de Morena en el Senado de la República y a quien hoy los zacatecanos y jerezanos han de reconocer que el nombre de Ramón López Velarde, el poeta de la Patria, sea inscrito con letras de oro en el recinto senatorial, gesto y comportamiento que bien refleja la lealtad monrealista a los valores culturales de Zacatecas, en este caso a la grandeza literaria y artística del creador de la Suave Patria.

Se entiende que esa convicción política legítima y natural por consolidar los sexenios monrealistas por la más vigorosa construcción de Zacatecas, considera que los sexenios de Amalia García Medina y Miguel Alonso Reyes, y el quinquenio de Alejandro Tello, ni siquiera han pasado ni pesado en la historia política del estado o cuando menos para los Monreal, han sido una etapa de retroceso, de saqueo, de corrupción y de impunidad, como así lo han manifestado en los debates de campaña. Es decir, cuando menos, esas etapas gubernamentales entre los períodos de Ricardo Monreal y el que inicia con David Monreal, para ellos han sido irrelevantes, nada han significado en el desarrollo integral de Zacatecas, al contrario, han sido tiempos perdidos y para el olvido, porque ahora lo que trasciende es la Cuarta Transformación, que en Zacatecas se instalará a partir del 12 de septiembre. Así se traza el futuro estatal al grito de Juntos Hacemos Historia.