El obispo Sigifredo Noriega Barceló indicó que no se cerrarán los templos, “la reapertura no debería dar marcha atrás”, aseguró.
Noriega Barceló reconoció que “si los contagios siguen aumentando se corre el riesgo de volver a los protocolos de seguridad sanitaria del inicio de la pandemia. Esta posibilidad nos exige no bajar la guardia, restringir actividades de riesgo y cuidar diligentemente que todas las medidas preventivas se lleven a cabo con renovada atención”.
Invitó a la creatividad pastoral, responsable y oportuna. “No es tiempo de bajar la guardia y dejarse vencer por el cansancio y el hartazgo. En tiempos de crisis, la esperanza, la paciencia y la perseverancia son antídotos contra el fatalismo”.
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Exhortó a que en medio de restricciones, se ponga en acto la creatividad para que se pueda buscar el encuentro con Dios y la comunidad, animar, consolar, fortalecer para seguir Evangelizando, celebrando y haciendo presente al más necesitado el amor de Dios.
Pidió a la gente que “sigamos, con una verdadera actitud cristiana, solidaria y sinodal, aguardando la liberación, no sólo de este virus, sino de la tristeza, del pecado y de la muerte”.
Estas son las medidas:
- Los templos pueden estar abiertos con horarios restringidos de acuerdo al color del semáforo.
- Tapetes sanitizantes en buenas condiciones, disponibilidad de gel antibacterial, aseo frecuente del templo, las bancas y las diferentes superficies, ventilación adecuada.
- Las notarías parroquiales y personal de servicio deben seguir la normatividad y recomendaciones que indiquen las autoridades sanitarias y laborales. Siguen vigentes los protocolos indicados por el responsable de la Pastoral para la Salud del 21 de mayo, 2020.
- Evitar o posponer las peregrinaciones y manifestaciones masivas hasta que el riesgo de contagio haya pasado. Los devotos y peregrinos a título personal o/y en grupos pequeños son responsables de su seguridad sanitaria.
- Para las misas y servicios pastorales exequiales, se debe atender, empatizar y acompañar a las personas y familias en estos momentos dolorosos y grandemente significativos. Estas reuniones pueden ser focos de alto riesgo para los contagios. Aplicar las indicaciones especiales de acuerdo al color del semáforo.
- Nuestra Señora de Guadalupe, Navidad, Año Nuevo, Santos Reyes: son indicaciones precisas. Por lo pronto hay que ir preparando el espíritu y diseñando las estrategias a seguir para que sean celebraciones familiares, alimenten y expresen la alegría del Evangelio en situaciones de emergencia sanitaria. Evitar y disminuir contagios es la consigna.
