/ domingo 14 de noviembre de 2021

El desfinanciamiento educativo asoma en Zacatecas

Malas noticias asoman para Zacatecas en el decreto de Presupuesto de Egreso de la Federación para el próximo año.

Los diputados aprobaron, por mayoría la propuesta enviada por el Ejecutivo Federal y viene un consistente recorte al financiamiento educativo de la entidad, a menos que en los próximos días, tal como se ha anunciado por parte del gobernador, venga el Presidente Andrés Manuel López Obrador y decida rescatar al magisterio estatal e incorporarlo a la nómina del Fondo de la Nómina Educativa (FONE).

Duro golpe político a las aspiraciones del nuevo gobierno de Zacatecas.

Pero más duro será la condición que enfrenten los secretarios de finanzas y educación de la entidad si es que no existe el “rescate educativo” de Zacatecas, porque las penurias no van a comenzar a mediados del año por venir, sino que estarán batallando apenas inicie el año para cubrir las quincenas del magisterio estatal.

De acuerdo al presupuesto aprobado, se consideró dar al estado 14 mil 105 millones por concepto de Aportaciones Federales para Entidades y Municipios, lo que se traduce en 10 millones más que lo planteado para el 2021, sin embargo el incremento es apenas del .08 por ciento por debajo de la inflación.

Sin embargo se destaca la reducción de 561 millones en el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo, lo que significa el 6.71 por ciento menos, y es el rubro más sensible por el déficit que se enfrenta año con año, por lo que Zacatecas apenas contará con siete 800 millones pesos, lo que significa que ahora la necesidad crece a poco menos de dos mil millones de pesos.

También viene una importante disminución en el Fondo de Aportaciones de la Educación Tecnológica y de Adultos (FAETA), que trae una reducción superior a los 33 millones de pesos, por lo que apenas quedaría en 113 millones en el año por venir.

Los números dejan claras dos cosas, que salvo el diputado Alfredo Femat y los gritos de los diputados de oposición, que de poco sirven, no hay quién negocie en la federación a favor de Zacatecas.

Que los funcionarios de primer nivel de la entidad, especialmente en el ámbito financiero y educativo tendrán que poner su mejor parte para abrir puertas en las oficinas centrales. De Ricardo Olivares no tengo la menor duda que lo pueda hacer, pero en el ámbito educativo no existe la menor esperanza, son funcionarios que ni siquiera salen de sus oficinas porque aún no entienden cómo operan los distintos sistemas y niveles educativos.

Después de todo lo anterior, no queda la menor duda que Zacatecas está en manos del Presidente López Obrador y sólo queda administrar la pobreza, incluida la política de los funcionarios.

Malas noticias asoman para Zacatecas en el decreto de Presupuesto de Egreso de la Federación para el próximo año.

Los diputados aprobaron, por mayoría la propuesta enviada por el Ejecutivo Federal y viene un consistente recorte al financiamiento educativo de la entidad, a menos que en los próximos días, tal como se ha anunciado por parte del gobernador, venga el Presidente Andrés Manuel López Obrador y decida rescatar al magisterio estatal e incorporarlo a la nómina del Fondo de la Nómina Educativa (FONE).

Duro golpe político a las aspiraciones del nuevo gobierno de Zacatecas.

Pero más duro será la condición que enfrenten los secretarios de finanzas y educación de la entidad si es que no existe el “rescate educativo” de Zacatecas, porque las penurias no van a comenzar a mediados del año por venir, sino que estarán batallando apenas inicie el año para cubrir las quincenas del magisterio estatal.

De acuerdo al presupuesto aprobado, se consideró dar al estado 14 mil 105 millones por concepto de Aportaciones Federales para Entidades y Municipios, lo que se traduce en 10 millones más que lo planteado para el 2021, sin embargo el incremento es apenas del .08 por ciento por debajo de la inflación.

Sin embargo se destaca la reducción de 561 millones en el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo, lo que significa el 6.71 por ciento menos, y es el rubro más sensible por el déficit que se enfrenta año con año, por lo que Zacatecas apenas contará con siete 800 millones pesos, lo que significa que ahora la necesidad crece a poco menos de dos mil millones de pesos.

También viene una importante disminución en el Fondo de Aportaciones de la Educación Tecnológica y de Adultos (FAETA), que trae una reducción superior a los 33 millones de pesos, por lo que apenas quedaría en 113 millones en el año por venir.

Los números dejan claras dos cosas, que salvo el diputado Alfredo Femat y los gritos de los diputados de oposición, que de poco sirven, no hay quién negocie en la federación a favor de Zacatecas.

Que los funcionarios de primer nivel de la entidad, especialmente en el ámbito financiero y educativo tendrán que poner su mejor parte para abrir puertas en las oficinas centrales. De Ricardo Olivares no tengo la menor duda que lo pueda hacer, pero en el ámbito educativo no existe la menor esperanza, son funcionarios que ni siquiera salen de sus oficinas porque aún no entienden cómo operan los distintos sistemas y niveles educativos.

Después de todo lo anterior, no queda la menor duda que Zacatecas está en manos del Presidente López Obrador y sólo queda administrar la pobreza, incluida la política de los funcionarios.