Sin duda, el efecto del tercer debate entre los candidatos presidenciales a celebrarse mañana por la coche, será de mayor información hacia la ciudadanía, sobre todo en el tema de la seguridad, la evaluación que hagan del presente sexenio y sus resultados nada alentadores, sus nuevas estrategias y propuestas para superar esta terrible realidad que se quiere ocultar con la mera percepción, que también duele y hace daño, como así lo sufren las zonas urbanas zacatecanas de Fresnillo, la Bizarra Capital, Guadalupe y Jerez, constantemente ejemplarizadas como focos rojos de violencia, inseguridad, miedo, inestabilidad a incertidumbre entre la gente, los visitantes y hasta los migrantes.
Los momentos actuales de campañas, desde las presidenciales hasta las federales de senadores y diputados, y las locales de diputados y presidentes municipales con regidores y síndicos, ya son de alta tensión, solo hay que ver a los actores y protagonistas políticos en Guadalupe, más relevantes Roberto Luévano Ruiz y José Saldivar Alcalde; o en Zacatecas Capital, con la permanente confrontación entre los aspirantes a la alcaldía, Jorge Miranda Castro y Miguel Ángel Varela Pinedo; entre candidatos al Senado, solo caben resaltar la combatividad de Saúl Monreal Ávila, convertido en el líder de las fuerzas morenistas y Amalia García Medina, que ha elevado la calidad del debate y empujado vigorosamente a las fuerzas de Jorge Álvarez Máynez del Partido Movimiento Ciudadano, sin reducir la capacidad en el debate de la priista Claudia Anaya Mota.
El escenario nacional no deja de estirar o motivar las expresiones y posicionamientos de los candidatos en el estado, Claudia Sheinbaum Pardo, que insiste en asegurar que la cuarta transformación arrasará, no Morena; la acusación de Xóchitl Gálvez Ruíz sobre la intervención del crimen en las elecciones; el llamado de Lorenzo Córdova Vianello a votar, porque significa apropiación del futuro; la delirante preocupación de Mario Delgado, el dirigente nacional de Morena, que a sus correligionarios contagia de pesimismo; la convocatoria de Jorge Álvarez Máynez al señalar que es preferible que voten por otra candidata, antes de que decidan no votar; el frío pronóstico del boxeador Canelo Álvarez con la seguridad de que Claudia Sheinbaum va a ganar; y lo que sí hay que tomar en serio, porque es muy cierto, es que Los Temerarios siguen haciendo historia musical por el país y el extranjero.
Con los pies bien puestos sobre la tierra y en la realidad, se insiste, nada está escrito hasta el momento, nadie puede cantar victoria, el desmesurado triunfalismo anticipado es un insulto a los ciudadanos, porque aunque parezcan ilusos o ingenuos y aun con los poderes encima los hay que aceptan la eventualidad de una posible alternancia, porque las fuerzas opositoras que mañana otra vez se movilizan masivamente, se incrementan para hacer más notables la disminución de las indefiniciones, de las indecisiones y de los escépticos ante el poder.
Como sea pues, falta mucho por verse, pueden ocurrir o suceder sorpresas hasta impensables, el asunto de la declinación está en el aire, en suspenso y lo importante desde ahora, será considerar por los ciudadanos, que las elecciones van a impactar en la vida democrática y el desarrollo de México y Zacatecas y el escenario deseado, es que la elección no sea amenazada por la violencia e inseguridad.
