/ domingo 25 de julio de 2021

Tiempo de definiciones

Pasadas las elecciones del seis de junio y definido el rumbo que tomará el estado de Zacatecas en los próximos años, incluso, antes de conocer el gabinete del nuevo gobierno, la carrera rumbo al Senado de la República se ha iniciado a la par que la búsqueda de la candidatura de Morena a la Presidencia de la República. Un hombre y una mujer parece que se encaminan a buscar esas posiciones, al menos en Morena. Y así lo hacen sentir.

No es tiempo de simulaciones, dirán algunos, es tiempo de definiciones y todo indica que los perfiles adecuados en este momento podrían ser Saúl Monreal Ávila, alcalde de Fresnillo, quien no tiene ninguna atadura política sino la definición que ya tomó de apoyar a su hermano el Senador Ricardo Monreal.

Por otro lado, también quien desde ahora está dando muestras del músculo político que tiene en el centro de las definiciones políticas, es la delegada de los programas del Bienestar en Zacatecas, Verónica Díaz Robles, quien además de su recorrido por el Estado, ha proyectado la fuerza política que tiene en el centro y que será la puerta de entrada del gobernador electo David Monreal Ávila.

En cualquiera de los casos, no importa cuál vaya en primer lugar y quien ocupe la segunda posición, no habría disputa ya que harían mancuerna buscando el voto de los zacatecanos.

Está claro el rumbo a seguir en los próximos meses en Zacatecas. Hoy es tiempo de definiciones, al menos en Morena. Es tiempo de reconocer que con el discurso de la “Cuarta Transformación” el lenguaje político encamina a los perfiles más poderosos, por el momento.

El tiempo por venir es el de la política; el manejo del tiempo es el de los políticos; muchas veces actuando hasta en contra del momento inmediato consumido por la sociedad.

La construcción de los proyectos de ambos protagonistas, estará sustentado en la visión de su futuro político y en la credibilidad de sus acciones, a partir del reporte permanente de los resultados alcanzados en la ruta del pensamiento constructivo que hoy define su plataforma de trabajo.

Desde ahora, los resultados, tanto de Saúl Monreal como de Verónica Díaz, serán medidos en razón del conocimiento de la realidad social que les rodea, de actuar con la conciencia histórica de la satisfacción de las necesidades de la población y mantener una estrategia de comunicación eficaz en la ruta política trazada.

Deben alcanzar una definición política que aleje a los oportunistas, pero que construyan un porvenir con posibilidades de integración de las capas sociales más desprotegidas; con honestidad en sus planteamientos y ofreciendo un rumbo político serio y en beneficio del estado. No hay, por ahora, otros perfiles que les compitan. Es tiempo de definiciones.

Pasadas las elecciones del seis de junio y definido el rumbo que tomará el estado de Zacatecas en los próximos años, incluso, antes de conocer el gabinete del nuevo gobierno, la carrera rumbo al Senado de la República se ha iniciado a la par que la búsqueda de la candidatura de Morena a la Presidencia de la República. Un hombre y una mujer parece que se encaminan a buscar esas posiciones, al menos en Morena. Y así lo hacen sentir.

No es tiempo de simulaciones, dirán algunos, es tiempo de definiciones y todo indica que los perfiles adecuados en este momento podrían ser Saúl Monreal Ávila, alcalde de Fresnillo, quien no tiene ninguna atadura política sino la definición que ya tomó de apoyar a su hermano el Senador Ricardo Monreal.

Por otro lado, también quien desde ahora está dando muestras del músculo político que tiene en el centro de las definiciones políticas, es la delegada de los programas del Bienestar en Zacatecas, Verónica Díaz Robles, quien además de su recorrido por el Estado, ha proyectado la fuerza política que tiene en el centro y que será la puerta de entrada del gobernador electo David Monreal Ávila.

En cualquiera de los casos, no importa cuál vaya en primer lugar y quien ocupe la segunda posición, no habría disputa ya que harían mancuerna buscando el voto de los zacatecanos.

Está claro el rumbo a seguir en los próximos meses en Zacatecas. Hoy es tiempo de definiciones, al menos en Morena. Es tiempo de reconocer que con el discurso de la “Cuarta Transformación” el lenguaje político encamina a los perfiles más poderosos, por el momento.

El tiempo por venir es el de la política; el manejo del tiempo es el de los políticos; muchas veces actuando hasta en contra del momento inmediato consumido por la sociedad.

La construcción de los proyectos de ambos protagonistas, estará sustentado en la visión de su futuro político y en la credibilidad de sus acciones, a partir del reporte permanente de los resultados alcanzados en la ruta del pensamiento constructivo que hoy define su plataforma de trabajo.

Desde ahora, los resultados, tanto de Saúl Monreal como de Verónica Díaz, serán medidos en razón del conocimiento de la realidad social que les rodea, de actuar con la conciencia histórica de la satisfacción de las necesidades de la población y mantener una estrategia de comunicación eficaz en la ruta política trazada.

Deben alcanzar una definición política que aleje a los oportunistas, pero que construyan un porvenir con posibilidades de integración de las capas sociales más desprotegidas; con honestidad en sus planteamientos y ofreciendo un rumbo político serio y en beneficio del estado. No hay, por ahora, otros perfiles que les compitan. Es tiempo de definiciones.