/ lunes 14 de enero de 2019

La deuda de la UAZ, en el contexto nacional

El régimen de gobierno que está terminando entra en un momento histórico crítico contra el régimen de gobierno cuyo nacimiento apenas empieza. El régimen de gobierno anterior, intentó fundar y reformar instituciones, para darle viabilidad al proyecto del que los grandes empresarios eran el pilar fundamental; logró su cometido en algunas y en otras destruyó, pero ya no pudo construir. El nuevo régimen encontró un Estado semidestruido desde adentro, en donde la corrupción causó estragos y se externalizó como delincuencia organizada; esta corrupción parecía haber desprestigiado todo lo público, pero es justamente lo que se intenta restablecer.

En este contexto, brevemente descrito, concentramos nuestra atención en las universidades públicas estatales, entre ellas, nuestra universidad de Zacatecas. En el régimen anterior aumentaron el subsidio simbólicamente o no aumentaron nada, para que estas instituciones adquirieran recursos propios por servicios prestados a los empresarios, al gobierno y al resto de la sociedad; pero estos propósitos se cumplieron mínimamente en algunas universidades y en otras no pudieron hacer absolutamente nada de eso.

Como instituciones del Estado, las universidades públicas también fueron afectadas por la corrupción, unas mas y otras menos; el lugar donde anidaba era en la administración de las mismas; excepto en una, la de la Veracruz, cuya administración no recibía parte del subsidio porque se lo robaba el gobernador del Estado y que está hoy encarcelado. Parece que la más corrupta de estas universidades era la del estado de Morelos de acuerdo con información hasta ahora publicada. Según algunos columnistas de medios impresos, el rector de la universidad de Michoacán, al recibir el subsidio de la Federación o del Estado, lo primero que atendía eran sus negocios personales y luego los problemas de la universidad. Se publicó también, que el director de las preparatorias de la UdeG se robó cincuenta millones de pesos.

¿Qué ha sucedido y que sucede en la Universidad Autónoma de Zacatecas? No lo sabemos del todo, pero podemos reflexionar sobre lo que se ha hecho público. La actual administración ha dicho que el problema principal de la universidad es que, desde hace 25 años no se aumenta el subsidio necesario y que con los mismos recursos se atiende a un alumnado que se ha multiplicado; siendo esto cierto, no es todo lo cierto. Enunciado así el problema principal deja oculta una parte importante del mismo problema.

Muchos recordamos, dentro y fuera de la Universidad, que cuando era rector el Licenciado Alfredo Femat Bañuelos se dio el más reciente rescate anterior y fungió como aval la entonces gobernadora Amalia García Medina, pero estando como rector el Dr. Francisco Domínguez Garay empezó a contratar docentes sin respaldo financiero de la Secretaria de Educación Publica ni de la Secretaria de Hacienda; entonces, ¿Cómo les empezó a pagar? Con las cuotas que los docentes aportaban para pagar los servicios del ISSSTE, pero el Dr. Domínguez no los entregaba y los desviaba para pagar a los docentes que él había contratado y tener mayoría para que ganara su candidato a rector, el Ing. Silva Chaírez quien a su vez siguió contratando. Cuando el rector Silva tenía un año y cuatro meses, la deuda entre ambos rectores, ascendía al 88%. ¿Por qué la deuda que volvieron a crear con el dinero de los docentes la tenían que pagar dejando de trabajar vía ¨retiro voluntario¨42 docentes de tiempo completo, 39 de medio tiempo y los correspondientes a 849 horas clase en una primera etapa?

¿Es lícito que la deuda que crearon con el dinero de los docentes se pague a costa de los docentes mismos? ¿Qué hacer con los que crearon la deuda?

El régimen de gobierno que está terminando entra en un momento histórico crítico contra el régimen de gobierno cuyo nacimiento apenas empieza. El régimen de gobierno anterior, intentó fundar y reformar instituciones, para darle viabilidad al proyecto del que los grandes empresarios eran el pilar fundamental; logró su cometido en algunas y en otras destruyó, pero ya no pudo construir. El nuevo régimen encontró un Estado semidestruido desde adentro, en donde la corrupción causó estragos y se externalizó como delincuencia organizada; esta corrupción parecía haber desprestigiado todo lo público, pero es justamente lo que se intenta restablecer.

En este contexto, brevemente descrito, concentramos nuestra atención en las universidades públicas estatales, entre ellas, nuestra universidad de Zacatecas. En el régimen anterior aumentaron el subsidio simbólicamente o no aumentaron nada, para que estas instituciones adquirieran recursos propios por servicios prestados a los empresarios, al gobierno y al resto de la sociedad; pero estos propósitos se cumplieron mínimamente en algunas universidades y en otras no pudieron hacer absolutamente nada de eso.

Como instituciones del Estado, las universidades públicas también fueron afectadas por la corrupción, unas mas y otras menos; el lugar donde anidaba era en la administración de las mismas; excepto en una, la de la Veracruz, cuya administración no recibía parte del subsidio porque se lo robaba el gobernador del Estado y que está hoy encarcelado. Parece que la más corrupta de estas universidades era la del estado de Morelos de acuerdo con información hasta ahora publicada. Según algunos columnistas de medios impresos, el rector de la universidad de Michoacán, al recibir el subsidio de la Federación o del Estado, lo primero que atendía eran sus negocios personales y luego los problemas de la universidad. Se publicó también, que el director de las preparatorias de la UdeG se robó cincuenta millones de pesos.

¿Qué ha sucedido y que sucede en la Universidad Autónoma de Zacatecas? No lo sabemos del todo, pero podemos reflexionar sobre lo que se ha hecho público. La actual administración ha dicho que el problema principal de la universidad es que, desde hace 25 años no se aumenta el subsidio necesario y que con los mismos recursos se atiende a un alumnado que se ha multiplicado; siendo esto cierto, no es todo lo cierto. Enunciado así el problema principal deja oculta una parte importante del mismo problema.

Muchos recordamos, dentro y fuera de la Universidad, que cuando era rector el Licenciado Alfredo Femat Bañuelos se dio el más reciente rescate anterior y fungió como aval la entonces gobernadora Amalia García Medina, pero estando como rector el Dr. Francisco Domínguez Garay empezó a contratar docentes sin respaldo financiero de la Secretaria de Educación Publica ni de la Secretaria de Hacienda; entonces, ¿Cómo les empezó a pagar? Con las cuotas que los docentes aportaban para pagar los servicios del ISSSTE, pero el Dr. Domínguez no los entregaba y los desviaba para pagar a los docentes que él había contratado y tener mayoría para que ganara su candidato a rector, el Ing. Silva Chaírez quien a su vez siguió contratando. Cuando el rector Silva tenía un año y cuatro meses, la deuda entre ambos rectores, ascendía al 88%. ¿Por qué la deuda que volvieron a crear con el dinero de los docentes la tenían que pagar dejando de trabajar vía ¨retiro voluntario¨42 docentes de tiempo completo, 39 de medio tiempo y los correspondientes a 849 horas clase en una primera etapa?

¿Es lícito que la deuda que crearon con el dinero de los docentes se pague a costa de los docentes mismos? ¿Qué hacer con los que crearon la deuda?