Zacatecas, Zac.- Oficialmente, Ángel es el primer bombero en ser nombrado honorario y tan sólo tiene cinco años de edad. Es originario de Chaparrosa, Villa de Cos, y padece leucemia linfoblástica aguda, por lo que la mañana de este viernes, le fue cumplido su sueño y con ello “darle felicidad antes de su partida”, convirtiéndolo en el primer uniformado de Protección Civil en esta jerarquía.
Ángel Alberto del Río Dávila recibió a los elementos de la Coordinación Estatal de Protección Civil en su comunidad natal, a donde llegó una Ambulancia y un camión Autobomba con varios bomberos a bordo quienes lo recibieron de manera sorpresiva para entregarle su uniforme: único y hecho a su medida.
A pesar de que el pasado miércoles recibió una quimioterapia un poco fuerte, Angelito paseaba fuera de su casa junto con otros niños. Se veía contento y muy tranquilo; pero portaba un cubre bocas y su cabecita estaba algo peloncita.
Al momento de ver los bomberos, sus ojos denotaron una emoción inocente, y pareciera como si de cierto modo ya supiera lo que iba a suceder, aunque según su madre, Erika, nunca se le mencionó nada esa mañana pues quería que fuera una sorpresa.
“Él sintió emoción, porque ya no me hizo caso”, comentó entre risas su madre, quien también dijo que normalmente Ángel estaba siempre con ella, y que al momento de que llegaron los bomberos, de la alegría, se olvidó por completo de su madre.
Después de haberlo vestido con su traje de bombero, especial para él, cuando menos se acordó, él ya estaba arriba del camión autobomba, el típico camión rojo con una bomba de agua.
Desde su casa hasta la salida de su pueblo, jalaba contento el claxon del camión, en tanto que las sirenas anunciaban su salida.
En las instalaciones de PC Estatal, ya lo esperaban formado el resto de los bomberos, quienes lo recibieron con honor y mucha atención, pues todos los presentes estaban esperando su llegada.
Prontamente otros efectivos lo ayudaron a bajarse del camión, y lo cargaron hasta donde estaban los bomberos, colocándolo al frente de todos, dándole el lugar que en algunos minutos estaba por recibir.
Al pase de lista, en donde se exclamó con potencia su nombre, los elementos gritaron a todo pulmón “¡Presente!”, en tres ocasiones, a lo que Angelito permanecía atónito. Le estaban rindiendo honor.
“Ángel, ya eres bombero”, le dijo posteriormente estrechando su mano el comandante Juan Antonio Caldera Alaniz, quien le entregó un reconocimiento con la leyenda: “Miembro Honorario del Heroico Cuerpo de Bomberos del Estado de Zacatecas”, para después colocarle en el pecho su placa como todo buen bombero, la cual tenía su nombre y el logo de Protección Civil. Aplausos inundaron el lugar en este acto de homenaje.
Su sueño no quedó allí, pues además de ser nombrado bombero, Ángel estaba por serlo en el amplio sentido de la palabra, ya que con más de sus ya compañeros, acudieron a atender varios reportes que fueron escenificados en las mismas instalaciones: un flamazo de una fuga de gas, una casa incendiándose y un rescate de persona, así como a sacar a una persona que quedó prensada al interior de un automóvil.
“Apagar el fuego” es lo que más le encantó, mencionó a los presentes, ya que en todas las actividades hizo uso de la manguera, le dio los primeros auxilios al rescatado y acompañó hasta la ambulancia a quien acabo entre la carrocería de un vehículo desvalijado. Es decir, Ángel se volvió en un bombero completo.
A pesar de que él vivió con alegría y mucha disposición ese día, se sabía que había sufrido complicaciones días atrás, pues las actividades ya habían sido suspendidas por lo menos tres veces antes, por lo que antes de que fuera más tarde, Bertina Ponce Villalobos, presidenta de la Asociación “Hay Vida en Mis Sueños” con la cual se le cumplió el suyo a Ángel, decidió que se le diera felicidad antes de su partida, y así le fue mencionado al comandante Caldera Alaniz.
