COVID 19, OTRO DESAFÍO A VENCER POR TODOS
Frente a la incertidumbre y confusión que la crisis sanitaria ha reproducido con dosis de miedo y más preocupación, la gente ya comienza a poner los pies en el suelo y creer en la realidad que pinta fatídica; la alerta y alarma por el coronavirus ya es del dominio público y para evitar los rumores y especulación, más se confía en las instituciones de salud y en los medios informativos que con responsabilidad dan seguimiento al acontecer de la pandemia en el mundo y nuestro país, y por consecuencia, la credibilidad sobre las reglas que se promueven, se extiende.
La gran coincidencia empresarial local, desde MANUEL PÉREZ HERNÁNDEZ, de la CANACOZAC; CARLOS DE LA TORRE, de CANIRAC; EDUARDO DEL REAL, de Agencias de Viajes; RAÚL MUÑOZ DEL COJO, de Hoteles, y ALEJANDRO ENRIQUEZ, de la COPARMEX, late como una experiencia demoledora de la economía, como no se había sufrido ni resentido en décadas; y junto a los gobiernos estatal y municipales, asumen compromisos de protección y defensa de la sociedad y de los grupos más vulnerables, en busca de seguridad, al tiempo que apelan a que el gobierno federal de ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, reaccione oportuno y acertadamente a la contención del destructivo virus. Y sobre todo, que multiplique sus acciones de gobierno para que sean mitigados los efectos a la salud y economía.
Nadie en Zacatecas duda que ante la crisis sanitaria, también brota la oportunidad que abre cauces a la edificación de este nuevo sistema político que han denominado la cuarta transformación, y que, como en otros momentos críticos de la historia, el actual régimen le apuesta a orientan todos los esfuerzos presupuestales para encarar y resolver las crisis de violencia, inseguridad, estancamiento económico y ahora el pavoroso COVID 19, que ya cobró la primera víctima y lamentablemente, es de esperar mayor letalidad.
La percepción social es que en el estado, ALEJANDRO TELLO y los alcaldes liderados por SAÚL MONREAL y ULÍSES MEJÍA, utilizan todos los recursos en favor de los gobernados, ricos y pobres, y con más énfasis en los desposeídos a los que menos tienen y que más necesitan del auxilio y respaldo. Hay pues una presencia y real accionar de las autoridades dispuestas a exorcizar ese mal que crece y amenaza con arraigarse en las comunidades. Esto significa cohesionar esfuerzos, conjuntar creatividad y salir con todo a vencer esos graves obstáculos al crecimiento y progreso, lo que también traduce, que se hacen a un lado las diferencias políticas, la polarización y la confrontación de fuerzas para enfrentar con unidad y solidez a ese sorprendente y negativo enemigo de la salud social.
LAS AMBICIONES ELECTORALES
Que aunque legítimas y muy personales, han de esperar como tregua en la batalla hacia el 2021. Aquí la fuerza hegemónica de los gobiernos e instituciones de la pluralidad, ha de actuar con toda su potencialidad para vencer esos obstáculos que se alzan ominosos y mortales, hasta diluirlos o desvanecerlos como riesgos o peligros. Pero más allá de esas fatalidades, lo que la sociedad espera y exige, es que ésta etapa de cambio cultural en la salud e higiene personal y familiar, ya evite o cancele divisiones, odios, rencores, mediocridad, ingobernabilidad y la inestabilidad política y social, y que sea reencontrada la convivencia respetuosa y la civilidad para construir una mejor democracia.
