/ martes 15 de diciembre de 2020

“Y la Transparencia ¿para qué?”

El pasado jueves 10 de diciembre el pleno del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) designó por mayoría de votos a Blanca Lilia Ibarra Cardena como nueva comisionada presidenta del organismo para el período 2020-2023. Con la designación Ibarra Cardena será la cuarta ocasión en la que el organismo es presidido por una mujer. Frente a las constantes descalificaciones y ataques en medios de comunicación en contra del instituto, los retos se vislumbran grandes de cara al 2021. Resulta urgente la transparencia con relación al ejercicio del gasto público. ¿Por qué es importante la transparencia y el derecho al acceso a la información?

Por mandato constitucional toda autoridad, entidad, órgano y/u organismo de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como los Órganos Constitucionales Autónomos (OCA’S), entre otros; tienen la obligación de conducirse frente a la ciudadanía bajo el principio de “Máxima publicidad”. Este principio consiste en que, tratándose de información en posesión de estos, ésta tiene, en principio, el carácter de información pública. En este sentido, el ciudadano en ejercicio del derecho fundamental de acceso a la información pública debe ser informado de los asuntos públicos sin la necesidad de justificar la utilización de dicha información. Esto cobra bastante relevancia considerando que los grandes reportajes donde se han hecho notar irregularidades en el ejercicio del gasto público han sido fundados, principalmente, con respuestas a solicitudes de información pública y realizando un ejercicio de contraste con la ya emitida por distintos organismos. Ciertamente se dice -al hablar del principio de máxima publicidad- que cuando está presente se habla de razón de derecho y cuando está ausente, de razón de Estado.

Los responsables en Materia de Transparencia y Acceso a la Información, principalmente, son (i) el INAI y (ii) los Organismos Garantes de las entidades federativas (OG), ambos pertenecientes -junto con la Auditoría Superior de la Federación, el Archivo General de la Nación y el INEGI- al Sistema Nacional de Transparencia y Acceso a la Información así como los distintos comités y unidades de transparencia dentro de los distintos órganos del Estado. Tan solo en el 2019 el INAI y los OG recibieron 104, 505 solicitudes de acceso a la información pública y protección de datos personales de las cuales entregaron respuesta a 103,915 de estas; frente al desempeño de otras instituciones y organismos podríamos considerar que el porcentaje de bateo es muy alto y el funcionamiento de estas instituciones es bastante bueno. Despreciar la función de estos organismos nos aleja de la concepción de un Estado de Derecho con bases democráticas sólidas, no solo porque nos distancia de la idea de poder ejercer control sobre la actuación de los funcionarios públicos, además, se ve diluida la participación política ciudadana ya que la opacidad de la información puede ser un factor de sesgo del elector.

*No quiero perder la oportunidad de destacar la gran labor de dos grandes zacatecanos consejeros miembros del pleno del INAI: Francisco Javier Acuña Llamas y Norma Julieta del Río Venegas.

1 Vázquez, Rodolfo. (2019). Moral Justicia y Derecho. En “Teorías contemporáneas de la justicia” Preliminares (p.203). Ciudad de México, México: Instituto de Investigaciones Jurídicas UNAM.


El pasado jueves 10 de diciembre el pleno del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) designó por mayoría de votos a Blanca Lilia Ibarra Cardena como nueva comisionada presidenta del organismo para el período 2020-2023. Con la designación Ibarra Cardena será la cuarta ocasión en la que el organismo es presidido por una mujer. Frente a las constantes descalificaciones y ataques en medios de comunicación en contra del instituto, los retos se vislumbran grandes de cara al 2021. Resulta urgente la transparencia con relación al ejercicio del gasto público. ¿Por qué es importante la transparencia y el derecho al acceso a la información?

Por mandato constitucional toda autoridad, entidad, órgano y/u organismo de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como los Órganos Constitucionales Autónomos (OCA’S), entre otros; tienen la obligación de conducirse frente a la ciudadanía bajo el principio de “Máxima publicidad”. Este principio consiste en que, tratándose de información en posesión de estos, ésta tiene, en principio, el carácter de información pública. En este sentido, el ciudadano en ejercicio del derecho fundamental de acceso a la información pública debe ser informado de los asuntos públicos sin la necesidad de justificar la utilización de dicha información. Esto cobra bastante relevancia considerando que los grandes reportajes donde se han hecho notar irregularidades en el ejercicio del gasto público han sido fundados, principalmente, con respuestas a solicitudes de información pública y realizando un ejercicio de contraste con la ya emitida por distintos organismos. Ciertamente se dice -al hablar del principio de máxima publicidad- que cuando está presente se habla de razón de derecho y cuando está ausente, de razón de Estado.

Los responsables en Materia de Transparencia y Acceso a la Información, principalmente, son (i) el INAI y (ii) los Organismos Garantes de las entidades federativas (OG), ambos pertenecientes -junto con la Auditoría Superior de la Federación, el Archivo General de la Nación y el INEGI- al Sistema Nacional de Transparencia y Acceso a la Información así como los distintos comités y unidades de transparencia dentro de los distintos órganos del Estado. Tan solo en el 2019 el INAI y los OG recibieron 104, 505 solicitudes de acceso a la información pública y protección de datos personales de las cuales entregaron respuesta a 103,915 de estas; frente al desempeño de otras instituciones y organismos podríamos considerar que el porcentaje de bateo es muy alto y el funcionamiento de estas instituciones es bastante bueno. Despreciar la función de estos organismos nos aleja de la concepción de un Estado de Derecho con bases democráticas sólidas, no solo porque nos distancia de la idea de poder ejercer control sobre la actuación de los funcionarios públicos, además, se ve diluida la participación política ciudadana ya que la opacidad de la información puede ser un factor de sesgo del elector.

*No quiero perder la oportunidad de destacar la gran labor de dos grandes zacatecanos consejeros miembros del pleno del INAI: Francisco Javier Acuña Llamas y Norma Julieta del Río Venegas.

1 Vázquez, Rodolfo. (2019). Moral Justicia y Derecho. En “Teorías contemporáneas de la justicia” Preliminares (p.203). Ciudad de México, México: Instituto de Investigaciones Jurídicas UNAM.