/ jueves 11 de febrero de 2021

Referente periodístico │ Issstezac, la quiebra

El Instituto ya es insostenible

Es probable, que ni con una reforma de gran calado, el Issstezac pueda sobrevivir. Más allá del discurso oficial, la realidad, es que, la situación financiera es insostenible. El Gobierno de Zacatecas ya no puede estar “cargando” con los problemas financieros. Por eso, el anuncio del titular de Sefin, el doctor Jorge Miranda Castro ya no sorprende. A leguas se ve que es una “bomba de tiempo”.

El Issstezac está quebrado.

Y esta probable quiebra de la que habla Miranda Castro deben tomarla muy en cuenta quienes aspiran a gobernar Zacatecas. Me refiero a David Monreal Ávila y a Claudia Anaya Mota, que, dicho sea de paso -gane quien gane- los problemas del Issstezac los esperan.

Sobre aviso no hay engaño.

Dicho con propiedad, el Issstezac podrá tener inmuebles, terrenos, negocios, pero ya no dan para el sostenimiento de privilegios y excesos, en los que se ha caído el instituto, sexenio tras sexenio. En este quinquenio continuaron. Por eso, Marco Vinicio Flores Guerrero quiere una reforma.

A ver si sale de aquí a septiembre.

Entre vividores y acusaciones

A lo que pretendo llegar, es que, la explicación de la crisis al Issstezac data desde sexenios atrás. Con más fuerza se manifestó desde con: Ricardo Monreal Ávila, continuó con Amalia García Medina, siguió con Miguel Alonso Reyes y ahora con Alejandro Tello Cristerna.

No hay voluntad para solucionar el problema.

Ninguno de los gobernadores mencionados tuvo la visión, el control, ni la voluntad de poner orden en el Issstezac, sólo hubo intentos, pero insuficientes para controlar la crisis. No hay duda, que las Juntas Directivas, donde están varios sindicatos también tienen culpa de lo que ahora vemos.

Hay culpables con nombres y apellidos.

En este momento de quiebre, lo que puede hacer el gobernador de Zacatecas, Alejandro Tello Cristerna es impulsar ya la reforma de gran calado, por lo menos, para ordenar muchos de los privilegios y abusos que, ni en la Ley están, pero se siguen pagando.

Que por usos y costumbres.

Costo político ¿para quién?

En esta historia de crisis financiera, los menos culpables son los miles de pensionados y jubilados del Issstezac, sino quienes han autorizado los privilegios, sexenio tras sexenio, comenzando con los Directores Generales hasta el actual y las Juntas Directivas. Deberían ser llamados a cuentas.

Por un principio elemental.

Realizar una reforma de gran calado, por supuesto, que tendría un costo político, tanto para quien manda en Zacatecas, para el actual Director General con su Junta Directiva, como para los diputados y diputadas que votarían dicha reforma. ¿La aprobarán los actuales legisladores?

Es claro, que la ingresarán en septiembre.

En suma, la quiebra del Issstezac ya viene, el instituto requiere de una profunda reestructuración, la reforma de gran calado ya está, ahora, a ver si la votan y David Monreal Ávila y Claudia Anaya Mota deben saber que quien gane, esta “bomba de tiempo” ya los espera.

El Instituto ya es insostenible

Es probable, que ni con una reforma de gran calado, el Issstezac pueda sobrevivir. Más allá del discurso oficial, la realidad, es que, la situación financiera es insostenible. El Gobierno de Zacatecas ya no puede estar “cargando” con los problemas financieros. Por eso, el anuncio del titular de Sefin, el doctor Jorge Miranda Castro ya no sorprende. A leguas se ve que es una “bomba de tiempo”.

El Issstezac está quebrado.

Y esta probable quiebra de la que habla Miranda Castro deben tomarla muy en cuenta quienes aspiran a gobernar Zacatecas. Me refiero a David Monreal Ávila y a Claudia Anaya Mota, que, dicho sea de paso -gane quien gane- los problemas del Issstezac los esperan.

Sobre aviso no hay engaño.

Dicho con propiedad, el Issstezac podrá tener inmuebles, terrenos, negocios, pero ya no dan para el sostenimiento de privilegios y excesos, en los que se ha caído el instituto, sexenio tras sexenio. En este quinquenio continuaron. Por eso, Marco Vinicio Flores Guerrero quiere una reforma.

A ver si sale de aquí a septiembre.

Entre vividores y acusaciones

A lo que pretendo llegar, es que, la explicación de la crisis al Issstezac data desde sexenios atrás. Con más fuerza se manifestó desde con: Ricardo Monreal Ávila, continuó con Amalia García Medina, siguió con Miguel Alonso Reyes y ahora con Alejandro Tello Cristerna.

No hay voluntad para solucionar el problema.

Ninguno de los gobernadores mencionados tuvo la visión, el control, ni la voluntad de poner orden en el Issstezac, sólo hubo intentos, pero insuficientes para controlar la crisis. No hay duda, que las Juntas Directivas, donde están varios sindicatos también tienen culpa de lo que ahora vemos.

Hay culpables con nombres y apellidos.

En este momento de quiebre, lo que puede hacer el gobernador de Zacatecas, Alejandro Tello Cristerna es impulsar ya la reforma de gran calado, por lo menos, para ordenar muchos de los privilegios y abusos que, ni en la Ley están, pero se siguen pagando.

Que por usos y costumbres.

Costo político ¿para quién?

En esta historia de crisis financiera, los menos culpables son los miles de pensionados y jubilados del Issstezac, sino quienes han autorizado los privilegios, sexenio tras sexenio, comenzando con los Directores Generales hasta el actual y las Juntas Directivas. Deberían ser llamados a cuentas.

Por un principio elemental.

Realizar una reforma de gran calado, por supuesto, que tendría un costo político, tanto para quien manda en Zacatecas, para el actual Director General con su Junta Directiva, como para los diputados y diputadas que votarían dicha reforma. ¿La aprobarán los actuales legisladores?

Es claro, que la ingresarán en septiembre.

En suma, la quiebra del Issstezac ya viene, el instituto requiere de una profunda reestructuración, la reforma de gran calado ya está, ahora, a ver si la votan y David Monreal Ávila y Claudia Anaya Mota deben saber que quien gane, esta “bomba de tiempo” ya los espera.