Se suspenderá la procesión del silencio, los viacrucis multitudinarios y el lavatorio de pies, como parte de la actual contingencia sanitaria, anunció el obispo de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló.
En conferencia de prensa informó que las misas feriales y dominicales no se han suspendido y los templos permanecerán abiertos mientras que las autoridades de salud no recomienden lo contrario.
Sin embargo el obispo sugirió a los feligreses, para prevenir contagios de Covid19, seguir las misas desde su hogar a través de redes sociales o de otros medios de comunicación. Al respecto señaló que “el precepto dominical queda dispensado”.
Aclaró que sólo si las autoridades sanitarias lo recomiendan, con base en la evolución de la pandemia, los templos se cerrarán y las actividades eclesiásticas serían a puerta cerrada.
Aclaró que cada parroquia tendrá libertad de adoptar otras medidas de prevención de acuerdo con la naturaleza de sus actividades, aunque estas deben ser comunicadas a la diócesis y no contradecir las indicaciones gubernamentales.
Se retirará el agua bendita de los templos por ser considerada un medio posible de trasmisión de enfermedades, se aumentará la limpieza en el interior de los templos y se procurará tener gel antibacterial en la entrada.
Durante la misa se omitirá el saludo de paz físico y se pedirá a los sacerdotes utilicen cubrebocas cuando estén dando la comunión.
Acompañado por José Manuel Espinosa, encargado del área de la salud en la Diócesis, el obispo pidió “por el bien común” no asistir a los templos si se tienen síntomas de enfermedad respiratoria.
Ante medios de comunicación reconoció que, al igual que otros ámbitos de la sociedad, la iglesia se verá duramente afectada económicamente por la crisis sanitaria.
Por su parte el secretario canciller de la Diócesis, Aurelio Ponce, aclaró que todas estas disposiciones están sujetas a modificaciones según la evolución de la contingencia.
Precisó que las escuelas católicas deben adecuarse a las indicaciones dadas por la Secretaría de Educación. Además se suspende la catequesis presencial en sus distintos niveles hasta nuevo aviso.
La Vicaría Pastoral normará las actividades sinodales que pongan en riesgo la salud de los participantes y de la comunidad.
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