Desde hace años, la sociedad ha estado preocupada por la inseguridad que se fue gestando desde hace décadas y que hoy logró convertirse en el principal problema social que enfrentan todos los gobiernos.
Llamados, exigencias, y cientos de posturas políticas han quedado asentadas en las páginas de los diarios, son testimonios del crecimiento de este problema social, pero hay algo que nos dice la gente en las calles: lo importante, en el tema de seguridad, son los resultados, no hay más.
Y es que es notorio el hartazgo ciudadano que se hace más evidente cada día en los comentarios que se hacen en redes sociales. Y bueno, igual que con todos los servidores públicos, es el pueblo quien se encarga de calificar y juzgar nuestro desempeño.
Por supuesto que la gente tiene presente los hechos violentos, las notas que corren en los medios de comunicación, se tienen presentes las carpetas de investigación que no se terminan de resolver.
Por eso creemos que se debe reforzar y replantear la estrategia de seguridad una y otra vez, las veces que sea necesario, hasta lograr encontrar el modelo que dé los mejores resultados. Es lo que esperan los zacatecanos.
No podemos aspirar a tener una policía reaccionaria, corporaciones que sirvan solo para el acordonamiento después de un hecho de violencia. No podemos aspirar a tener una Fiscalía en la que impere la indiferencia y el tortugüismo administrativo.
Se tienen que atender las causas, los problemas sociales que generan la inseguridad y para eso es necesario implementar una política de prevención del delito. Bien pensada, diseñada para la construcción de una sociedad más pacífica.
Por eso, hace unos días anuncié que, en Fresnillo, empezaremos un nuevo modelo para prevenir el delito que está pensado en la participación ciudadana y la colaboración de los sectores sociales. Un modelo que estamos diseñando en colaboración con el Gobierno Estatal.
En él, participarán las distintas asociaciones culturales y artísticas, deportivas y grupos de recreación. Que se geste y se aplique en las colonias y comunidades que están identificadas como “focos rojos”, aunque en una segunda etapa, pretendemos que esté en todo el municipio.
Sin embargo, ninguna política gubernamental de prevención del delito puede ser exitosa si la gente no se involucra. Mejorar las condiciones en las que vivimos solo es posible si trabajamos juntos. En una verdadera corresponsabilidad social.
Por eso aprovecho este espacio de opinión para invitar a todos los ciudadanos a que colaboren y participen. De nada sirve hacer actividades de esta naturaleza si las canchas, los foros al aire libre y las plazas públicas, están vacías.
De nuestra parte, en Fresnillo, no quitamos el dedo del renglón, seguimos pidiendo respaldo, apoyo de las corporaciones y el ejército, del gobierno estatal y federal, pero también trabajando de la mano de la gente para que vuelva la paz y la tranquilidad a nuestro estado.
