/ martes 14 de agosto de 2018

Excarcelación de la profesora Elba Esther Gordillo

Sin duda, la liberación de la profesora Elba Esther Gordillo marca no sólo la proximidad del cambio de régimen gubernamental, del régimen que entra, al cual no sólo se le avizora como amigo de la profesora Gordillo, sino que este gobierno haría lo necesario y conveniente para que se excarcelara a la lideresa del SNTE y pusiera además en evidencia un exceso del gobierno saliente, una absoluta arbitrariedad del régimen del presidente Enrique Peña Nieto. Ciertamente Gordillo fue encarcelada por no aceptar las pautas gubernativas del gobierno de Peña Nieto, y no por los delitos que se le imputaron, el lavado de dinero, principalmente.

Además de que seguramente uno de los beneficiados de la liberación de la profesora Gordillo habrá de ser el Partido Nueva Alianza (PANAL), partido de la absoluta creación de Gordillo, el que habrá de generar más presiones para que se reconsidere su descarte, la pérdida del registro de esta agrupación, por el escaso acopio de votos que obtuvo en las elecciones generales próximas pasadas. Elba Esther, en efecto, creó ese partido, y lo que se habrá de pugnar a toda costa es que éste subsista.

La prensa nacional recuerda, a propósito de la liberación de la profesora Gordillo, que ella fue aprehendida el 26 de febrero de 2013, todavía como lideresa del SNTE, por presunto lavado de dinero. Además, se recalcaba en la prensa nacional en el momento de su aprehensión, que ese dinero pertenecía al SNTE (en realidad todo lo del SNTE pertenecía a Elba Esther). Pero poco importó al gobierno de Peña Nieto que no fueran configuradas bien a bien las causales del arresto de la lideresa del SNTE, lo importante era ponerla detrás de las rejas. Así, la profesora Gordillo pasó cinco años y once días en prisión (aunque domiciliaria, pero al fin y al cabo prisión), sin habérsele fundado, considero, bien a bien los cargos que se argüían para arrestarla.

Lo interesante del caso, lo cual deja a ver la intervención de los políticos cercanos tanto a AMLO como a Elba Esther, es que la referida lideresa, declaró que ha decidido no tener contacto alguno con medios de comunicación hasta que arribe el próximo régimen federal, el de AMLO. Aun así, Elba Esther anunció que, el próximo lunes 20 de agosto, habrá de convocar a los medios nacionales y dar a conocer su opinión y posición sobre los “sucesos relativos”, los cuales supongo yo que son los concernientes a su muy cuestionado encarcelamiento. Conjeturo asimismo que habrá de hacer referencia al apoyo decidido del actual presidente de México electo, Andrés Manuel López Obrador, en su excarcelamiento.

Es importante recordar, para finalizar, que en la política mexicana “No hay fecha que no se llegue, ni plazo que no se cumpla”. ¿O sí?


Sin duda, la liberación de la profesora Elba Esther Gordillo marca no sólo la proximidad del cambio de régimen gubernamental, del régimen que entra, al cual no sólo se le avizora como amigo de la profesora Gordillo, sino que este gobierno haría lo necesario y conveniente para que se excarcelara a la lideresa del SNTE y pusiera además en evidencia un exceso del gobierno saliente, una absoluta arbitrariedad del régimen del presidente Enrique Peña Nieto. Ciertamente Gordillo fue encarcelada por no aceptar las pautas gubernativas del gobierno de Peña Nieto, y no por los delitos que se le imputaron, el lavado de dinero, principalmente.

Además de que seguramente uno de los beneficiados de la liberación de la profesora Gordillo habrá de ser el Partido Nueva Alianza (PANAL), partido de la absoluta creación de Gordillo, el que habrá de generar más presiones para que se reconsidere su descarte, la pérdida del registro de esta agrupación, por el escaso acopio de votos que obtuvo en las elecciones generales próximas pasadas. Elba Esther, en efecto, creó ese partido, y lo que se habrá de pugnar a toda costa es que éste subsista.

La prensa nacional recuerda, a propósito de la liberación de la profesora Gordillo, que ella fue aprehendida el 26 de febrero de 2013, todavía como lideresa del SNTE, por presunto lavado de dinero. Además, se recalcaba en la prensa nacional en el momento de su aprehensión, que ese dinero pertenecía al SNTE (en realidad todo lo del SNTE pertenecía a Elba Esther). Pero poco importó al gobierno de Peña Nieto que no fueran configuradas bien a bien las causales del arresto de la lideresa del SNTE, lo importante era ponerla detrás de las rejas. Así, la profesora Gordillo pasó cinco años y once días en prisión (aunque domiciliaria, pero al fin y al cabo prisión), sin habérsele fundado, considero, bien a bien los cargos que se argüían para arrestarla.

Lo interesante del caso, lo cual deja a ver la intervención de los políticos cercanos tanto a AMLO como a Elba Esther, es que la referida lideresa, declaró que ha decidido no tener contacto alguno con medios de comunicación hasta que arribe el próximo régimen federal, el de AMLO. Aun así, Elba Esther anunció que, el próximo lunes 20 de agosto, habrá de convocar a los medios nacionales y dar a conocer su opinión y posición sobre los “sucesos relativos”, los cuales supongo yo que son los concernientes a su muy cuestionado encarcelamiento. Conjeturo asimismo que habrá de hacer referencia al apoyo decidido del actual presidente de México electo, Andrés Manuel López Obrador, en su excarcelamiento.

Es importante recordar, para finalizar, que en la política mexicana “No hay fecha que no se llegue, ni plazo que no se cumpla”. ¿O sí?