Las medidas sanitarias para la “nueva normalidad” marcan que debemos evitar el uso de joyería, recoger nuestro cabello y rasurar el vello facial en el caso de los hombres.
La idea general es tener menos elementos en los que el virus se pueda mantener vivo, y mantener lo más higiénico posible nuestra vestimenta y apariencia.
En el caso de vello facial el problema radica en que al tener barba y/o bigote no sólo se acumulan más bacterias, también se tiende a tocar más el rostro, y el cubrebocas no cumple su función primordial de proteger la entrada del Covid-19 por medio de la boca, ojos o vías respiratorias.
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Según un estudio publicado en el Journal of Hospital Infection, informa que el recortar la barba y bigote lo más pegada al rostro hace que el cubrebocas funcione de forma más efectiva.
Hablando del uso de joyería, está demostrado que el virus tiene la capacidad de permanecer en metales hasta por tres días, pero con el uso de etanol, agua oxigenada o cloro se logran desinfectar eficazmente las piezas de joyería; pero, lo recomendable es evitar su uso.
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Lo más importante es no perder de vista que recortar el vello facial, dejar la joyería y corbatas fuera de nuestra imagen personal son medidas preventivas, aún así se deben tomar todo tipo de precauciones, como una buena limpieza y desinfección.
Las únicas medidas efectivas para prevenir contagios siguen siendo mantener el distanciamiento social, sobre todo en lugares cerrados y concurrridos, ya que los contagios son mayores en estas circunstancias, es de suma importancia lavarse constantemente las manos y no tocarse la cara para permanecer sanos y libres de un contagio de Covid-19.
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