/ lunes 22 de febrero de 2021

Crónica del poder | Repetir errores será el ocaso político

David Monreal siente que su vida política está dando un giro y advierte que su sueño de gobernar Zacatecas puede cristalizar. La política de alianzas partidistas lo han hecho entrar a una competencia en la que aparece con supremacía. Ha vivido una década y este año de grandes experiencias electorales, que lo han regresado a la batalla con madurez y más firme convicción en una victoria electoral, ahora alentado por los liderazgos del poderoso presidente Andrés Manuel López Obrador y el más audaz operador político del presidente, su hermano mayor, el senador Ricardo Monreal Ávila.

En 2010 aparece por primera vez en la contienda por el Palacio de Gobierno, como abanderado del Partido del Trabajo y teniendo como adversarios a Miguel Alonso Reyes, de la alianza PRI, Verde Ecologista y Nueva Alianza; Antonio Mejía Haro, del PRD; por el PAN, Cuauhtémoc Calderón. En 2016, David fue postulado por el Partido Movimiento de Regeneración Nacional, el Morena; en competencia con Alejandro Tello Cristerna, por el PRI, PVEM y Nueva Alianza; Rafael Flores Mendoza, de la coalición PAN-PRD; Magdalena Núñez Monreal, del PT; Marco Flores, por el Partido Encuentro Social; y los candidatos independientes Alma Rosa Ollervides y Rogelio Soto.

Ahora se advierte, que los Partidos Verde Ecologista y Nueva Alianza, abandonan a Miguel Alonso y Alejandro Tello y hacen coalición con Morena y David Monreal; el Partido del Trabajo recupera la candidatura de David Monreal en la alianza Juntos Hacemos Historia; Cuauhtémoc Calderón es cuadro político ya identificado con David; y Rafael Flores sorprende moviéndose hacia Morena como candidato a diputado federal por la vía plurinominal, y claro, en apoyo a David Monreal. Y Alma Rosa Ollervides sería candidata por el PES. Magdalena Núñez, puede no querer sumarse, pero su lealtad y disciplina al PT, es invariable.

Las dos batallas perdidas por David han sido por no lograr un entorno fuerte de cuadros políticos o periferia de hábiles e inteligentes operadores. Hoy tiene a López Obrador y a Ricardo como los más valiosos activos políticos, y en correspondencia a esa poderosa dupla que garantizan el triunfo, tiene que armar un equipo de notables figuras, perfiles y personajes sin deterioro, sin desgaste, sin cola que les pisen, que no correspondan al esquema de los innombrables que ya su hermano el Senador descalificó. O sea, si percibe tener el triunfo en las manos, no debe cometer los errores de 2016, ni asumir innecesario y vano triunfalismo, porque puede sobrevenir el tercer colapso.

El impacto de los desprendimientos

Que a diario anuncia, apenas impresiona numéricamente, pero cualitativamente deja mucho que desear. Son grupos de políticos que han sido recuperados como deshechos que no alcanzaron las oportunidades de candidatura en otros partidos. Es bueno que David y su alianza abran los brazos para atracción de votos y promotores eficaces, pero lo que no exhibe ni muestra son frescos y nuevos adherentes que revelen las más elocuentes expectativas, no solo de lealtad, disciplina y compromiso, sino de la más vigorosa creatividad y visionaria estrategia para consolidar la comunión social que profesa y alcanzar la economía social que el presidente López Obrador promueve, para mejorar la calidad de vida de los miles de zacatecanos que todavía viven en la pobreza.

David Monreal siente que su vida política está dando un giro y advierte que su sueño de gobernar Zacatecas puede cristalizar. La política de alianzas partidistas lo han hecho entrar a una competencia en la que aparece con supremacía. Ha vivido una década y este año de grandes experiencias electorales, que lo han regresado a la batalla con madurez y más firme convicción en una victoria electoral, ahora alentado por los liderazgos del poderoso presidente Andrés Manuel López Obrador y el más audaz operador político del presidente, su hermano mayor, el senador Ricardo Monreal Ávila.

En 2010 aparece por primera vez en la contienda por el Palacio de Gobierno, como abanderado del Partido del Trabajo y teniendo como adversarios a Miguel Alonso Reyes, de la alianza PRI, Verde Ecologista y Nueva Alianza; Antonio Mejía Haro, del PRD; por el PAN, Cuauhtémoc Calderón. En 2016, David fue postulado por el Partido Movimiento de Regeneración Nacional, el Morena; en competencia con Alejandro Tello Cristerna, por el PRI, PVEM y Nueva Alianza; Rafael Flores Mendoza, de la coalición PAN-PRD; Magdalena Núñez Monreal, del PT; Marco Flores, por el Partido Encuentro Social; y los candidatos independientes Alma Rosa Ollervides y Rogelio Soto.

Ahora se advierte, que los Partidos Verde Ecologista y Nueva Alianza, abandonan a Miguel Alonso y Alejandro Tello y hacen coalición con Morena y David Monreal; el Partido del Trabajo recupera la candidatura de David Monreal en la alianza Juntos Hacemos Historia; Cuauhtémoc Calderón es cuadro político ya identificado con David; y Rafael Flores sorprende moviéndose hacia Morena como candidato a diputado federal por la vía plurinominal, y claro, en apoyo a David Monreal. Y Alma Rosa Ollervides sería candidata por el PES. Magdalena Núñez, puede no querer sumarse, pero su lealtad y disciplina al PT, es invariable.

Las dos batallas perdidas por David han sido por no lograr un entorno fuerte de cuadros políticos o periferia de hábiles e inteligentes operadores. Hoy tiene a López Obrador y a Ricardo como los más valiosos activos políticos, y en correspondencia a esa poderosa dupla que garantizan el triunfo, tiene que armar un equipo de notables figuras, perfiles y personajes sin deterioro, sin desgaste, sin cola que les pisen, que no correspondan al esquema de los innombrables que ya su hermano el Senador descalificó. O sea, si percibe tener el triunfo en las manos, no debe cometer los errores de 2016, ni asumir innecesario y vano triunfalismo, porque puede sobrevenir el tercer colapso.

El impacto de los desprendimientos

Que a diario anuncia, apenas impresiona numéricamente, pero cualitativamente deja mucho que desear. Son grupos de políticos que han sido recuperados como deshechos que no alcanzaron las oportunidades de candidatura en otros partidos. Es bueno que David y su alianza abran los brazos para atracción de votos y promotores eficaces, pero lo que no exhibe ni muestra son frescos y nuevos adherentes que revelen las más elocuentes expectativas, no solo de lealtad, disciplina y compromiso, sino de la más vigorosa creatividad y visionaria estrategia para consolidar la comunión social que profesa y alcanzar la economía social que el presidente López Obrador promueve, para mejorar la calidad de vida de los miles de zacatecanos que todavía viven en la pobreza.