De la hegemonía priista a la morena, lo mismo
Son 103 las organizaciones sociales y civiles que ante el Instituto Nacional Electoral han registrado su intención de convertirse en partidos políticos, lo que más ratifica un proceso de fragmentación de la oposición, cuya dispersión más la debilita ante la indiscutible fortaleza que ya es hegemónica del Partido Movimiento de Regeneración Nacional, el Morena. O sea, aquí no hay cuarta transformación, porque el cambio llegó para seguir igual, en otra hegemonía política como la del otrora Partido Revolucionario Institucional, con la variante de un liderazgo absoluto, centralista y más presidencialista que el presidencialismo priista, ni dudas caben.
Después del primero de julio del 2018, la fuerza político electoral del PRI quedó demolida, su potencialidad agotada y de pronto, transferida al Morena, ahora vigoroso partido conducido por expriistas que durante décadas fueron prepotentes, arrogantes y orgullosos, virtudes que ahora ostentan los dirigentes morenistas.
El PRD está peor que fracturado, casi casi desvanecido, en extinción. Sus dirigentes, que lo son sin militantes, no hayan la puerta de salida hacia la recuperación o la reencarnación en otra figura y en otras siglas. El PAN se mantiene con sus raíces y fiel a su conservadurismo, es una fuerza que puede continuar con vida y consolidarse como férrea oposición de derecha, capaz de encarar con argumentos y cuestionamientos críticos al nuevo gobierno de la República. El Verde Ecologista y Nueva Alianza casi mueren de inanición; el Partido del Trabajo y el PES, sobreviven como aliados del Presidente, no del Morena; y el Movimiento Ciudadano, desde Jalisco de ENRIQUE ALFARO, está en ascenso y crecimiento regional. Todo un colectivo de partidos divididos y confrontados.
Fragmentados, divididos y dispersos, pronto deberán entender que solo como amplio frente pueden oponerse en serio a la nueva hegemonía del Morena, que así los promueve desde el poder, fraccionados y confrontados. Por eso, la hegemonía es para mucho rato.
Impotencias e impotentes:
RICARDO MONREAL otra vez le canta al oído a TELLO CRISTERNA, le reconoce la victoria del Impuesto Ecológico, le vaticina recuperación del Fondo Minero y que tiene su apoyo, aunque nada hizo por el presupuesto. Hace ambiente para sus hermanos, no da paso sin huarache.
SI MIGUEL ALONSO avanza con sus cuadros al seno del PRI, RICARDO MONREAL lo hace en la Legislatura al impulsar a LE ROY BARRAGÁN a la Secretaría, como ya tiene al magistrado ARTURO NAHLE en el Poder Judicial. Hacer pausas es falacia.
ULISES MEJÍA no se ha dado cuenta que por lo pronto, para Zacatecas no hay Fondo Minero; al menos que ya tenga recursos amarrados con LÓPEZ OBRADOR, lo cual sería gran acierto. Bien vale la pena que apoye a TELLO sobre la controversia constitucional.
PACO IGNACIO TAIBO II, el novelista encargado del Fondo de Cultura Económica, asegura que la visión piista de un estado lleno de oropeles y tonterías, se acabó. Con fobia, insiste en la tontería de meterla doblada al PRI.
