/ miércoles 22 de julio de 2020

Exgobernador de Chihuahua usa red de familiares en desvíos

Las empresas que se fondearon con recursos públicos tienen como socios a la esposa y hermanos del político

En las investigaciones sobre el exgobernador de Chihuahua, César “D”, por desvío de cantidades millonarias de recursos públicos han salido a relucir los nombres de familiares cercanos como sus hermanos y su esposa Bertha “G”.

Según las indagatorias de la Fiscalía General de la República (FGR) y de la Fiscalía de Chihuahua presentadas ante las autoridades judiciales de Estados Unidos, el exmandatario fue socio y accionista en diferentes empresas y negocios. Por ejemplo, con sus hermanos identificados como Ricardo, Alejandro y Mario estuvo relacionado con la empresa Grupo Inmobiliario del Norte.

Junto con su esposa, Bertha “G” y sus hijos, era accionista de la empresa llamada Ganadera El Saucito Balleza. Incluso, César “D” y su excuñada eran accionistas dentro de la empresa identificada como Financiera.

Las indagatorias detallan que el procedimiento para malversación de dinero de Chihuahua, con el fin de satisfacer los intereses del entonces gobernador, fueron fraudulentos porque no se utilizaron para los fines previstos y se destinaron al beneficio directo de su esposa, a través de su empresa de construcción llamada Pavimentos y Servicios de Parral.

Una vez que Unión Ganadera, propiedad del exmandatario estatal, recibió el dinero en sus cuentas, transfirió 567 mil 802 pesos entre el 20 y 27 de junio de 2011 a la cuenta registrada bajo el nombre de Pavimentos y Servicios de Parral, que pertenece a Bertha “G”, quien también usó el dinero para hacer un pago número de tarjeta de crédito a su favor.

567 mil 802 pesos transfirió desde su empresa Unión Ganadera a nombre de Bertha G.

La transferencia fue por 43 mil 844.75 pesos y posteriormente, para hacer un pago de 19 mil pesos a favor de Víctor “M”, trabajador de El Milagro, propiedad de César “D”, supuestamente para realizar pagos de nómina y pagos para un rancho. Incluso, la Auditoría Superior del Estado de Chihuahua analizó estos procedimientos y determinó que había sido fraudulento, porque violó varias disposiciones legales relacionadas con el manejo de los recursos públicos.

El 4 de octubre de 2011, el Servicio de Impuestos Internos del Estado de Chihuahua realizó dos pagos a favor de la empresa Financiamiento por dos millones 790 mil pesos y nueve millones 210 mil pesos cargados a una cuenta creada en el banco Santander.

El concepto de esta operación fue una subvención que se intentó justificar a través del acuerdo denominado "Subsidio para la adquisición de productos cárnicos Vaquillas", que se hizo con el propósito de adquirir vaquillas productoras de carne.

Foto: Especial

Según consta en registros de las fiscalías, dicho acuerdo fue firmado por la empresa Unión Ganadera y el estado de Chihuahua, representado por el Servicio de Impuestos Internos y la Secretaría de Desarrollo Rural.

En ese caso particular, no hay documentación o información que demuestre que la subvención entregada a Unión Ganadera fue utilizada para el propósito establecido en el acuerdo y tampoco existen detalles sobre el procedimiento para su correcta aplicación.

Como detalló este diario, la ruta del dinero confirma que la subvención fue solo una simulación, porque dicho recurso no se utilizó para el propósito del acuerdo. Además, el dinero público que fue malversado tuvo como objetivo el financiamiento de un fideicomiso a nombre de César “D” y su esposa y también fue transferido a una empresa constructora cuyos accionistas son personas asociadas con el exgobernador.

Además, el 10 de octubre de 2011, se realizó un pago por 10 millones de pesos. El dinero se utilizó para el Fideicomiso del Banco Mercantil del Norte S.A., que está registrado bajo el nombre de César “D” y Bertha “G”, según documentos bancarios.

Foto: Especial

Un segundo pago se efectuó el 12 de octubre de 2011 por un monto de dos millones de pesos. Esta transferencia fue acreditada a Finca Ingeniería Integral S.A. de C.V., empresa dedicada a la construcción y administración de obra civil.

En este supuesto desvío de recursos salen a la luz los nombres de César Humberto “J” y Raúl Enrique “J” como beneficiarios. Según las indagatorias, e personas son testigos de la venta de la propiedad llamada "Rancho Santa Rita", y son ubicados como socios del exgobernador de Chihuahua en Financiera. A decir de las autoridades, lo anterior se corrobora con las declaraciones de los testigos identificados como KA5P23/-2019,5M4GYUH19A/201 y FE54HD7SHJW/20l9, que están dentro de la investigación de ese expediente.



Escucha aquí el podcast ⬇️

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Acast

En las investigaciones sobre el exgobernador de Chihuahua, César “D”, por desvío de cantidades millonarias de recursos públicos han salido a relucir los nombres de familiares cercanos como sus hermanos y su esposa Bertha “G”.

Según las indagatorias de la Fiscalía General de la República (FGR) y de la Fiscalía de Chihuahua presentadas ante las autoridades judiciales de Estados Unidos, el exmandatario fue socio y accionista en diferentes empresas y negocios. Por ejemplo, con sus hermanos identificados como Ricardo, Alejandro y Mario estuvo relacionado con la empresa Grupo Inmobiliario del Norte.

