El director de Protección Civil de la capital, Antonio Hernández Villamil informó que en fechas recientes se han registrado cerca de 300 microsismos en el estado que podrían acelerar el deterioro de los edificios que ya presentan fallas estructurales.
Aunque pidió a la gente “que no se espante”, reconoció que estos fenómenos de origen desconocido podrían incrementar su magnitud a pesar de que Zacatecas se ubica en una zona antisísmica.
Debemos tomar acciones para adoptar planes de contingencia y educar a la sociedad en la capacidad de respuesta ante emergencias, como se ha hecho en la Ciudad de México y otras áreas con alta actividad sísmica.
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También advirtió la necesidad de seguir haciendo evaluaciones preventivas en las casas abandonadas para que no representen un peligro mayor para los transeúntes.
Hernández Villamil advirtió que otro elemento que se debe tomar en cuenta es el deterioro de las bóvedas que se ubican bajo las edificaciones antiguas.
Este mes un equipo de técnicos del Centro Nacional de Desastres (Cenapred) comenzó un diagnóstico del estado que guardan las bóvedas subterráneas del Centro Histórico de Zacatecas.
Al respecto, el titular de Protección Civil municipal dijo que se espera contar pronto con los resultados de esta supervisión y entonces poder elaborar un proyecto que permita prevenir posibles colapsos como el ocurrido en un edificio ubicado en las inmediaciones del hotel Mesón de Jobito.
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