/ viernes 27 de marzo de 2020

Permanecer en el hogar… ¿Qué hacer…?

Ahora que nos encontramos en una conyuntura especial por la pandemia del coronavirus COVI 19 en la que se toman medidas preventivas como: la suspensión temporal de actividades no esenciales como cursos, conferencias, cines, centros comerciales, galerías, simposios y exposiciones; esto no afecta a la organización pública, social o privada, y tampoco a los derechos de los usuarios, permaneciendo en el hogar para evitar el contacto con las personas.

Muchas personas se preguntan ¿pero…que voy a hacer aparte de ayudar a organizar la casa, ayudar a los niños en sus actividades escolares, revisar tu celular y ver películas? Se propone una tarea interesante: La lectura, ya que representa una base sólida en la adquisición de conocimiento.

Leer, representa una de las mejores habilidades que podemos adquirir, ya que nos acompañará a lo largo de nuestras vidas y permitirá integrarnos a las diferentes ramas del conocimiento además de ser una sana diversión. nos abre las puertas a la imaginación e inspiración.

Esta habilidad transferida es más que necesaria. La lectura marcará e influenciará nuestra forma de ser y, por lo tanto, nuestras vidas. Desde pequeños nos enseñan las letras y palabras en la encomiable y necesaria acción de la enseñanza. Todos somos capaces de recordar esos primeros momentos de lectura y quién estaba a nuestro lado para enseñarnos (maestros, familiares…), sin llegar a darnos cuenta de la importancia que ello tenía.

Ahora bien, en el lugar o espacio en que nos encontremos implica leer. Por ejemplo, acudimos a un consultorio u oficina, tenemos a la mano periódicos, revistas. Ya en los camiones foráneos de pasajeros incluyen libros electrónicos. En pocas palabras, todo lo que nos rodea es y será lectura.

Leer es comunicación e interacción. La lectura es esencial para estar conectado al mundo y a las personas. Sin la lectura no conoceríamos, no tendríamos datos e información y nos costaría más imaginar. No hay duda, es esencial en nuestras vidas.

Existen muchísimas razones para leer. Aquí te presentamos algunas: Aumenta nuestra curiosidad y conocimiento. Nos mantiene informados. Nos permite conectar y ponernos en la piel de otras personas / personajes. Despierta nuestra imaginación. Alimenta la inspiración y hace que surjan ideas. Nos proporciona herramientas en tema de plática.

Un elemento importante es que ejercita a nuestro cerebro a niveles insospechados ya que despierta vías neuronales y activa fuertemente la memoria. Libera nuestras emociones: alegría, tristeza, cólera, miedo, sorpresa, amor, etc. Nos hace recordar, conocer y aprender.

Ayuda a la comprensión de textos, mejora la gramática, el vocabulario y la escritura. Facilita la comunicación. Hace que podamos sentirnos activos. Permite la relajación, el descanso e incluso es capaz de reducir el estrés. Hace que podamos investigar sobre los temas que más nos interesan y nos permite crecer como personas.

Ahora que nos encontramos en una conyuntura especial por la pandemia del coronavirus COVI 19 en la que se toman medidas preventivas como: la suspensión temporal de actividades no esenciales como cursos, conferencias, cines, centros comerciales, galerías, simposios y exposiciones; esto no afecta a la organización pública, social o privada, y tampoco a los derechos de los usuarios, permaneciendo en el hogar para evitar el contacto con las personas.

Muchas personas se preguntan ¿pero…que voy a hacer aparte de ayudar a organizar la casa, ayudar a los niños en sus actividades escolares, revisar tu celular y ver películas? Se propone una tarea interesante: La lectura, ya que representa una base sólida en la adquisición de conocimiento.

Leer, representa una de las mejores habilidades que podemos adquirir, ya que nos acompañará a lo largo de nuestras vidas y permitirá integrarnos a las diferentes ramas del conocimiento además de ser una sana diversión. nos abre las puertas a la imaginación e inspiración.

Esta habilidad transferida es más que necesaria. La lectura marcará e influenciará nuestra forma de ser y, por lo tanto, nuestras vidas. Desde pequeños nos enseñan las letras y palabras en la encomiable y necesaria acción de la enseñanza. Todos somos capaces de recordar esos primeros momentos de lectura y quién estaba a nuestro lado para enseñarnos (maestros, familiares…), sin llegar a darnos cuenta de la importancia que ello tenía.

Ahora bien, en el lugar o espacio en que nos encontremos implica leer. Por ejemplo, acudimos a un consultorio u oficina, tenemos a la mano periódicos, revistas. Ya en los camiones foráneos de pasajeros incluyen libros electrónicos. En pocas palabras, todo lo que nos rodea es y será lectura.

Leer es comunicación e interacción. La lectura es esencial para estar conectado al mundo y a las personas. Sin la lectura no conoceríamos, no tendríamos datos e información y nos costaría más imaginar. No hay duda, es esencial en nuestras vidas.

Existen muchísimas razones para leer. Aquí te presentamos algunas: Aumenta nuestra curiosidad y conocimiento. Nos mantiene informados. Nos permite conectar y ponernos en la piel de otras personas / personajes. Despierta nuestra imaginación. Alimenta la inspiración y hace que surjan ideas. Nos proporciona herramientas en tema de plática.

Un elemento importante es que ejercita a nuestro cerebro a niveles insospechados ya que despierta vías neuronales y activa fuertemente la memoria. Libera nuestras emociones: alegría, tristeza, cólera, miedo, sorpresa, amor, etc. Nos hace recordar, conocer y aprender.

Ayuda a la comprensión de textos, mejora la gramática, el vocabulario y la escritura. Facilita la comunicación. Hace que podamos sentirnos activos. Permite la relajación, el descanso e incluso es capaz de reducir el estrés. Hace que podamos investigar sobre los temas que más nos interesan y nos permite crecer como personas.