Durante la entrega de su primer informe de actividades la alcaldesa de Hermosillo rompió en llanto, la funcionaria trató de contener el llanto, pero las carencias económicas que sufre el territorio que gobierna se lo impidió.
Durante la entrega del su primer informe al mando de la administración del ayuntamiento de Hermosillo en el estado de Sonora, la alcaldesa Célida Teresa López rompió en llanto luego de dar a conocer las limitantes en el presupuesto.
Durante su informe estuvo acompañada de la gobernadora de esa entidad, Claudia Pavlovich, quien trató de darle fuerza, “la gobernadora me dice que no llore y que tengo que ser fuerte”.
Aun con el nudo en la garganta, la alcaldesa comenzó a enumerar las principales carencias que enfrenta su gobierno, “yo qué más quisiera, pavimentar toda la ciudad, responderle a la gente con sus solicitudes de vivienda, poder tener mejores sueldos desde ya para nuestros policías, pero todos los lunes nos enfrentamos a un estado financiero y a las cuentas bancarias de la ciudad”, con lagrimas en sus ojos y la voz quebrada la titular del gobierno de Hermosillo agregó que a pesar de las carencias no se detendrá “porque nunca lo he hecho”.
Posteriormente la presidenta municipal a través de su cuenta de Twitter aclaró que lo políticamente correcto era no llorar, “pero se sigue siendo humano aun siendo alcalde”. De igual forma aclaró ser franca y expresar sus sentimientos como lo dicta el corazón, descartó que haya sido un montaje “mujer que llora es mujer que vive”.
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