/ lunes 12 de febrero de 2024

Crónica del poder / El difícil camino de la unidad en la cuarta transformación

En el otrora hegemónico Partido Revolucionario Institucional la disciplina era férrea, cualidad que, en los procesos electorales internos, por todos era aceptada; ahora, en la poderosa hegemonía de Morena, la lealtad incondicional es y debe ser total, porque así se impone desde el poder presidencial. Pero, ¿qué difícil es consolidar unidad y cohesión? Siempre habrá inconformidades entre los que no alcanzan a cumplir aspiraciones de postulación, algunas explícitas otras implícitas, como se observa en el Consejo Estatal del Partido Movimiento de Regeneración Nacional, el Morena, al acusar imposición y ventajismo y no reconocer que la encuesta haya arrojado como resultado que la Senadora Soledad Luévano Cantú sea la candidata de la primera fórmula al Senado de la República, hacia su reelección.

En contraste, Saúl Monreal Ávila pasó la prueba suavecito, o al menos no provocó reacciones de descontento ni generó amenazas de rompimiento, porque sus adversarios coincidieron en asumir esa óptima condición de lealtad en aras de continuar con vigoroso impulso al proyecto de la cuarta transformación que lanzó el presidente Andrés Manuel López Obrador y que ahora promueve la candidata a sucederle, Claudia Sheinbaum Pardo. Apechugar como los meros hombres: con honestidad política, Ulises Mejía Haro cedió a la espera de más batallas, "desde la trinchera que se me encomiende seguiremos adelante." José Luis "el Oso" Medina Lizalde, que había realizado acciones de promoción con prudencia y respetuoso de la legalidad, "convocó a cerrar el paso a las fuerzas que buscan el retorno del entreguismo y la corrupción." A regañadientes, José Narro Céspedes manifestó consternación por el resultado de la encuesta, pero "seguiremos firmes y construyendo para nuestra democracia y la paz de nuestro pueblo."

Bien se sabe pues, que perdiendo ganarán un espacio de esta lucha por la conservación del proyecto transformador de López Obrador, estarán en posición legislativa o de gobierno. Y, en el caso de la fórmula de mujeres, muy probablemente el Comité Nacional morenista no dará paso atrás y ante el rechazo ventilado contra Soledad Luévano Cantú, el gobernador David Monreal Ávila, opinó que los dirigentes del partido están obligados a respetar a su militancia, sin restar calidad a Verónica Díaz Robles y Geovanna Bañuelos de la Torre, que participaron en la contienda. Sin embargo, en el caso de la Senadora del Partido del Trabajo, en el comunicado de Morena le hacen una deferencia al señalar que, dado "el liderazgo y aportación que la Senadora Geovanna Bañuelos ha hecho a la cuarta transformación, la Comisión Nacional de la Coalición, está buscando la ruta para garantizar su participación en la construcción de la segunda etapa del proyecto." O sea, habrá otra oportunidad a la oriunda de Monte Escobedo que ha demostrado gran activismo y mejor gestión.

Tras el desenlace, en Morena se interpreta que Saúl Monreal Ávila está sólidamente posicionado, su estrategia electoral al seno del partido y respetuoso de la legalidad ante la sociedad y los ciudadanos, será el pivote que empuje la movilización morenista, de los petistas y verdes ecologistas y quien asuma firme liderazgo para comandar las batallas por la Cuarta Transformación y la Nueva Gobernanza.

En el otrora hegemónico Partido Revolucionario Institucional la disciplina era férrea, cualidad que, en los procesos electorales internos, por todos era aceptada; ahora, en la poderosa hegemonía de Morena, la lealtad incondicional es y debe ser total, porque así se impone desde el poder presidencial. Pero, ¿qué difícil es consolidar unidad y cohesión? Siempre habrá inconformidades entre los que no alcanzan a cumplir aspiraciones de postulación, algunas explícitas otras implícitas, como se observa en el Consejo Estatal del Partido Movimiento de Regeneración Nacional, el Morena, al acusar imposición y ventajismo y no reconocer que la encuesta haya arrojado como resultado que la Senadora Soledad Luévano Cantú sea la candidata de la primera fórmula al Senado de la República, hacia su reelección.

En contraste, Saúl Monreal Ávila pasó la prueba suavecito, o al menos no provocó reacciones de descontento ni generó amenazas de rompimiento, porque sus adversarios coincidieron en asumir esa óptima condición de lealtad en aras de continuar con vigoroso impulso al proyecto de la cuarta transformación que lanzó el presidente Andrés Manuel López Obrador y que ahora promueve la candidata a sucederle, Claudia Sheinbaum Pardo. Apechugar como los meros hombres: con honestidad política, Ulises Mejía Haro cedió a la espera de más batallas, "desde la trinchera que se me encomiende seguiremos adelante." José Luis "el Oso" Medina Lizalde, que había realizado acciones de promoción con prudencia y respetuoso de la legalidad, "convocó a cerrar el paso a las fuerzas que buscan el retorno del entreguismo y la corrupción." A regañadientes, José Narro Céspedes manifestó consternación por el resultado de la encuesta, pero "seguiremos firmes y construyendo para nuestra democracia y la paz de nuestro pueblo."

Bien se sabe pues, que perdiendo ganarán un espacio de esta lucha por la conservación del proyecto transformador de López Obrador, estarán en posición legislativa o de gobierno. Y, en el caso de la fórmula de mujeres, muy probablemente el Comité Nacional morenista no dará paso atrás y ante el rechazo ventilado contra Soledad Luévano Cantú, el gobernador David Monreal Ávila, opinó que los dirigentes del partido están obligados a respetar a su militancia, sin restar calidad a Verónica Díaz Robles y Geovanna Bañuelos de la Torre, que participaron en la contienda. Sin embargo, en el caso de la Senadora del Partido del Trabajo, en el comunicado de Morena le hacen una deferencia al señalar que, dado "el liderazgo y aportación que la Senadora Geovanna Bañuelos ha hecho a la cuarta transformación, la Comisión Nacional de la Coalición, está buscando la ruta para garantizar su participación en la construcción de la segunda etapa del proyecto." O sea, habrá otra oportunidad a la oriunda de Monte Escobedo que ha demostrado gran activismo y mejor gestión.

Tras el desenlace, en Morena se interpreta que Saúl Monreal Ávila está sólidamente posicionado, su estrategia electoral al seno del partido y respetuoso de la legalidad ante la sociedad y los ciudadanos, será el pivote que empuje la movilización morenista, de los petistas y verdes ecologistas y quien asuma firme liderazgo para comandar las batallas por la Cuarta Transformación y la Nueva Gobernanza.