/ viernes 9 de octubre de 2020

Crónica del poder │Juicio popular a los ex presidentes

En la perspectiva espectacular del nuevo régimen y a propósito de los espectáculos que se utilizan para vender imagen y vendar a la sociedad ante las devastadoras crisis sanitaria, económica y de inseguridad, la gente puede imaginar una conferencia de prensa también mañanera o vespertina convocada por los expresidentes Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quezada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, para exigir presentación de pruebas, denuncias y legalidad ante el juicio popular que se pretende con la consulta popular propuesta por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Hablamos de un posible escenario e imaginario mediático donde los expresidentes podrán encarar los dichos y críticas del Presidente López Obrador a sus respectivos gobiernos. La Unidad de Inteligencia Financiera ha declarado que los posibles delitos de Salinas y Fox ya prescribieron, y que Calderón como Peña Nieto pueden ser investigados. O sea, más reflectores para quienes los necesitan y más distracción para la gente, una cultura política que nada tienen de democrática y mucho de protagonismo y arrogancia desde el poder, que a la luz de las experiencias electorales, más que atraer a los ciudadanos a las urnas, los alejan para engrosar las franjas de la abstención y decepción.

Sin embargo, sería un hecho histórico al seno de la Cuarta Transformación, como así lo promueven los principales actores en el gabinete presidencial y los morenistas en las cámaras legisladoras. Una gran oportunidad para que los mexicanos reflexionen acerca de los estilos de gobierno, la corrupción y la impunidad de que se acusan a los ex Presidentes de la República. El Senador Ricardo Monreal ha entregado buenas cuentas a López Obrador, al haber logrado en el Senado la aprobación de la consulta popular que fue avalada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación y que el zacatecano pretende coincida en la elección del 6 de junio del 2021.

Frente a esa decisión de los Poderes Judicial y Legislativo en atención al Poder Ejecutivo, que se argumenta como defensa de la legalidad del ejercicio democrático, la oposición del PAN, PRI y PRD denunciaron un espectáculo circense y retaron a que sean presentadas denuncias contra los ex Presidentes ante la Fiscalía General de la República, un debate que se degradó con insultos, injurias, hasta golpes entre senadores y senadoras, consecuencia que más arrecia y profundiza una crisis política como penoso preámbulo ante las elecciones 2021.

Generar confianza y credibilidad

En el proceso electoral es el objetivo de las instituciones electorales, partidos y ciudadanos, por eso y al contrario de la propuesta de Ricardo Monreal para empatar la consulta popular con las elecciones del 6 de junio, el Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova Vianello, hizo un llamado a evitar la polarización mezclada con dosis de intolerancia y pronto opinó que la consulta sobre los actores políticos del pasado ( Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto) será en agosto, porque no se puede hacer durante la elección, tema que ya constituye otro debate que más alentará la confrontación política e ideológica, más división entre los mexicanos. Se advierte que a las crisis de inseguridad, económica y de la pandemia, se intriga para agregar la más peligrosa crisis política.

En la perspectiva espectacular del nuevo régimen y a propósito de los espectáculos que se utilizan para vender imagen y vendar a la sociedad ante las devastadoras crisis sanitaria, económica y de inseguridad, la gente puede imaginar una conferencia de prensa también mañanera o vespertina convocada por los expresidentes Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quezada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, para exigir presentación de pruebas, denuncias y legalidad ante el juicio popular que se pretende con la consulta popular propuesta por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Hablamos de un posible escenario e imaginario mediático donde los expresidentes podrán encarar los dichos y críticas del Presidente López Obrador a sus respectivos gobiernos. La Unidad de Inteligencia Financiera ha declarado que los posibles delitos de Salinas y Fox ya prescribieron, y que Calderón como Peña Nieto pueden ser investigados. O sea, más reflectores para quienes los necesitan y más distracción para la gente, una cultura política que nada tienen de democrática y mucho de protagonismo y arrogancia desde el poder, que a la luz de las experiencias electorales, más que atraer a los ciudadanos a las urnas, los alejan para engrosar las franjas de la abstención y decepción.

Sin embargo, sería un hecho histórico al seno de la Cuarta Transformación, como así lo promueven los principales actores en el gabinete presidencial y los morenistas en las cámaras legisladoras. Una gran oportunidad para que los mexicanos reflexionen acerca de los estilos de gobierno, la corrupción y la impunidad de que se acusan a los ex Presidentes de la República. El Senador Ricardo Monreal ha entregado buenas cuentas a López Obrador, al haber logrado en el Senado la aprobación de la consulta popular que fue avalada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación y que el zacatecano pretende coincida en la elección del 6 de junio del 2021.

Frente a esa decisión de los Poderes Judicial y Legislativo en atención al Poder Ejecutivo, que se argumenta como defensa de la legalidad del ejercicio democrático, la oposición del PAN, PRI y PRD denunciaron un espectáculo circense y retaron a que sean presentadas denuncias contra los ex Presidentes ante la Fiscalía General de la República, un debate que se degradó con insultos, injurias, hasta golpes entre senadores y senadoras, consecuencia que más arrecia y profundiza una crisis política como penoso preámbulo ante las elecciones 2021.

Generar confianza y credibilidad

En el proceso electoral es el objetivo de las instituciones electorales, partidos y ciudadanos, por eso y al contrario de la propuesta de Ricardo Monreal para empatar la consulta popular con las elecciones del 6 de junio, el Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova Vianello, hizo un llamado a evitar la polarización mezclada con dosis de intolerancia y pronto opinó que la consulta sobre los actores políticos del pasado ( Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto) será en agosto, porque no se puede hacer durante la elección, tema que ya constituye otro debate que más alentará la confrontación política e ideológica, más división entre los mexicanos. Se advierte que a las crisis de inseguridad, económica y de la pandemia, se intriga para agregar la más peligrosa crisis política.