Acertada la estrategia político electoral de los Partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática, PAN-PRI-PRD. Han entendido que están frente a un poderoso adversario que desde el poder presidencial y a través de sus partidos aliados, Morena, PT y Verde Ecologista, ya optimizan recursos para conquistar estados y municipios y sobre todo, consolidar su mayoría en la Cámara de Diputados. Han admitido y aceptado que a través del diálogo respetuoso, ensamblando coincidencias y reconociendo diferencias, se puede negociar hasta llegar a los acuerdos que comprenden ceder en algo y también ganar, para finalmente compartir el poder y construir un gobierno de coalición.
Para los partidos en el poder nacional, ya no será fácil ostentar desde ya un triunfalismo adelantado y para los aliados en el poder estatal, será más difícil vencer en la batalla por Zacatecas, pero como la ruta democrática está más que abierta con oportunidades para los más inteligentes, prudentes, estratégicos y respetuosos del adversario y de los ciudadanos, el desafío está a la vista y los colectivos partidistas tendrán que multiplicar fuerzas, sublimar sus proyectos y programas. No se desconoce que en el escenario 2021, estarán otros actores como los nuevos partidos y los partidos locales, además de los candidatos independientes que no tardan en irrumpir para más fortalecer las vías democráticas hacia comicios verdaderamente participativos, pero eso sí, vigilados como nunca, fiscalizados en tiempo real y con la organización y promoción de instituciones electorales, el INE y el IEEZ, que actúan con transparencia, equidad e imparcialidad.
Se advierte que los actores y protagonistas de la alianza PAN-PRI-PRD, están marcados por el optimismo y lanzados adelante, convencidos de asumir la vanguardia bajo el liderazgo de Adolfo Bonilla Gómez. A la dirigencia estatal del PRI debió llegar Enrique Flores Mendoza, para acelerar el proceso de conciliación, concertación y coalición; Noemí Berenice Luna por el PAN y Arturo Ortiz Méndez, del PRD, consolidaron el acercamiento y lograron entendimientos. Sus cuadros dirigentes, activistas y militantes ya proceden a legitimar sus presencias y a generar las mejores condiciones para concretar los acuerdos sobre las 4 diputaciones federales, las 30 diputaciones locales y los 58 ayuntamientos, todos con el aval de la unanimidad y sus diferencias han aceptado las reglas del juego, dispuestos a construir un proceso democrático, creíble y más confiable ante la sociedad y los ciudadanos.
Al mismo tiempo y desde el seno de esa Alianza Zacatecas, el diputado Pedro Martínez Flores del PAN, reitera aspiraciones por la gubernatura y comete el grave error estratégico de agigantar y fortalecer al probable adversario, al afirmar que David Monreal es el candidato a vencer, y exhibe debilidad, fragilidad e inconsistencia de su partidos y aliados.
Simular unidad en batalla
Será anticipar un rotundo fracaso electoral, panistas, priistas y perredistas no deben ignorar que actuar así, solo de dientes para afuera, sin veracidad, ni franqueza ni autenticidad, será tanto como entregar el poder a los adversarios, los que todavía no alcanzan a dimensionar que viven fracturados, enfrentados y divididos, pero que no se duda que ante la voz de mando de su máximo líder Andrés Manuel López Obrador, estarán obligados a enlazar potencialidades y a sostener la más vigorosa ofensiva en todos los frentes.
