Los aros de cebolla no sólo son acompañantes de otros platos, también pueden ser botana y una forma deliciosa de que los niños comiencen a comer cebolla sin que el sabor sea demasiado fuerte.
Ingredientes
- 2 cebollas grandes (las más grandes que puedas conseguir)
- Queso
- 3 huevos
- Harina
- Pan molido
- Aceite
La preparación es muy sencilla, quitamos las orillas de las cebollas, pelamos y cortamos en tres, la idea es que queden aros gruesos. Cortamos el queso en tiras del mismo grosor de los aros.
Acomodamos el queso en medio de dos aros de cebolla, la idea es que quede el queso al centro de los aros.
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Batimos los huevos y ponemos harina y pan molido en dos contenedores diferentes. Pasamos los aros por harina, huevo, pan y repetimos.
Metemos a freír los aros en aceite cuando ya esté bien caliente. Voltea cuando estén dorados. Deja escurrir y están listos. Disfruta con el aderezo que más te guste.
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