/ martes 4 de agosto de 2020

Y sigue AMLO dando en pronunciada medida de qué hablar

Ya nada más porque estoy de vacaciones me atrevo a ver y escuchar las mañaneras del presidente AMLO. Y sí, sin ser siquiera psicólogo o psiquiatra, sino mero ciudadano, he diagnosticado: AMLO en verdad está mal de su juicio, de su equilibrio emocional.

Puras tonterías entrecortadas escucho cuando está en sus mañaneras y, en general, en las declaraciones que emprende a los medios. Todos los que a mí me parecen actores públicos de relieve, de opinión serena, calmada, que trata de enjuiciar con serenidad a los gobernantes, están asimismo comentando acerca de los desvaríos del presidente AMLO. Todavía peor: observo con preocupación (no por él, sino por nosotros los mexicanos que lo estamos padeciendo) los dislates que emprende.

Sí, a veces se porta serio cuando, pretende contestar a la multitud de críticas que se le están emprendiendo en todos los medios, en las redes sociales, en dondequiera. Pero ya es inútil: periódicos, organizaciones sociales y ciudadanía en general, estamos ya no sólo enojados, sino hasta muy preocupados de que este hombre vaya a cometer algún despropósito: como ordenar a las fuerzas armadas que controlen a los movimientos sociales que ya se están armando a partir de los dislates de AMLO.

Respecto de los partidos políticos, sin embargo, sólo el PAN se ha manifestado críticamente y de manera sistemática al respecto de lo que se comenta. Los demás, especialmente el PRI, han preferido estar un tanto al margen de la actual preocupante situación que estamos padeciendo, considero, la mayor parte de los mexicanos.

Pero el partido de AMLO, Morena, que él formó y sigue dirigiendo, prosigue un tanto tratando de atenuar los desquicios del presidente de México sin razón creíble alguna. Y, para colmo de los males –especialmente de la pandemia que estamos padeciendo los mexicanos –AMLO todavía habilita a personajes, como Hugo López-Gatell

Todavía más, lo defiende a través de sus compinches: “están enojados con Hugo López-Gatell porque se les acabó el negocio corrupto”, dijo ayer el coordinador de los diputados de Morena, Mario Delgado Moreno. Entonces, si vamos a creer en las encuestas que informan acerca de la caída inmensa de la confianza de la población en AMLO, ¿se nos “acabo el negocio corrupto” (???). ¿A quiénes? ¿A quienes comenzamos a desconfiar con vehemencia en la palabrería engañosa, inoportuna y peligrosa en extremo para la población mexicana de AMLO?

Sí, sin duda, es preocupante la situación en la que nos encontramos los mexicanos en el actual gobierno de AMLO. Y para colmo de los males de los zacatecanos, quienes vivimos en vilo por la inseguridad y la pandemia, nuestro gobernador ha informado que no se tiene un solo centavo para, siquiera, pagar sueldos y salarios de quienes laboran en el gobierno estatal.

Ya nada más porque estoy de vacaciones me atrevo a ver y escuchar las mañaneras del presidente AMLO. Y sí, sin ser siquiera psicólogo o psiquiatra, sino mero ciudadano, he diagnosticado: AMLO en verdad está mal de su juicio, de su equilibrio emocional.

Puras tonterías entrecortadas escucho cuando está en sus mañaneras y, en general, en las declaraciones que emprende a los medios. Todos los que a mí me parecen actores públicos de relieve, de opinión serena, calmada, que trata de enjuiciar con serenidad a los gobernantes, están asimismo comentando acerca de los desvaríos del presidente AMLO. Todavía peor: observo con preocupación (no por él, sino por nosotros los mexicanos que lo estamos padeciendo) los dislates que emprende.

Sí, a veces se porta serio cuando, pretende contestar a la multitud de críticas que se le están emprendiendo en todos los medios, en las redes sociales, en dondequiera. Pero ya es inútil: periódicos, organizaciones sociales y ciudadanía en general, estamos ya no sólo enojados, sino hasta muy preocupados de que este hombre vaya a cometer algún despropósito: como ordenar a las fuerzas armadas que controlen a los movimientos sociales que ya se están armando a partir de los dislates de AMLO.

Respecto de los partidos políticos, sin embargo, sólo el PAN se ha manifestado críticamente y de manera sistemática al respecto de lo que se comenta. Los demás, especialmente el PRI, han preferido estar un tanto al margen de la actual preocupante situación que estamos padeciendo, considero, la mayor parte de los mexicanos.

Pero el partido de AMLO, Morena, que él formó y sigue dirigiendo, prosigue un tanto tratando de atenuar los desquicios del presidente de México sin razón creíble alguna. Y, para colmo de los males –especialmente de la pandemia que estamos padeciendo los mexicanos –AMLO todavía habilita a personajes, como Hugo López-Gatell

Todavía más, lo defiende a través de sus compinches: “están enojados con Hugo López-Gatell porque se les acabó el negocio corrupto”, dijo ayer el coordinador de los diputados de Morena, Mario Delgado Moreno. Entonces, si vamos a creer en las encuestas que informan acerca de la caída inmensa de la confianza de la población en AMLO, ¿se nos “acabo el negocio corrupto” (???). ¿A quiénes? ¿A quienes comenzamos a desconfiar con vehemencia en la palabrería engañosa, inoportuna y peligrosa en extremo para la población mexicana de AMLO?

Sí, sin duda, es preocupante la situación en la que nos encontramos los mexicanos en el actual gobierno de AMLO. Y para colmo de los males de los zacatecanos, quienes vivimos en vilo por la inseguridad y la pandemia, nuestro gobernador ha informado que no se tiene un solo centavo para, siquiera, pagar sueldos y salarios de quienes laboran en el gobierno estatal.