/ lunes 29 de marzo de 2021

Crónica del poder │ Instituciones electorales resisten ofensiva

A una semana del arranque de las campañas electorales desde el poder federal y su partido se han registrado expresiones que lamentablemente generan un ambiente de hostilidad en contra de las instituciones electorales y eso, resulta un riesgo amenazante de la estabilidad política y de la normalidad democrática, rutas por las que se conducen el Instituto Nacional Electoral y el Instituto Electoral del Estado de Zacatecas, los árbitros caracterizados por su proceder independiente, autónomo y honorable, como acertadamente los menciona Don Sergio García Ramírez, en actitud de promover un sólido e inexpugnable blindaje que evite su vulneración e impida el descrédito.

Se advierte que esa ofensiva convoca a desestabilizar y confundir a la ciudadanía, en momentos en que el prestigio social y la confianza ciudadana se han entregado a las instituciones electorales, porque han actuado apegados estrictamente a la legalidad, con absoluta imparcialidad y equidad, por ello se han generalizado y extendido las opiniones y versiones de respeto y defensa para que no se doblen y resistan la ira y ambiciones de actores que han resentido los efectos de sus propios errores y que buscan adjudicar a los árbitros.

Bien sabe la gente y los ciudadanos son conscientes, de que ambas instituciones electorales, el INE y el IEEZ, son las que garantizan elecciones limpias, legítimas, imparciales y confiables, por verdaderamente democráticas y porque los comicios se organizan y promueven por los propios ciudadanos que ya se han volcado a los procesos de capacitación para integrar las casillas electorales. Resulta pues insano y maligno el afán por lesionar, alterar y deteriorar la buena marcha del proceso electoral que el domingo abre cauces a las campañas, caminos que han de confluir con el vaciado de la gran participación ciudadana ante las urnas del domingo 6 de junio.

Motivado por esa ofensiva mediática contra las instituciones electorales, aquí en Zacatecas el ciudadano Edgar Rivera, del Partido Movimiento Dignidad, quien junto a Félix Salgado, de Guerrero y Raúl Morón, de Michoacán, ambos de Morena, les fue negado por el INE el registro como candidatos a gobernador, acusó dados cargados en el IEEZ a favor del partido Morena, una distorsión muy seguramente provocada por la desesperación al ser sacado de la contienda por la gubernatura de Zacatecas, aunque tiene muy claro que todavía puede elevar su denuncia ante los Tribunales Electorales, incorporados de lleno a hacer cumplir la Constitución y la Ley Electoral. Se advierte pues, que Edgar Salvador Rivera Cornejo se equivoca al considerar que el IEEZ es su adversario, cuando se ha observado que los consejeros electorales responsablemente han eludido responder confrontaciones y controversias con partidos políticos y sus actores.

¿De qué se trata?

Se trata del respeto a la legalidad, ni más ni menos. El asunto es muy sencillo y no necesita inútiles vueltas ni rodeos, Edgar Rivera debe reorientar comportamientos de protagonismo, acatar la resolución del Instituto Nacional Electoral y no ver acá intereses de poder y manipulación, y alejarse de su irracional embate al IEEZ, que a decir de sus verdaderos adversarios y dirigentes de otros partidos, solo exhibe fragilidad política y electoral ante el reto que significa la campaña y frente a los comicios del 6 de junio. Inútil la beligerancia.

A una semana del arranque de las campañas electorales desde el poder federal y su partido se han registrado expresiones que lamentablemente generan un ambiente de hostilidad en contra de las instituciones electorales y eso, resulta un riesgo amenazante de la estabilidad política y de la normalidad democrática, rutas por las que se conducen el Instituto Nacional Electoral y el Instituto Electoral del Estado de Zacatecas, los árbitros caracterizados por su proceder independiente, autónomo y honorable, como acertadamente los menciona Don Sergio García Ramírez, en actitud de promover un sólido e inexpugnable blindaje que evite su vulneración e impida el descrédito.

Se advierte que esa ofensiva convoca a desestabilizar y confundir a la ciudadanía, en momentos en que el prestigio social y la confianza ciudadana se han entregado a las instituciones electorales, porque han actuado apegados estrictamente a la legalidad, con absoluta imparcialidad y equidad, por ello se han generalizado y extendido las opiniones y versiones de respeto y defensa para que no se doblen y resistan la ira y ambiciones de actores que han resentido los efectos de sus propios errores y que buscan adjudicar a los árbitros.

Bien sabe la gente y los ciudadanos son conscientes, de que ambas instituciones electorales, el INE y el IEEZ, son las que garantizan elecciones limpias, legítimas, imparciales y confiables, por verdaderamente democráticas y porque los comicios se organizan y promueven por los propios ciudadanos que ya se han volcado a los procesos de capacitación para integrar las casillas electorales. Resulta pues insano y maligno el afán por lesionar, alterar y deteriorar la buena marcha del proceso electoral que el domingo abre cauces a las campañas, caminos que han de confluir con el vaciado de la gran participación ciudadana ante las urnas del domingo 6 de junio.

Motivado por esa ofensiva mediática contra las instituciones electorales, aquí en Zacatecas el ciudadano Edgar Rivera, del Partido Movimiento Dignidad, quien junto a Félix Salgado, de Guerrero y Raúl Morón, de Michoacán, ambos de Morena, les fue negado por el INE el registro como candidatos a gobernador, acusó dados cargados en el IEEZ a favor del partido Morena, una distorsión muy seguramente provocada por la desesperación al ser sacado de la contienda por la gubernatura de Zacatecas, aunque tiene muy claro que todavía puede elevar su denuncia ante los Tribunales Electorales, incorporados de lleno a hacer cumplir la Constitución y la Ley Electoral. Se advierte pues, que Edgar Salvador Rivera Cornejo se equivoca al considerar que el IEEZ es su adversario, cuando se ha observado que los consejeros electorales responsablemente han eludido responder confrontaciones y controversias con partidos políticos y sus actores.

¿De qué se trata?

Se trata del respeto a la legalidad, ni más ni menos. El asunto es muy sencillo y no necesita inútiles vueltas ni rodeos, Edgar Rivera debe reorientar comportamientos de protagonismo, acatar la resolución del Instituto Nacional Electoral y no ver acá intereses de poder y manipulación, y alejarse de su irracional embate al IEEZ, que a decir de sus verdaderos adversarios y dirigentes de otros partidos, solo exhibe fragilidad política y electoral ante el reto que significa la campaña y frente a los comicios del 6 de junio. Inútil la beligerancia.