/ jueves 20 de febrero de 2020

Entidades ficticias

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros presenta una nueva alerta a la población en general de la existencia de empresas ficticias que se ostentan como entidades financieras a través de las redes sociales, páginas de Internet apócrifas o anuncios en revistas, las cuales ofertan supuestos créditos sin mayor trámite burocrático y muy atractivos.

Ante ésta situación, las personas engañadas han pagado cantidades que van entre los mil hasta cien mil pesos, como requisitos para ser objeto del préstamo, pero lamentablemente han perdido su dinero, por lo que han tenido que recurrir ante el Ministerio Público a levantar el acta de demanda correspondiente.

El Modus Operandi de éstas supuestas entidades financieras es el utilizan información como razón social, direcciones, teléfonos e imagen corporativa (logotipos) de las Entidades Financieras debidamente registradas y supervisadas, para hacerse pasar por ellas. Dicha información es utilizada en documentos, contratos, publicidad, redes sociales, páginas de Internet apócrifas o anuncios en periódicos.

Ofertan créditos inmediatos y con pocos requisitos, pero solicitan anticipos de dinero en efectivo o mediante depósito a una cuenta bancaria con la finalidad de apartar el crédito, gestionarlo, adelantar mensualidades, pagar gastos por apertura o como fianza en garantía, generalmente por el equivalente al 10% del monto total del crédito solicitado.

La población ha denunciado que personas que laboran en las empresas falsas los contactan vía telefónica o por redes sociales ofreciéndoles créditos con mensualidad de montos pequeños para hacerlos atractivos, sin embargo, cuando no reciben el crédito y ya pagaron los gastos exigidos, ya no los pueden localizar, o bien descubren que no trabajan para la Entidad Financiera que fue suplantada.

Solicitan a sus víctimas enviar su información personal vía WhatsApp o por Facebook a través de Messenger, poniendo en riesgo los datos personales del público. Cuando las víctimas realizan los depósitos a la cuenta bancaria o, en algunos casos, por medio de alguna tienda de conveniencia para obtener el supuesto crédito, buscan contactar a la entidad falsa y al no tener respuesta, recurren a la Condusef para verificar su existencia y es cuando descubren que han sido víctimas del fraude o suplantación de una Entidad Financiera.

Por lo anterior y a fin de evitar que seas sorprendido por este tipo de prácticas de fraude y suplantación de Entidades Financieras, se recomienda: Evita contratar préstamos o créditos en los que tengas que dar anticipos de dinero. No des información ni realices operaciones a través de Facebook, WhatsApp, o cualquier otra red social si no investigaste que se trata de una entidad financiera. Asegúrate que las personas con las que contactas realmente laboren en la entidad financiera. No firmes ningún documento antes de leerlo completa y detalladamente.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros presenta una nueva alerta a la población en general de la existencia de empresas ficticias que se ostentan como entidades financieras a través de las redes sociales, páginas de Internet apócrifas o anuncios en revistas, las cuales ofertan supuestos créditos sin mayor trámite burocrático y muy atractivos.

Ante ésta situación, las personas engañadas han pagado cantidades que van entre los mil hasta cien mil pesos, como requisitos para ser objeto del préstamo, pero lamentablemente han perdido su dinero, por lo que han tenido que recurrir ante el Ministerio Público a levantar el acta de demanda correspondiente.

El Modus Operandi de éstas supuestas entidades financieras es el utilizan información como razón social, direcciones, teléfonos e imagen corporativa (logotipos) de las Entidades Financieras debidamente registradas y supervisadas, para hacerse pasar por ellas. Dicha información es utilizada en documentos, contratos, publicidad, redes sociales, páginas de Internet apócrifas o anuncios en periódicos.

Ofertan créditos inmediatos y con pocos requisitos, pero solicitan anticipos de dinero en efectivo o mediante depósito a una cuenta bancaria con la finalidad de apartar el crédito, gestionarlo, adelantar mensualidades, pagar gastos por apertura o como fianza en garantía, generalmente por el equivalente al 10% del monto total del crédito solicitado.

La población ha denunciado que personas que laboran en las empresas falsas los contactan vía telefónica o por redes sociales ofreciéndoles créditos con mensualidad de montos pequeños para hacerlos atractivos, sin embargo, cuando no reciben el crédito y ya pagaron los gastos exigidos, ya no los pueden localizar, o bien descubren que no trabajan para la Entidad Financiera que fue suplantada.

Solicitan a sus víctimas enviar su información personal vía WhatsApp o por Facebook a través de Messenger, poniendo en riesgo los datos personales del público. Cuando las víctimas realizan los depósitos a la cuenta bancaria o, en algunos casos, por medio de alguna tienda de conveniencia para obtener el supuesto crédito, buscan contactar a la entidad falsa y al no tener respuesta, recurren a la Condusef para verificar su existencia y es cuando descubren que han sido víctimas del fraude o suplantación de una Entidad Financiera.

Por lo anterior y a fin de evitar que seas sorprendido por este tipo de prácticas de fraude y suplantación de Entidades Financieras, se recomienda: Evita contratar préstamos o créditos en los que tengas que dar anticipos de dinero. No des información ni realices operaciones a través de Facebook, WhatsApp, o cualquier otra red social si no investigaste que se trata de una entidad financiera. Asegúrate que las personas con las que contactas realmente laboren en la entidad financiera. No firmes ningún documento antes de leerlo completa y detalladamente.