Con la emoción a flor de piel, la quinceañera Esmeralda Guadalupe arribó a la entrada de la parroquia de nuestra Señora de Fátima acompañada por sus padres, los señores Gabriela y Miguel Belmontes. Además, la acompañaron Ana Isabel Martínez y Antonio Maldonado, sus padrinos.
Durante la ceremonia eucarística, Esmeralda se mostró agradecida con sus padres, padrinos y demás familiares que presenciaron este importante momento en la vida de la fabulosa señorita.
Al recibir la bendición del sacerdote que ofició la misa, Esmeralda se levantó de su lugar y caminó hasta la imagen de la Virgen de Fátima, para ofrecerle un maravilloso ramo de flores naturales.