/ martes 3 de septiembre de 2024

"Velo de novia" renace en la presa San Marcos en Loreto, Zacatecas

La presa grande se ha llenado y ha comenzado a verter provocando un espectáculo singular

Tras las lluvias intensas registradas desde el pasado fin de semana, varias presas y cuerpos de agua en el estado de Zacatecas comienzan a mostrar signos de recuperación, siendo la presa "Grande", ubicada en la comunidad de San Marcos, en el municipio de Loreto, uno de los casos más destacados. Este martes 3 de septiembre, la presa ha alcanzado su capacidad máxima de 3.5 millones de metros cúbicos, dando lugar a un fenómeno natural que no se veía desde hace al menos tres años: el "velo de novia".

Este impresionante espectáculo, que se forma cuando la presa desborda y el agua cae formando una cascada, es una imagen muy apreciada por los habitantes de la región. El "velo de novia" recibe su nombre debido a la blancura y extensión de la caída de agua, evocando la imagen de un largo velo nupcial.

La presa "Grande" tiene una rica historia que se remonta a finales del siglo XIX. Fue construida por Don José León García Rojas, entonces dueño de la Hacienda de San Marcos, y posteriormente, en 1890, el último propietario de la hacienda, Don Genaro García, añadió un mirador, gradas y el calicanto que hoy son parte integral del paisaje de la presa.

Además de su belleza natural e importancia para la comunidad, la presa también alberga una leyenda que ha perdurado por generaciones. Según los antiguos pobladores, durante la construcción inicial, tres niños de aproximadamente tres años fueron llevados con engaños y enterrados vivos en los muros de la presa. Se creía que, en caso de un desbordamiento o inminente colapso de la estructura, el llanto de los niños alertaría a la población, evitando una tragedia.

En la cortina de la presa aún se pueden observar tres pequeños nichos distribuidos a lo largo de su estructura. Dentro de estos nichos, antiguamente se encontraban figuras de santos, que según la leyenda, representaban a los niños inmolados. Aunque las figuras han desaparecido con el tiempo, el recuerdo de esta historia sigue vivo en la comunidad.

El "velo de novia" no solo es un espectáculo visual, sino también un recordatorio de la historia y las leyendas que forman parte del legado cultural de la región. Este renacer de la presa "Grande" es un motivo de celebración para los habitantes de San Marcos, quienes ven en el flujo abundante de agua no solo la promesa de un futuro más próspero, sino también una conexión renovada con su pasado.


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Tras las lluvias intensas registradas desde el pasado fin de semana, varias presas y cuerpos de agua en el estado de Zacatecas comienzan a mostrar signos de recuperación, siendo la presa "Grande", ubicada en la comunidad de San Marcos, en el municipio de Loreto, uno de los casos más destacados. Este martes 3 de septiembre, la presa ha alcanzado su capacidad máxima de 3.5 millones de metros cúbicos, dando lugar a un fenómeno natural que no se veía desde hace al menos tres años: el "velo de novia".

Este impresionante espectáculo, que se forma cuando la presa desborda y el agua cae formando una cascada, es una imagen muy apreciada por los habitantes de la región. El "velo de novia" recibe su nombre debido a la blancura y extensión de la caída de agua, evocando la imagen de un largo velo nupcial.

La presa "Grande" tiene una rica historia que se remonta a finales del siglo XIX. Fue construida por Don José León García Rojas, entonces dueño de la Hacienda de San Marcos, y posteriormente, en 1890, el último propietario de la hacienda, Don Genaro García, añadió un mirador, gradas y el calicanto que hoy son parte integral del paisaje de la presa.

Además de su belleza natural e importancia para la comunidad, la presa también alberga una leyenda que ha perdurado por generaciones. Según los antiguos pobladores, durante la construcción inicial, tres niños de aproximadamente tres años fueron llevados con engaños y enterrados vivos en los muros de la presa. Se creía que, en caso de un desbordamiento o inminente colapso de la estructura, el llanto de los niños alertaría a la población, evitando una tragedia.

En la cortina de la presa aún se pueden observar tres pequeños nichos distribuidos a lo largo de su estructura. Dentro de estos nichos, antiguamente se encontraban figuras de santos, que según la leyenda, representaban a los niños inmolados. Aunque las figuras han desaparecido con el tiempo, el recuerdo de esta historia sigue vivo en la comunidad.

El "velo de novia" no solo es un espectáculo visual, sino también un recordatorio de la historia y las leyendas que forman parte del legado cultural de la región. Este renacer de la presa "Grande" es un motivo de celebración para los habitantes de San Marcos, quienes ven en el flujo abundante de agua no solo la promesa de un futuro más próspero, sino también una conexión renovada con su pasado.


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