/ jueves 7 de mayo de 2020

Cultura sustentable y Covid-19

Tema solicitado por mi sobrino José de Jesús Nieto Castro, originario de El Pardillo 3° municipio de Fresnillo, Zacatecas, misionero católico en África y ahora en Metlatonoc, región Montaña del estado de Guerrero. Esta es humilde contribución teórica para jóvenes indígenas de ahí.

SUSTENTABILIDAD es ciencia resultante de conjuntar sociología, economía y ecología, genera conocimientos para una vida integral a futuro desde ahora; De la Real Academia Española se transcribe: CULTURA “Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época y grupo social” y PANDEMIA “Enfermedad epidémica que se extiende a muchos países o ataca a casi todos los individuos de una localidad o región”.

Los efectos mundiales y nacionales por la pandemia de COVID-19 son sociales (relaciones entre personas, la salud y educación); económicas (menor dinámica productiva y comercial); en lo ecológico y medioambiental hay saldo positivo pues especies diferentes al ser humano comienzan a reproducirse, retoman espacios que antiguamente les pertenecían pero la urbanización les arrebató, algunos atribuyen la desaparición del agujero en el polo norte ocasionado por ozono y con ello se revertirá el cambio climático.

Socialmente hay transformación en la forma de pensar y actuar por acatar medidas sanitarias. Redimensionamos la forma de enseñar y aprender donde la escuela deja de ser el principal lugar para educarse pues el internet modifica la relación profesor-alumnado, transforma la mecánica educativa y administrativa pues la educación a distancia adquiere mayor impacto y relevancia. En salud las normas tanto preventivas como remediales cambian nuestras ideas de convivencia, ahora nos cuidamos más de microorganismos y virus. Estos factores sociales, junto con otros, conllevan a repensar la importancia de una verdadera armonía entre humanos, valoramos a quienes siguen sus labores ante la pandemia. Ya damos más importancia a la investigación científica y desarrollo tecnológico. Adquirimos mayor cultura de respeto a la naturaleza (animales, plantas, agua, suelo y aire). En economía se propone reorientar el presupuesto gubernamental para recuperar y fortalecer a sectores claves y lograr verdadero bienestar económico y poblacional, iniciando con el fundamental sector agrícola, seguido del energético, minero, industrial y robustecer desde micro a macro empresas del comercio y servicios.

Estamos en evolución de una cultura sustentable propiciada por actual pandemia y no debemos retroceder, de hacerlo es que los humanos seguimos siendo la especie más inconsciente y destructiva que habita este planeta.

Tema solicitado por mi sobrino José de Jesús Nieto Castro, originario de El Pardillo 3° municipio de Fresnillo, Zacatecas, misionero católico en África y ahora en Metlatonoc, región Montaña del estado de Guerrero. Esta es humilde contribución teórica para jóvenes indígenas de ahí.

SUSTENTABILIDAD es ciencia resultante de conjuntar sociología, economía y ecología, genera conocimientos para una vida integral a futuro desde ahora; De la Real Academia Española se transcribe: CULTURA “Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época y grupo social” y PANDEMIA “Enfermedad epidémica que se extiende a muchos países o ataca a casi todos los individuos de una localidad o región”.

Los efectos mundiales y nacionales por la pandemia de COVID-19 son sociales (relaciones entre personas, la salud y educación); económicas (menor dinámica productiva y comercial); en lo ecológico y medioambiental hay saldo positivo pues especies diferentes al ser humano comienzan a reproducirse, retoman espacios que antiguamente les pertenecían pero la urbanización les arrebató, algunos atribuyen la desaparición del agujero en el polo norte ocasionado por ozono y con ello se revertirá el cambio climático.

Socialmente hay transformación en la forma de pensar y actuar por acatar medidas sanitarias. Redimensionamos la forma de enseñar y aprender donde la escuela deja de ser el principal lugar para educarse pues el internet modifica la relación profesor-alumnado, transforma la mecánica educativa y administrativa pues la educación a distancia adquiere mayor impacto y relevancia. En salud las normas tanto preventivas como remediales cambian nuestras ideas de convivencia, ahora nos cuidamos más de microorganismos y virus. Estos factores sociales, junto con otros, conllevan a repensar la importancia de una verdadera armonía entre humanos, valoramos a quienes siguen sus labores ante la pandemia. Ya damos más importancia a la investigación científica y desarrollo tecnológico. Adquirimos mayor cultura de respeto a la naturaleza (animales, plantas, agua, suelo y aire). En economía se propone reorientar el presupuesto gubernamental para recuperar y fortalecer a sectores claves y lograr verdadero bienestar económico y poblacional, iniciando con el fundamental sector agrícola, seguido del energético, minero, industrial y robustecer desde micro a macro empresas del comercio y servicios.

Estamos en evolución de una cultura sustentable propiciada por actual pandemia y no debemos retroceder, de hacerlo es que los humanos seguimos siendo la especie más inconsciente y destructiva que habita este planeta.