Molestia y descontento, fue lo que manifestaron los asistentes al concierto de la Camerata de la Ciudad de Zacatecas el pasado viernes por la noche, esto debido a que el evento programado a las ocho de la noche, se empalmó con otra actividad dancística de una academia de ballet privada.

Y es que, el concierto que debió iniciar de manera puntual –que la Camerata siempre lo hace la verdad- inició casi 40 minutos después de lo convocado, debido a que los espectadores del evento de danza que se había presentado con anterioridad no desalojaban la sala de Teatro Fernando Calderón.

Los vendedores de flores por un lado, los infantes que habían participado y entre los cientos de padres de familia que platicaban, tomaban fotos y demás, nada más no salían del sitio para dar paso a la programación del teatro.

El punto es que, las personas que llegaron a ver el concierto, no tenían acceso porque la gente aún no salía del recinto, lo que provocó una aglomeración incómoda en el vestíbulo. A esto sumándole que en el foyer se realizaba la entrega del Premio Internacional de Poesía “Ramón López Velarde” y el ruido incómodo y la algarabía pues se hacía notar.

Por otro lado, el público de la orquesta manifestó la falta de respeto hacia los músicos al no tomar en cuenta su tiempo acordado, sobre todo al personal del teatro por permitir que se empalmaran los eventos y no controlar bien la agenda. Ojalá y esto no vuelva a pasar.