La corteza de yogur congelado o bark es un postre que puedes preparar un día antes de servir o con mínimo cinco horas de anticipación. Es fácil de hacer y delicioso. Las opciones son infinitas y hoy te traemos una básica que gusta a chicos y grandes.
Sólo necesitamos yogur natural, miel o azúcar y fresas en trocitos. Las opciones son infinitas ya que puedes agregar el tipo de yogur, frutas y cereales que más les gusten en casa.
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Para prepararla puedes involucrar a los niños, sólo tienes que endulzar el yogur y esparcirlo en una bandeja con papel encerado o film plástico, después agrega los trocitos de fresa y mete a congelar.
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Una vez congelado córtalo en pedazos irregulares y puedes guardarlo en bolsas de cierra hermético hasta por dos meses. Es muy práctico para darles una merienda fresca a los niños. También puedes agregarlo en la licuadora a frutas frescas y hacer smoothies.
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