Los desafíos que enfrenta el mundo hoy son devastadores por los terribles cambios que se viven en torno a los cambios de clima, tan repentinos que se pueden dar en cualquier época del año provocando severos daños.
El desarrollo de la humanidad y la preocupación por mejorar la calidad de vida ha llevado a una continua innovación tecnológica, que ha tenido entre sus consecuencias la utilización intensiva de combustibles fósiles. Un promedio de 80% de la energía que se consume en el mundo proviene de este tipo de combustibles que producen emisiones de gases con efecto invernadero, mismos que producen los molestos cambios de clima que a diario vivimos.
Hoy el mundo, más allá de luchar por cuestiones políticas y poder, la situación es grave, los signos son claros y mucho se ha advertido sobre el descongelamiento de los glaciares, el aumento de la precipitaciones dígase lluvias e incluso incendios que azotan con una furia que se convierten en tempestades y/o desastres. Los designios de la naturaleza solo causan afectaciones a la población civil que no está preparada para este tipo de contingencias cuando menos en nuestro país, donde quedó claro que la protección civil no existe y no se pudo prevenir.
Sin embargo es importante resaltar que México como estado miembro de la comunidad internacional se adhiere a los tratados internacionales, pues es claro que en los tiempos recientes y de una década hacia acá hemos vivido los desastrosos cambios climáticos y sus terribles consecuencias.
Huelga hacer mención lo referente al protocolo de Kioto como instrumento internacional, después de dos años y medio de negociaciones en 1997, se adoptó el Protocolo de Kioto. Uno de los acuerdos más ambiciosos y controvertidos que se han alcanzado en relación con el cambio climático y que se considera el primer paso hacia la cooperación internacional en dicha materia.
Dentro de los países no incluidos se encuentra México, pues no está obligado por la simple y sencilla razón que es un país en vías de desarrollo, pues tomando en cuenta las prioridades, objetivos y circunstancias de su desarrollo nacional y regional, deberá realizar programas nacionales que busquen mitigar el cambio climático. Así como realizar informes periódicos donde se actualicen los inventarios nacionales de las emisiones de Gases Efecto Invernadero.
Sin embargo un tema que no deja de pasar inadvertido es la postura de México ante el Protocolo de Kioto, en donde nuestro país ha mostrado estar dispuesto a cumplir sus compromisos en materia ambiental en los diversos foros internacionales.
México ha firmado 19 tratados en materia de cuidado y protección al medio ambiente y ecología con la comunidad internacional. Que no debemos dudar que son ley pues son vigentes dentro de nuestro sistema político. Aunque resulta ambiguo pues el tratado más reciente data del siglo pasado desde 1942 para ser exactos, aunque el más trascendente ha sido el Protocolo de Kioto.
México ha firmado tratados internacionales en el marco del Mecanismo de Desarrollo Limpio con los gobiernos de Alemania, Austria, Canadá, Dinamarca, España, Francia, Italia, Países Bajos, así como el Banco Japonés de Cooperación Internacional. Tan sólo como dato las industrias eléctrica y petrolera de nuestro país generan 96% de la contaminación industrial el país, con esto nos colocamos como país en vías de desarrollo en un alto índice de contaminación y por tanto con efectos nocivos por los cambios climáticos que se han venido dando en la última década.
