/ miércoles 5 de febrero de 2020

Crónica del poder

URGE FORJAR UN MEJOR DESTINO A ZACATECAS

Se fue enero, avanza febrero y el quinquenio se agota, y lo grave y más lamentable, es que la meta trazada por ALEJANDRO TELLO para consolidar su gobierno en 2020 y generar condiciones para una salida airosa, exitosa, incuestionable y feliz en 2021, se desvanece o cuando menos se retrasa y no le alcanzará para trascender y producir con vigoroso liderazgo, una imborrable huella.

Lo más en riesgo, es que no logrará autoridad moral ni política para contribuir con su partido a refrendar la gubernatura, le pueden faltar muchos votos para reconquistar el poder casi perdido.

Ante la cercanía de las elecciones 2021, de gobernador, diputados federales y locales, y ayuntamientos, TELLO está obligado a forjar el destino de Zacatecas a partir de su gobierno o de plano meterse a una gradual declinación para que la cuarta transformación entre con todo, como ya se vio ayer en el Tribunal Superior de Justicia, otro espacio de poder perdido por el Ejecutivo.

La cuestión es modificar estrategias y hacer los urgentes cambios en su gabinete o dejar hacer y dejar pasar a los adversarios, que no se andan por las ramas, aunque sean 6 ó 7 los grupos que se disputan la oportunidad de relevarlo en el Palacio de Gobierno. En este escenario que se prometió y ofertó renovador, la fragilidad y debilidad de la estructura gubernamental, hace que la percepción ciudadana sea la de un gobierno endeble e inerme en lo político, sin desconocer que hay fortalezas en la administración y el inteligente manejo financiero, virtudes que también hay que reconocer, como reflejos de la honestidad y transparencia, una ruta que ha sido invariable, pero que sus asesores y comunicadores no la han hecho suficientemente redituable en el escenario político.

A estas alturas del quinquenio, ya todo gira en torno al proceso electoral 2021, y las mejores acciones que apuntalan a este gobierno, sobrevienen de las Secretarías de Finanzas, del Campo, Educación y Desarrollo Urbano y Vivienda, o sea, desde esos espacios el gobierno se mantienen a flote y en los demás frentes atoran o estiran hacia el retroceso o estancamiento, anulación que ya debe ser disipada.

EN OTRAS PALABRAS...

El desenlace en el Poder Judicial hace todavía más urgente que sucedan los cambios en el gabinete; que los aspirantes a la gubernatura se separen de su responsabilidad; que la operatividad política e interlocución con la sociedad y los partidos decida una práctica más aperturista o que deje los espacios a otros activismos más reales, contundentes, visionarios e inteligentes; que las fallidas estrategias de seguridad ya sean canceladas y sustituidas por otras más eficaces o que sean designados otros conductores más avezados, efectivos y con los resultados que la población exige.

El tamaño del desafío es inmenso y en nombre de la racionalidad, ALEJANDRO TELLO ya debe decidir un enfoque renovador y más progresista y dinámico a su gobierno, darles vigoroso empuje a los sectores de la economía y el turismo, donde la mediocridad y el minimalismo anidan y no muestran voluntad ni convicción en la promoción y defensa de los intereses del estado.

URGE FORJAR UN MEJOR DESTINO A ZACATECAS

Se fue enero, avanza febrero y el quinquenio se agota, y lo grave y más lamentable, es que la meta trazada por ALEJANDRO TELLO para consolidar su gobierno en 2020 y generar condiciones para una salida airosa, exitosa, incuestionable y feliz en 2021, se desvanece o cuando menos se retrasa y no le alcanzará para trascender y producir con vigoroso liderazgo, una imborrable huella.

Lo más en riesgo, es que no logrará autoridad moral ni política para contribuir con su partido a refrendar la gubernatura, le pueden faltar muchos votos para reconquistar el poder casi perdido.

Ante la cercanía de las elecciones 2021, de gobernador, diputados federales y locales, y ayuntamientos, TELLO está obligado a forjar el destino de Zacatecas a partir de su gobierno o de plano meterse a una gradual declinación para que la cuarta transformación entre con todo, como ya se vio ayer en el Tribunal Superior de Justicia, otro espacio de poder perdido por el Ejecutivo.

La cuestión es modificar estrategias y hacer los urgentes cambios en su gabinete o dejar hacer y dejar pasar a los adversarios, que no se andan por las ramas, aunque sean 6 ó 7 los grupos que se disputan la oportunidad de relevarlo en el Palacio de Gobierno. En este escenario que se prometió y ofertó renovador, la fragilidad y debilidad de la estructura gubernamental, hace que la percepción ciudadana sea la de un gobierno endeble e inerme en lo político, sin desconocer que hay fortalezas en la administración y el inteligente manejo financiero, virtudes que también hay que reconocer, como reflejos de la honestidad y transparencia, una ruta que ha sido invariable, pero que sus asesores y comunicadores no la han hecho suficientemente redituable en el escenario político.

A estas alturas del quinquenio, ya todo gira en torno al proceso electoral 2021, y las mejores acciones que apuntalan a este gobierno, sobrevienen de las Secretarías de Finanzas, del Campo, Educación y Desarrollo Urbano y Vivienda, o sea, desde esos espacios el gobierno se mantienen a flote y en los demás frentes atoran o estiran hacia el retroceso o estancamiento, anulación que ya debe ser disipada.

EN OTRAS PALABRAS...

El desenlace en el Poder Judicial hace todavía más urgente que sucedan los cambios en el gabinete; que los aspirantes a la gubernatura se separen de su responsabilidad; que la operatividad política e interlocución con la sociedad y los partidos decida una práctica más aperturista o que deje los espacios a otros activismos más reales, contundentes, visionarios e inteligentes; que las fallidas estrategias de seguridad ya sean canceladas y sustituidas por otras más eficaces o que sean designados otros conductores más avezados, efectivos y con los resultados que la población exige.

El tamaño del desafío es inmenso y en nombre de la racionalidad, ALEJANDRO TELLO ya debe decidir un enfoque renovador y más progresista y dinámico a su gobierno, darles vigoroso empuje a los sectores de la economía y el turismo, donde la mediocridad y el minimalismo anidan y no muestran voluntad ni convicción en la promoción y defensa de los intereses del estado.