/ miércoles 5 de mayo de 2021

Morena

Ese partido tiene el mayor poder político y gubernamental pero comete demasiados errores y muestra desapego democrático interno que producen dudas en el contexto electoral. La cuestión es que ello impacta favorable o desfavorablemente en la gobernanza de México.

El partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) está ante una elección cuyos resultados definirán su futuro inmediato pues en caso de reducir votación y poder entonces sus adversarios y enemigos políticos actuarán más fuerte en su contra, disminuirá en el ánimo del electorado y clase política oportunista. Situación que quizá iniciaría paulatinamente su declive.

En efecto, Morena ha cometido varios errores y por su poca vida democrática interna traslada su estilo de hacer política al actual proceso electoral, quizá no obtendrá los resultados esperados por militantes y simpatizantes pues su dirigente nacional tiene rara visión en seleccionar a varios candidatos o realizar encuestas que militantes argumentan no haber participado, pues pone ante el electorado a candidatos que el Tribunal Judicial Federal Electoral les quita candidaturas como las dos gubernaturas, agréguese que diputados, presidentes municipales y regidores tienen problemas legales, o que varios de sus candidatas(os) son meros oportunistas, desconocen la filosofía de Morena, algunos muestran bajo nivel de conocimientos y cultura, varios carecen de experiencia en cargos gubernamentales. En varias candidatas, candidatos, militantes y simpatizantes de Morena se observan mismas prácticas no deseables como demás partidos, una explicación es que dejó entrar a muchas personas de baja calidad moral-política y hacen vida partidista. Ello le colocaría en el escenario de tener menor cantidad de votos en diferentes regiones del país respecto a la elección del 2018.

Además Morena enfrenta a un poder político-gubernamental y económico nacional e internacional de ideología neoliberal tendiente al gran capital y estilo de vida de gente de alta sociedad y de élites que están en contra de la denominada “Cuarta Transformación”, estos adversarios y enemigos realizan una fuerte y diversificada campaña contra el Presidente de la República y todo lo que sea gobernabilidad contraria a los intereses de poderosos, sus cortesanos e incluso burócratas de diferentes niveles.

Ante este escenario, una vez concluido el presente proceso electoral deberá realizar una autocrítica honesta y seria, formularse propuestas viables y pertinentes para revisar si realmente “es la esperanza de México”, si desea ser un partido confiable y un gobierno de resultados que mejoren visiblemente la calidad de vida de los mexicanos. Este es su reto.


Ese partido tiene el mayor poder político y gubernamental pero comete demasiados errores y muestra desapego democrático interno que producen dudas en el contexto electoral. La cuestión es que ello impacta favorable o desfavorablemente en la gobernanza de México.

El partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) está ante una elección cuyos resultados definirán su futuro inmediato pues en caso de reducir votación y poder entonces sus adversarios y enemigos políticos actuarán más fuerte en su contra, disminuirá en el ánimo del electorado y clase política oportunista. Situación que quizá iniciaría paulatinamente su declive.

En efecto, Morena ha cometido varios errores y por su poca vida democrática interna traslada su estilo de hacer política al actual proceso electoral, quizá no obtendrá los resultados esperados por militantes y simpatizantes pues su dirigente nacional tiene rara visión en seleccionar a varios candidatos o realizar encuestas que militantes argumentan no haber participado, pues pone ante el electorado a candidatos que el Tribunal Judicial Federal Electoral les quita candidaturas como las dos gubernaturas, agréguese que diputados, presidentes municipales y regidores tienen problemas legales, o que varios de sus candidatas(os) son meros oportunistas, desconocen la filosofía de Morena, algunos muestran bajo nivel de conocimientos y cultura, varios carecen de experiencia en cargos gubernamentales. En varias candidatas, candidatos, militantes y simpatizantes de Morena se observan mismas prácticas no deseables como demás partidos, una explicación es que dejó entrar a muchas personas de baja calidad moral-política y hacen vida partidista. Ello le colocaría en el escenario de tener menor cantidad de votos en diferentes regiones del país respecto a la elección del 2018.

Además Morena enfrenta a un poder político-gubernamental y económico nacional e internacional de ideología neoliberal tendiente al gran capital y estilo de vida de gente de alta sociedad y de élites que están en contra de la denominada “Cuarta Transformación”, estos adversarios y enemigos realizan una fuerte y diversificada campaña contra el Presidente de la República y todo lo que sea gobernabilidad contraria a los intereses de poderosos, sus cortesanos e incluso burócratas de diferentes niveles.

Ante este escenario, una vez concluido el presente proceso electoral deberá realizar una autocrítica honesta y seria, formularse propuestas viables y pertinentes para revisar si realmente “es la esperanza de México”, si desea ser un partido confiable y un gobierno de resultados que mejoren visiblemente la calidad de vida de los mexicanos. Este es su reto.