Después de 50 años de feliz matrimonio, Rafael yGraciela renovaron sus votos de amor frente a familiares y amigos,en la parroquia de Nuestra Señora de Fátima. La celebracióncomenzó con la misa de acción de gracias, donde recordaron laadrenalina de unir sus vidas en sagrado matrimonio, y cumplir conlo que años atrás se prometieron por primera vez frente al altar.Las hijas de la feliz pareja fueron las madrinas de honor,mostrándose muy felices y orgullosas por sus padres.
Al salir dela parroquia, parte de los invitados aplaudieron al gran amor entreRafael y Graciela, pues son un gran ejemplo de que el amor sípuede ser para siempre. La fiesta continuó con una recepción enun conocido salón de fiestas en la capital zacatecana, donde losasistentes disfrutaron de una maravillosa recepción en honor alamor.