/ jueves 6 de septiembre de 2018

Orgullosamente UAZ

Pero no dejemos de reflexionar

Hoy, como universitario orgullosamente UAZ, hay muchas situaciones para estar contento, no sólo porque se cumplen los primeros 50 años como Universidad Autónoma de Zacatecas. Me parece, que la conmemoración debe servir para reflexionar sobre el futuro de nuestra Universidad.

Por ejemplo, reinventarnos como institución.

Sin embargo, mientras la UAZ no logre solucionar su crisis financiera, la reinvención tardará más tiempo en presentarse. Reestructurar su deuda pública y resolver los problemas estructurales se vuelve una necesidad urgente atenderlos.

Reflexionemos todos.

Por supuesto, que cumplir 50 años como Universidad Autónoma de Zacatecas es muy importante. Pero lo será más, el día en que se resuelva la crisis financiera, que frena el fortalecimiento como institución, en especial, en el tema académico.

El tema no es nada sencillo.

Segundo informe del rector

Hoy, también el rector ANTONIO GUZMÁN FERNÁNDEZ rendirá su segundo informe. Arriba a la mitad de su administración, en medio de la crisis económica más profunda que se recuerde.

Seguirán siendo tiempos complejos.

No dudo, que el rector GUZMÁN informe sobre cosas importantes que están ocurriendo, pero los problemas de dinero están presentes. Pronto, muy pronto, las pensiones y jubilaciones meterán a la UAZ en otro complejísimo problema.

Urge un nuevo orden administrativo.

La observación que hizo hace un par de días la Auditoría Superior del Estado (ASE) de RAÚL BRITO BERUMEN, sobre que la UAZ deberá resarcir más de 51 millones de pesos no es nada agradable. Habrá que ver, si el Gobierno del Estado no le adeuda dinero a la Universidad.

Nada que no sea público.

Orgullosamente UAZ

Aún con todo y pese a todo, hay acontecimientos que nos hacen sentir orgullosos de la UAZ, pero otros, que apenan. La opacidad, la simulación en la rendición de cuentas, la corrupción en cualquiera de sus manifestaciones al interior de la Universidad siguen preocupan.

Las cosas por su nombre.

Así las cosas, la UAZ arriba a sus primeras cinco décadas como universidad pública en medio de una seria de problemas financieras que, irremediablemente, le pega en su crecimiento sostenido y de calidad. Irrenunciable, ha sido, formar a los profesionistas que requiere el país y el Estado.

Espero que el rector lo entienda.

En suma, hay razones para sentirse orgullosamente UAZ, pero jamás ocultemos la realidad. Creo, que la apuesta debe ser a la construcción de una nueva universidad, aunque primero hay que resolver la crisis financiera que debe andar por el orden de los 2 mil millones de pesos.

Cuidado. Vienen otros problemas.

Y ya de salida...

Cerremos con una interrogante: ¿Qué espera usted como sociedad de la próximo LXIII Legislatura del Estado?

Hasta mañana.