Junto con su esposa, Bertha “G” y sus hijos, era accionista de la empresa llamada Ganadera El Saucito Balleza. Incluso, César “D” y su excuñada eran accionistas dentro de la empresa identificada como Financiera.

Las indagatorias detallan que el procedimiento para malversación de dinero de Chihuahua, con el fin de satisfacer los intereses del entonces gobernador, fueron fraudulentos porque no se utilizaron para los fines previstos y se destinaron al beneficio directo de su esposa, a través de su empresa de construcción llamada Pavimentos y Servicios de Parral.

Una vez que Unión Ganadera, propiedad del exmandatario estatal, recibió el dinero en sus cuentas, transfirió 567 mil 802 pesos entre el 20 y 27 de junio de 2011 a la cuenta registrada bajo el nombre de Pavimentos y Servicios de Parral, que pertenece a Bertha “G”, quien también usó el dinero para hacer un pago número de tarjeta de crédito a su favor.

567 mil 802 pesos transfirió desde su empresa Unión Ganadera a nombre de Bertha G.

La transferencia fue por 43 mil 844.75 pesos y posteriormente, para hacer un pago de 19 mil pesos a favor de Víctor “M”, trabajador de El Milagro, propiedad de César “D”, supuestamente para realizar pagos de nómina y pagos para un rancho. Incluso, la Auditoría Superior del Estado de Chihuahua analizó estos procedimientos y determinó que había sido fraudulento, porque violó varias disposiciones legales relacionadas con el manejo de los recursos públicos.

El 4 de octubre de 2011, el Servicio de Impuestos Internos del Estado de Chihuahua realizó dos pagos a favor de la empresa Financiamiento por dos millones 790 mil pesos y nueve millones 210 mil pesos cargados a una cuenta creada en el banco Santander.

El concepto de esta operación fue una subvención que se intentó justificar a través del acuerdo denominado "Subsidio para la adquisición de productos cárnicos Vaquillas", que se hizo con el propósito de adquirir vaquillas productoras de carne.

Foto: Especial

Según consta en registros de las fiscalías, dicho acuerdo fue firmado por la empresa Unión Ganadera y el estado de Chihuahua, representado por el Servicio de Impuestos Internos y la Secretaría de Desarrollo Rural.

En ese caso particular, no hay documentación o información que demuestre que la subvención entregada a Unión Ganadera fue utilizada para el propósito establecido en el acuerdo y tampoco existen detalles sobre el procedimiento para su correcta aplicación.

Como detalló este diario, la ruta del dinero confirma que la subvención fue solo una simulación, porque dicho recurso no se utilizó para el propósito del acuerdo. Además, el dinero público que fue malversado tuvo como objetivo el financiamiento de un fideicomiso a nombre de César “D” y su esposa y también fue transferido a una empresa constructora cuyos accionistas son personas asociadas con el exgobernador.

Además, el 10 de octubre de 2011, se realizó un pago por 10 millones de pesos. El dinero se utilizó para el Fideicomiso del Banco Mercantil del Norte S.A., que está registrado bajo el nombre de César “D” y Bertha “G”, según documentos bancarios.

Foto: Especial

Un segundo pago se efectuó el 12 de octubre de 2011 por un monto de dos millones de pesos. Esta transferencia fue acreditada a Finca Ingeniería Integral S.A. de C.V., empresa dedicada a la construcción y administración de obra civil.

En este supuesto desvío de recursos salen a la luz los nombres de César Humberto “J” y Raúl Enrique “J” como beneficiarios. Según las indagatorias, e personas son testigos de la venta de la propiedad llamada "Rancho Santa Rita", y son ubicados como socios del exgobernador de Chihuahua en Financiera. A decir de las autoridades, lo anterior se corrobora con las declaraciones de los testigos identificados como KA5P23/-2019,5M4GYUH19A/201 y FE54HD7SHJW/20l9, que están dentro de la investigación de ese expediente.



Escucha aquí el podcast ⬇️

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Acast

Finanzas

Incosteables para comerciantes el alquiler en el centro de Zacatecas

Los contratos de arrendamiento suelen incluir una cláusula que establece incrementos anuales basados en la inflación

Círculos

Zacatecas es parte de la conmemoración por el Día Mundial del Circo

Se realizarán varias actividades en el Centro Estatal de las Artes

Finanzas

Reparto de utilidades ¿Cuándo se pagan?

La fecha para recibir las utilidades está próxima, y la Ley Federal del Trabajo (LFT) regula este proceso.

Finanzas

Desarrollan sistemas de producción sostenible en más de tres mil hectáreas de Zacatecas

La Sader y el CIMMYT capacitaron a 354 productores de la entidad en el método Hub

Gossip

¿Una canción predijo la muerte de Javier Solís? Aquí te lo contamos

Solís estaba a punto de ser dado de alta cuando sufrió un paro cardíaco el 19 de abril de 1966

Teatro

Títeres gigantes invaden Guadalupe, Zacatecas; para las infancias olvidadas

La obra estuvo bajo la dirección y dramaturgia de Lucero Lara, y la producción de Jessica Valenzuela