/ viernes 26 de marzo de 2021

Crónica del poder │ El PRI retoma el legado de Colosio

No deja de sorprender que en el Senado de la República, la morenista Mónica Fernández Balboa, desde la tribuna haya solicitado un minuto de silencio en memoria de Luis Donaldo Colosio y homenajeado al candidato presidencial del PRI asesinado hace 27 años en Tijuana; pero no debe de extrañar que a iniciativa de Morena se recuerde a quien la senadora Beatriz Paredes, ésta sí priista, lo destacó como un político que dejó huella y que el terrible atentado de que fue objeto modificó la historia nacional, más aún, la tlaxcalteca advirtió que "llenar al país de odio nunca ha sido el camino correcto."

Hay que asentar que, en aquel entonces, 1994, muchos de los hoy morenistas eran apasionados priistas, a contar: Ricardo Monreal, Manuel Bartlett, Cristóbal Arias, Jorge Alcocer, Esteban Moctezuma, entre otros muy cercanos, como Alfonso Durazo, quien siempre sostuvo que a Colosio jamás lo cambio el poder.

Ya en Zacatecas, en el escenario del Partido Revolucionario Institucional, la memoria y legado de Colosio fue colocada a la vanguardia de la batalla electoral que Claudia Anaya lidera por la gubernatura del estado y una vez conjuradas las incertidumbres y desconfianzas internas que el proceso interno les dejo, asumieron los principios colosistas y más convencidos de sus capacidades, de hecho se han relanzado a la lucha para contener los excesos de poder, preservar las libertades, autonomías e independencias de las instituciones, sin renunciar al combate contra la corrupción e impunidad que con firmeza sostuvo Luis Donaldo Colosio.

Por lo pronto y ante la ausencia de estabilidad marcada por la continuidad de conflictos, confrontaciones y la polarización a través del discurso de odio, los priistas parecen ubicarse con objetividad y humildad en la cruda realidad de la problemática social y frente a una campaña que definirá el rumbo y el futuro de Zacatecas, como así lo expone Enrique Flores Mendoza, que con autocrítica han decidido trabajar para desterrar los vicios de la simulación y la deslealtad y con las enseñanzas colosistas afianzar los lazos de vinculación y alianza con sus otrora históricos adversarios del PAN y el PRD, liderados por Noemí Berenice Luna y Raymundo Carrillo, las tres fuerzas políticas que han consolidado estructuras, bien preparadas y entresacado la enorme experiencia acumulada por los sexenios de poder.

México está inmerso en una demagogia

Les dijo Claudia Anaya a sus correligionarios, algo que tanto rechazaba el priista sonorense, y convocó a evitar que el esquema nacional de la demagogia y simulación se instale en Zacatecas. Así mismo y en esos momentos de la evocación, Guillermo Ulloa Carreón, el presidente de la Fundación Colosio, quien vivió de cerca y desde el poder aquella tragedia nacional, reiteró que el mejor homenaje que se le puede rendir a Luis Donaldo Colosio es saber lograr y mantener la unidad interna, consolidar un eficaz equipo de campaña y encarar con realismo la situación política, económico y social que se sufre por los mexicanos, para generar alternativas de solución. Acertado que sea evocada la memoria y legado de Colosio para una campaña victoriosa, más acertado que los priistas pongan los pies en la realidad.


No deja de sorprender que en el Senado de la República, la morenista Mónica Fernández Balboa, desde la tribuna haya solicitado un minuto de silencio en memoria de Luis Donaldo Colosio y homenajeado al candidato presidencial del PRI asesinado hace 27 años en Tijuana; pero no debe de extrañar que a iniciativa de Morena se recuerde a quien la senadora Beatriz Paredes, ésta sí priista, lo destacó como un político que dejó huella y que el terrible atentado de que fue objeto modificó la historia nacional, más aún, la tlaxcalteca advirtió que "llenar al país de odio nunca ha sido el camino correcto."

Hay que asentar que, en aquel entonces, 1994, muchos de los hoy morenistas eran apasionados priistas, a contar: Ricardo Monreal, Manuel Bartlett, Cristóbal Arias, Jorge Alcocer, Esteban Moctezuma, entre otros muy cercanos, como Alfonso Durazo, quien siempre sostuvo que a Colosio jamás lo cambio el poder.

Ya en Zacatecas, en el escenario del Partido Revolucionario Institucional, la memoria y legado de Colosio fue colocada a la vanguardia de la batalla electoral que Claudia Anaya lidera por la gubernatura del estado y una vez conjuradas las incertidumbres y desconfianzas internas que el proceso interno les dejo, asumieron los principios colosistas y más convencidos de sus capacidades, de hecho se han relanzado a la lucha para contener los excesos de poder, preservar las libertades, autonomías e independencias de las instituciones, sin renunciar al combate contra la corrupción e impunidad que con firmeza sostuvo Luis Donaldo Colosio.

Por lo pronto y ante la ausencia de estabilidad marcada por la continuidad de conflictos, confrontaciones y la polarización a través del discurso de odio, los priistas parecen ubicarse con objetividad y humildad en la cruda realidad de la problemática social y frente a una campaña que definirá el rumbo y el futuro de Zacatecas, como así lo expone Enrique Flores Mendoza, que con autocrítica han decidido trabajar para desterrar los vicios de la simulación y la deslealtad y con las enseñanzas colosistas afianzar los lazos de vinculación y alianza con sus otrora históricos adversarios del PAN y el PRD, liderados por Noemí Berenice Luna y Raymundo Carrillo, las tres fuerzas políticas que han consolidado estructuras, bien preparadas y entresacado la enorme experiencia acumulada por los sexenios de poder.

México está inmerso en una demagogia

Les dijo Claudia Anaya a sus correligionarios, algo que tanto rechazaba el priista sonorense, y convocó a evitar que el esquema nacional de la demagogia y simulación se instale en Zacatecas. Así mismo y en esos momentos de la evocación, Guillermo Ulloa Carreón, el presidente de la Fundación Colosio, quien vivió de cerca y desde el poder aquella tragedia nacional, reiteró que el mejor homenaje que se le puede rendir a Luis Donaldo Colosio es saber lograr y mantener la unidad interna, consolidar un eficaz equipo de campaña y encarar con realismo la situación política, económico y social que se sufre por los mexicanos, para generar alternativas de solución. Acertado que sea evocada la memoria y legado de Colosio para una campaña victoriosa, más acertado que los priistas pongan los pies en la realidad.