Efectivamente y como bien lo expuso David Monreal, éste ha sido un triunfo irreversible y contundente que lo hará llegar con legitimidad al Palacio de Gobierno, para dar inicio y de inmediato a su estrategia de transformación acorde con la ruta establecida por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El desenlace electoral del domingo 6 de junio fue consecuente con lo también manifestado por el maestro Virgilio Rivera Delgadillo, el consejero presidente del Instituto Electoral del Estado de Zacatecas, al señalar que "en esta elección se juega el presente y futuro de la relación política, entre el Presidente de la República con las autoridades de las entidades federativas y fundamentalmente de la relación que éste habrá de mantener con las Cámaras al Congreso de la Unión" y para ello Zacatecas contribuye con valiosa aportación política, porque bien se sabe de la óptima relación del virtual gobernador electo con el Jefe de la Nación.
De esta forma, "unidos en nuestra diversidad ocurriendo a la democracia para procesar las diferencias de modo civilizado y ajeno a toda manifestación de violencia, con esta magna y trascendental elección, se refrenda la vocación democrática del estado, la confirmación de la vía pacífica y en estabilidad social y política del país; en síntesis, paz social y no a la violencia". Sobreviene pues la expresión del pacto y los acuerdos hacia la solución de los grandes y graves problemas nacionales y estatales. La renovación ordenada de las autoridades y gobiernos del estado y los municipios, para juntos proceder a encarar la emergencia nacional con la comunión social que David Monreal ha profesado durante toda su campaña.
Ha sido alentador que una vez conocidos los resultados preliminares, el virtual gobernador electo, ofreció que a partir de hoy la contienda quede atrás para avanzar todos en unidad, para trabajar hombro con hombro con los que votaron por unos y por otros, a fin de construir y recuperar un Zacatecas más fuerte, próspero, pero sobre todo unido por la armoniosa y más saludable conciliación. O sea, se entiende que David Monreal asume con responsabilidad, que al cumplirse "la tercera vez", deja de lado arrogancia y demuestra que sabe ganar y reconocer que las otras fuerzas no fueron derrotadas, simplemente no cumplieron su meta que era como hoy la suya, y que juntos han de vivir la fiesta de la democracia y de la transformación.
Con este horizonte abierto a la conciliación y unidad, los zacatecanos todos y todas, han de transitar de la lógica del derrotismo y el confinamiento, a la lógica de los nuevos retos y mayores desafíos, porque las batallas que vienen tienen que ser por la construcción en armonía social y convivencia política que propicien y abran cauces que más aceleran el desarrollo. La tortuosa campaña electoral concluyó y ahora viene la conjunción de todos los esfuerzos para afrontar las demoledoras crisis pandémica, económica, de violencia e inseguridad, encaminados precisamente tras los ideales políticos que la modernidad impone como transformaciones en medio de plenas libertades.
Por lo pronto, aprovecho este espacio para manifestar gratitud a nuestra audiencia de crónica del poder en su edición radiofónica que ayer cerró un ciclo más, con la gran satisfacción de haber logrado equilibrios, equidad e integración de la pluralidad política e ideológica. Mil gracias.
