/ domingo 23 de febrero de 2020

Los mensajes de la política

El nombramiento de la maestra de educación preescolar, Martina Rodríguez García, como nueva delegada en el estado de la Secretaria de Gobernación, cruzó las líneas de pensamiento de quienes ya se sentían seguros en el andar de la sucesión gubernamental.

A muchos causó sorpresa y, a otros tantos, les generó incertidumbre.

Por un lado, el hecho de que le tomaran la protesta en la capital del país, y no en Zacatecas, como se acostumbra, quiere decir que viene con todas las potestades para convertirse en el nuevo enlace del gobierno federal con el gobierno de la entidad.

Sin duda, la que no está contenta es la súper delegada de los programas sociales Verónica Díaz.

En Zacatecas, dentro de la Cuarta Transformación, ambas son de grupos políticos distintos. Los mensajes son muy claros en el sentido de señalarle a los zacatecanos que sólo existe una gran voluntad en la toma de las decisiones y esa pasa por la Junta de Coordinación Política con Ricardo Monreal y no por otro lado.

Van acaparando las posiciones políticas y son claros mensajes de que las decisiones, políticas, pasan sólo por esa voluntad.

Este grupo tiene en la coordinación de la bancada de MORENA en la cámara de Diputados a Jesús Padilla; su hija se convertirá en poco tiempo en la dirigente estatal del partido, y ahora, Martina Rodríguez se convierte en la única interlocutora válida del gobierno federal hacia el estado y los municipios.

Sin duda, van copando los espacios de decisión política y queda claro que mientras otros se desgarran las vestiduras, el avance del grupo leal a Ricardo Monreal es incontenible.

Más allá de sus capacidades de interlocución y lo extraordinaria que ha sido como publirrelacionanista política, a Martina Rodríguez García se le premió su lealtad e institucionalidad, y su encomienda, entre muchas otras, será cuidar que no se cometan los mismos errores de aquellos que no han sabido construir un proyecto único.

Recibió ya el beneplácito del Gobierno de Alejandro Tello Cristerna, quien ávido está de contar con alguien afín, y cercano, que sirva como enlace con el gobierno federal y en especial con el Senador Ricardo Monreal.

Parece que el primer mensaje que se recibe en el estado con el nombramiento de la delegada de Gobernación, es que el acuerdo político camina y la amnistía sólo sería posible, para el gobernador y sus más cercanos, después de la jornada electoral del 2021, pero no para el anterior, que se encargó de golpear y lastimar a la propia Martina Rodríguez.

En el camino quedan los demás grupos de MORENA que se disputan el poder, incluida la propia familia. Al tiempo.

El nombramiento de la maestra de educación preescolar, Martina Rodríguez García, como nueva delegada en el estado de la Secretaria de Gobernación, cruzó las líneas de pensamiento de quienes ya se sentían seguros en el andar de la sucesión gubernamental.

A muchos causó sorpresa y, a otros tantos, les generó incertidumbre.

Por un lado, el hecho de que le tomaran la protesta en la capital del país, y no en Zacatecas, como se acostumbra, quiere decir que viene con todas las potestades para convertirse en el nuevo enlace del gobierno federal con el gobierno de la entidad.

Sin duda, la que no está contenta es la súper delegada de los programas sociales Verónica Díaz.

En Zacatecas, dentro de la Cuarta Transformación, ambas son de grupos políticos distintos. Los mensajes son muy claros en el sentido de señalarle a los zacatecanos que sólo existe una gran voluntad en la toma de las decisiones y esa pasa por la Junta de Coordinación Política con Ricardo Monreal y no por otro lado.

Van acaparando las posiciones políticas y son claros mensajes de que las decisiones, políticas, pasan sólo por esa voluntad.

Este grupo tiene en la coordinación de la bancada de MORENA en la cámara de Diputados a Jesús Padilla; su hija se convertirá en poco tiempo en la dirigente estatal del partido, y ahora, Martina Rodríguez se convierte en la única interlocutora válida del gobierno federal hacia el estado y los municipios.

Sin duda, van copando los espacios de decisión política y queda claro que mientras otros se desgarran las vestiduras, el avance del grupo leal a Ricardo Monreal es incontenible.

Más allá de sus capacidades de interlocución y lo extraordinaria que ha sido como publirrelacionanista política, a Martina Rodríguez García se le premió su lealtad e institucionalidad, y su encomienda, entre muchas otras, será cuidar que no se cometan los mismos errores de aquellos que no han sabido construir un proyecto único.

Recibió ya el beneplácito del Gobierno de Alejandro Tello Cristerna, quien ávido está de contar con alguien afín, y cercano, que sirva como enlace con el gobierno federal y en especial con el Senador Ricardo Monreal.

Parece que el primer mensaje que se recibe en el estado con el nombramiento de la delegada de Gobernación, es que el acuerdo político camina y la amnistía sólo sería posible, para el gobernador y sus más cercanos, después de la jornada electoral del 2021, pero no para el anterior, que se encargó de golpear y lastimar a la propia Martina Rodríguez.

En el camino quedan los demás grupos de MORENA que se disputan el poder, incluida la propia familia. Al tiempo.