/ domingo 6 de enero de 2019

Día de Reyes

Hoy domingo nos disponemos a celebrar el Día de reyes y por consiguiente la tradicional rosca, por lo tanto, es importante comentar al respecto un poco sobre este delicioso pan que ya es parte de la tradición de los mexicanos en este día tan especial.

La rosca de reyes parece estar relacionada con las saturnales romanas, aunque en la actualidad, algunos la relacionan con una representación complementaria y comestible de la corona de adviento. Estas fiestas eran dedicadas al dios Saturno cuyo objetivo era que el pueblo romano pudiera celebrar los días más largos que empezaban a venir tras el solsticio de invierno. Para estos festejos se elaboraban unas tortas redondas con higos, dátiles y miel, que se repartían por igual entre los plebeyos y esclavos. Ya hacia el siglo III en el interior del pan se introducía un haba seca y el afortunado al que le tocaba era nombrado rey de reyes durante un corto tiempo. La denominada Rosca de Reyes también se le conoce como roscón de reyes, en Hispanoamérica es un bollo elaborado con una masa dulce con forma toroide que contiene también adornos con rodajas de fruta cristalizada y confitada de colores variados, escarchada con azúcar lo que la convierte en un suculento pan clásico de la temporada.

Suele rellenarse de nata, crema, o incluso moka y chocolate y se introducen en su interior pequeños muñecos, cuando fuimos niños hacemos hasta lo imposible por que nos toque; pero ahí de aquel que en alguna convivencia de adultos no se diga oficinas o meriendas familiares al que le toque el muñequito, le tocan los tamales para el día 2 de febrero día de la candelaria y por consiguiente eso representará un gasto extra al bolsillo de quien le toque aunado a la difícil cuesta de enero.

A propósito del muñeco, haba, sorpresa y demás calificativos, se incrustan al pan uno o varios muñecos escondidos alusivos a Jesucristo o al niño Dios, que simbolizan al niño que tuvo que ser escondido y protegido los días de su nacimiento. Originalmente el muñeco se hacía de cerámica o porcelana, pero actualmente es de plástico resistente al calor. Normalmente la cantidad de niños en el pan varía de acuerdo con el tamaño de la rosca aunque puede solicitarse una cantidad determinada e incluso no tener ninguno para evitar la “tamaliza”.

Las sagradas escrituras hablan de unos magos de oriente, pero no dice sus nombres, ni cuantos eran. Ellos después de ser guiados por una estrella durante nueve meses, llegaron a su destino en el punto y hora que la virgen acababa de ser madre. los reyes según se dice eran hermanos, el primero Melchor que imperaba sobre los persas, el segundo Baltasar que prevalecía sobre los indios, y el tercero Gaspar que poseía el país de los árabes. Habiéndose reunido por obediencia del mandato de Dios, se presentaron en Judea en el instante en que María había dado a luz, y habiendo apresurado su marcha, se encontraron en el tiempo preciso del nacimiento de Jesús”. Con el tiempo, en países de tradición católica, se adoptó la costumbre de celebrar al mismo tiempo el día de la Epifanía el 6 de enero y la festividad de los Reyes Magos. Poco a poco, se fue olvidando el significado verdadero de la palabra ''epifanía'' y la convirtió en un sinónimo de ''adoración de los Magos''.

Hoy domingo nos disponemos a celebrar el Día de reyes y por consiguiente la tradicional rosca, por lo tanto, es importante comentar al respecto un poco sobre este delicioso pan que ya es parte de la tradición de los mexicanos en este día tan especial.

La rosca de reyes parece estar relacionada con las saturnales romanas, aunque en la actualidad, algunos la relacionan con una representación complementaria y comestible de la corona de adviento. Estas fiestas eran dedicadas al dios Saturno cuyo objetivo era que el pueblo romano pudiera celebrar los días más largos que empezaban a venir tras el solsticio de invierno. Para estos festejos se elaboraban unas tortas redondas con higos, dátiles y miel, que se repartían por igual entre los plebeyos y esclavos. Ya hacia el siglo III en el interior del pan se introducía un haba seca y el afortunado al que le tocaba era nombrado rey de reyes durante un corto tiempo. La denominada Rosca de Reyes también se le conoce como roscón de reyes, en Hispanoamérica es un bollo elaborado con una masa dulce con forma toroide que contiene también adornos con rodajas de fruta cristalizada y confitada de colores variados, escarchada con azúcar lo que la convierte en un suculento pan clásico de la temporada.

Suele rellenarse de nata, crema, o incluso moka y chocolate y se introducen en su interior pequeños muñecos, cuando fuimos niños hacemos hasta lo imposible por que nos toque; pero ahí de aquel que en alguna convivencia de adultos no se diga oficinas o meriendas familiares al que le toque el muñequito, le tocan los tamales para el día 2 de febrero día de la candelaria y por consiguiente eso representará un gasto extra al bolsillo de quien le toque aunado a la difícil cuesta de enero.

A propósito del muñeco, haba, sorpresa y demás calificativos, se incrustan al pan uno o varios muñecos escondidos alusivos a Jesucristo o al niño Dios, que simbolizan al niño que tuvo que ser escondido y protegido los días de su nacimiento. Originalmente el muñeco se hacía de cerámica o porcelana, pero actualmente es de plástico resistente al calor. Normalmente la cantidad de niños en el pan varía de acuerdo con el tamaño de la rosca aunque puede solicitarse una cantidad determinada e incluso no tener ninguno para evitar la “tamaliza”.

Las sagradas escrituras hablan de unos magos de oriente, pero no dice sus nombres, ni cuantos eran. Ellos después de ser guiados por una estrella durante nueve meses, llegaron a su destino en el punto y hora que la virgen acababa de ser madre. los reyes según se dice eran hermanos, el primero Melchor que imperaba sobre los persas, el segundo Baltasar que prevalecía sobre los indios, y el tercero Gaspar que poseía el país de los árabes. Habiéndose reunido por obediencia del mandato de Dios, se presentaron en Judea en el instante en que María había dado a luz, y habiendo apresurado su marcha, se encontraron en el tiempo preciso del nacimiento de Jesús”. Con el tiempo, en países de tradición católica, se adoptó la costumbre de celebrar al mismo tiempo el día de la Epifanía el 6 de enero y la festividad de los Reyes Magos. Poco a poco, se fue olvidando el significado verdadero de la palabra ''epifanía'' y la convirtió en un sinónimo de ''adoración de los Magos''.