/ miércoles 29 de julio de 2020

Crónica del poder │ Monreal, infamante a la ofensiva

Como el exgobernador Ricardo Monreal no ajusta con el poder que allá ejerce como el más avezado operador político de la cuarta transformación, el fin de semana anterior irrumpió en Zacatecas para alterar el grave inmovilismo político que aquí de vive y como en sus tiempos de dominio absoluto, su imagen de político escritor intentó adueñarse de la cobertura informativa, una pasión que también comparte con el presidente Andrés Manuel López Obrador, y lo hizo con la presentación de su último libro, "La infamia ", que primero le cantó al comunicador Pancho Esparza y al día siguiente extendió a toda la familia periodística del estado.

Los busque o no, el ahora Senador morenista, siempre atrae los reflectores, cámaras y micrófonos, y como siempre, su estilo espectacular logró el impacto mediático, más que deseado, bien pensado y mejor calculado, porque de sacudir la vida política se trató y lo logró. Esa ha sido su trayectoria a su paso por los 5 partidos en los que ha militado, PRI, PRD, PT, MC y MORENA y resulta obvio que busca recuperar su movimiento monrealista, rehacerlo, robustecerlo para otra vez sorprender y reconquistar el Palacio de Gobierno para alguno de sus hermanos, David o Saúl, Saúl o David, esa es la ruta que se ha trazado hacia el 6 de junio de 2021 y tiene todo para cumplirlo.

Sus temas y expresiones, posturas y pronunciamientos que repercutieron aquí, no tienen desperdicio, como su líder en el Palacio Nacional, siempre da nota y de qué hablar, porque eso es lo que les encanta, les apasiona, los mantiene en la opinión pública generando polémica, debate, críticas, cuestionamientos, rechazos, halagos, reconocimiento, todo según el color del lente con que se vean e interpreten.

El líder de la dinastía Monreal, que no niega su devoción al Santo Niño de Plateros, ni su lealtad a López Obrador, dijo sus verdades que bien sacudieron la modorra de la clase política zacatecana. Alejandro Tello no se prestará a la guerra sucia, aseguró para entrar al contexto crítico sobre sus sucesores Amalia García Medina y Miguel Alonso, a quienes sí señaló como sus detractores y promotores de esa infamia con la que ahora se victimiza. Y le asiste razón, porque el gobernador Tello se ha caracterizado por actuar con mesura, prudencia, paciencia, tolerancia y evitado la confrontación o descalificación sobre los adversarios de cualquier color; sin embargo, Monreal sólo cuestionó que Alejandro Tello no haya exigido cuentas a Miguel Alonso Reyes, y punto.

El infamante busca trascender al 2024

Incisivo como es en sus entrevistas, Pancho Esparza le arrancó a Ricardo Monreal esa otra meta, compromiso y sueño que pretende alcanzar: Estoy preparado para ser Presidente de México.

Recordemos que como Gobernador, allá por el 2002 ya pintó ese gran desafío y fue el ahora Presidente del Tribunal Superior de Justicia, Arturo Nahle García, el responsable de promover aquel efímero movimiento Epicentro 2000, con el que alteró a Vicente Fox. Sin duda y porque tiene el arrojo, las agallas, la audacia, trayectoria, liderazgo e inteligencia política, el fresnillense estará en esa batalla por suceder a Andrés Manuel López Obrador, en la que primero tendrá que vencer a Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum, pero de que luchará no hay dudas y los cauces se le abren y las oportunidades también. En eso anda a diario.

Como el exgobernador Ricardo Monreal no ajusta con el poder que allá ejerce como el más avezado operador político de la cuarta transformación, el fin de semana anterior irrumpió en Zacatecas para alterar el grave inmovilismo político que aquí de vive y como en sus tiempos de dominio absoluto, su imagen de político escritor intentó adueñarse de la cobertura informativa, una pasión que también comparte con el presidente Andrés Manuel López Obrador, y lo hizo con la presentación de su último libro, "La infamia ", que primero le cantó al comunicador Pancho Esparza y al día siguiente extendió a toda la familia periodística del estado.

Los busque o no, el ahora Senador morenista, siempre atrae los reflectores, cámaras y micrófonos, y como siempre, su estilo espectacular logró el impacto mediático, más que deseado, bien pensado y mejor calculado, porque de sacudir la vida política se trató y lo logró. Esa ha sido su trayectoria a su paso por los 5 partidos en los que ha militado, PRI, PRD, PT, MC y MORENA y resulta obvio que busca recuperar su movimiento monrealista, rehacerlo, robustecerlo para otra vez sorprender y reconquistar el Palacio de Gobierno para alguno de sus hermanos, David o Saúl, Saúl o David, esa es la ruta que se ha trazado hacia el 6 de junio de 2021 y tiene todo para cumplirlo.

Sus temas y expresiones, posturas y pronunciamientos que repercutieron aquí, no tienen desperdicio, como su líder en el Palacio Nacional, siempre da nota y de qué hablar, porque eso es lo que les encanta, les apasiona, los mantiene en la opinión pública generando polémica, debate, críticas, cuestionamientos, rechazos, halagos, reconocimiento, todo según el color del lente con que se vean e interpreten.

El líder de la dinastía Monreal, que no niega su devoción al Santo Niño de Plateros, ni su lealtad a López Obrador, dijo sus verdades que bien sacudieron la modorra de la clase política zacatecana. Alejandro Tello no se prestará a la guerra sucia, aseguró para entrar al contexto crítico sobre sus sucesores Amalia García Medina y Miguel Alonso, a quienes sí señaló como sus detractores y promotores de esa infamia con la que ahora se victimiza. Y le asiste razón, porque el gobernador Tello se ha caracterizado por actuar con mesura, prudencia, paciencia, tolerancia y evitado la confrontación o descalificación sobre los adversarios de cualquier color; sin embargo, Monreal sólo cuestionó que Alejandro Tello no haya exigido cuentas a Miguel Alonso Reyes, y punto.

El infamante busca trascender al 2024

Incisivo como es en sus entrevistas, Pancho Esparza le arrancó a Ricardo Monreal esa otra meta, compromiso y sueño que pretende alcanzar: Estoy preparado para ser Presidente de México.

Recordemos que como Gobernador, allá por el 2002 ya pintó ese gran desafío y fue el ahora Presidente del Tribunal Superior de Justicia, Arturo Nahle García, el responsable de promover aquel efímero movimiento Epicentro 2000, con el que alteró a Vicente Fox. Sin duda y porque tiene el arrojo, las agallas, la audacia, trayectoria, liderazgo e inteligencia política, el fresnillense estará en esa batalla por suceder a Andrés Manuel López Obrador, en la que primero tendrá que vencer a Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum, pero de que luchará no hay dudas y los cauces se le abren y las oportunidades también. En eso anda a diario.