Entre las cuerdas

A finales de la semana pasada se presentó de nueva cuenta una situación a mi parecer frustrante y vergonzoso, tanto para la afición de Zacatecas a la Lucha Libre, como a los organizadores del evento que señalo. Una vez más se realiza una función de lucha libre en donde no se cumple con lo anunciado, y lo peor que en esta ocasión los protagonistas del espectáculo (Luchadores) se encontraban presentes pero no llevaron a cabo su presentación por falta de pago.

Creo yo, desde mi muy particular punto de vista, que todo ello es, en un porcentaje muy alto, debido a la falta de una Comisión De Box y Lucha Libre, aquí en Zacatecas, ya que una de los deberes de dicho organismo es pedir la garantía de las prestaciones a los deportistas que son parte del evento, entre otras múltiples funciones. Pero el desconocimiento por parte de las autoridades hacia los integrantes de la antigua comisión dejó casi en estado de indefensión tanto a los deportistas como a la afición Zacatecana, dejándolo todo en manos de los promotores o empresarios, que sin la existencia de alguien que haga valer un supuesto reglamento, pueden hacer todo a su antojo o libre determinación, porque ni siquiera los inspectores de espectáculos estuvieron presentes el día de la presentación. Este tipo de situaciones lo que trae como consecuencia es que los aficionados se retiren de estos eventos ya que no tienen ninguna seguridad sobre lo que se anuncia y para exigir la devolución del costo de su boleto, le podría salir más caro y se opta por no regresar a estos eventos. Me parece que es tiempo que las autoridades se activen y realicen su trabajo, por lo menos en esta área que la tienen abandonada desde hace muchísimo tiempo y solo se hacen presentes a la hora de exigir el pago por autorizar los eventos anunciados.

Los niños y el deporte

Por la propia naturaleza humana las actividades físicas y el deporte forman parte de la vida cotidiana de los seres humanos y sobre todo de nuestros niños y jóvenes, pero me parece que en muchas ocasiones la práctica del deporte a veces se realiza en forma desmesurada, sin un buen sentido, abalada esta práctica por las formas de vida trasmitidas en los grandes medios masivos de comunicación.

Durante la infancia el niño elije de cierta manera en forma independiente las actividades físicas o deportes que le gusta practicar, lo cual debe de realizar sin que se le imponga como una obligación, pero debemos de tener en cuenta que el pequeño lo que buscara en primer instancia será ante todo el juego y la diversión, de manera que el niño toma su decisión influenciado por el ambiente más cercano en el que se desarrolla, los amigos, compañeros de escuela y por supuesto por los medios de comunicación y sus padres. Nosotros como padres de familia y como guías de nuestros pequeños tendremos que entender que la finalidad primordial será el de mejorar los aspectos físicos, psicológicos y sociales con la práctica de un deporte, que finalmente obtendrá como beneficio una forma de vivir sana y agradable.

No olvidemos que la práctica de algún deporte realizada en forma constante y metódica nos puede proporcionar una infinidad de beneficios durante la niñez y la adolescencia que pasan a formar parte de nuestra educación obtenida durante estos periodos. El deporte nos puede proporcionar la madurez para cumplir con nuestras obligaciones y responsabilidades, cumplir y respetar todo tipo de normas, formar o estimular hábitos de conducta, salud e higiene, nos puede ayudar a superar ciertos complejos o a formar y fortalecer nuestro carácter, venciendo debilidades, frenando nuestros impulsos, además de una ayuda que en estos tiempos es súper necesaria en nuestra sociedad, el saber integrarse a un grupo y el luchar o pelear por un interés común disfrutando de la relación con los demás y al mismo tiempo respetando las diferencias que puedan existir. El deporte nos puede proporcionar lo necesario para descubrir los recursos propios con los que contamos para enfrentarnos a la vida, los límites que pudiéramos tener, así como los puntos fuertes para enfrentarnos a los triunfos o fracasos que pudieran surgir durante el desarrollo de nuestras vidas.