/ martes 13 de febrero de 2024

La amistad social

El tema de esta semana tiene que ver con la fecha del 14 de febrero día del amor y la amistad. A continuación, una reflexión sobre un interesante libro que tuve a bien recibir por parte de Don Sigifredo Noriega Obispo de la Diócesis de Zacatecas titulado: Carta Encíclica, Sobre la fraternidad y la amistad social de editorial Buena Prensa.

Se advierte en la contra portada del libro que la fraternidad y la amistad social unen a hombres y mujeres, en tiempos de necesidad y de incertidumbre, la humanidad está llamada a crear puentes, a reavivar el sentido de la acción generosa, a convocar las diversas formas de ayuda mutua y de afecto desinteresado en todo el mundo.

La encíclica social en mención del Papa Francisco es un aporte a la reflexión sobre el amor fraterno.

Sus palabras transmiten el deseo de que la hermandad renazca en toda la comunidad humana, al mismo tiempo es una invitación para que esta bendita pertenencia común se encarne en nuestras vidas, en la cultura y la sociedad entera.

En las ideas expuestas asevera el Papa Francisco, que “Fratelli tutti”, escribía san Francisco de Asís para dirigirse a todos los hermanos y las hermanas, y proponerles una forma de vida con sabor a Evangelio. De esos consejos es su deseo destacar uno donde invita a un amor que va más allá de las barreras de la geografía y del espacio.

Allí declara feliz a quien ame al otro, tanto a su hermano cuando está lejos de él como cuando está junto a él. Con pocas y sencillas palabras expresó lo esencial de una fraternidad abierta que permite reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de la cercanía física, más allá del lugar del universo donde haya nacido o donde habite.

También dice que este santo del amor fraterno, refiriéndose a san Francisco de Asís, que de la sencillez y la alegría, le inspiró a escribir la encíclica” Laudato si,” y se dice motivado para dedicar esta nueva encíclica a la fraternidad y la amistad social.

Porque san Francisco, que se sentía hermano del sol, del mar y del viento, se sabía todavía más unido a los que eran de su propia carne. Sembró paz por todas partes y caminó cerca de los pobres, de los abandonados, de los enfermos, de los descartados, de los últimos.

Esperemos mejores tiempos y reflexionemos en torno a la difícil situación que vivimos como seres humanos, necesitamos paz, solidaridad y empatía.

El tema de esta semana tiene que ver con la fecha del 14 de febrero día del amor y la amistad. A continuación, una reflexión sobre un interesante libro que tuve a bien recibir por parte de Don Sigifredo Noriega Obispo de la Diócesis de Zacatecas titulado: Carta Encíclica, Sobre la fraternidad y la amistad social de editorial Buena Prensa.

Se advierte en la contra portada del libro que la fraternidad y la amistad social unen a hombres y mujeres, en tiempos de necesidad y de incertidumbre, la humanidad está llamada a crear puentes, a reavivar el sentido de la acción generosa, a convocar las diversas formas de ayuda mutua y de afecto desinteresado en todo el mundo.

La encíclica social en mención del Papa Francisco es un aporte a la reflexión sobre el amor fraterno.

Sus palabras transmiten el deseo de que la hermandad renazca en toda la comunidad humana, al mismo tiempo es una invitación para que esta bendita pertenencia común se encarne en nuestras vidas, en la cultura y la sociedad entera.

En las ideas expuestas asevera el Papa Francisco, que “Fratelli tutti”, escribía san Francisco de Asís para dirigirse a todos los hermanos y las hermanas, y proponerles una forma de vida con sabor a Evangelio. De esos consejos es su deseo destacar uno donde invita a un amor que va más allá de las barreras de la geografía y del espacio.

Allí declara feliz a quien ame al otro, tanto a su hermano cuando está lejos de él como cuando está junto a él. Con pocas y sencillas palabras expresó lo esencial de una fraternidad abierta que permite reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de la cercanía física, más allá del lugar del universo donde haya nacido o donde habite.

También dice que este santo del amor fraterno, refiriéndose a san Francisco de Asís, que de la sencillez y la alegría, le inspiró a escribir la encíclica” Laudato si,” y se dice motivado para dedicar esta nueva encíclica a la fraternidad y la amistad social.

Porque san Francisco, que se sentía hermano del sol, del mar y del viento, se sabía todavía más unido a los que eran de su propia carne. Sembró paz por todas partes y caminó cerca de los pobres, de los abandonados, de los enfermos, de los descartados, de los últimos.

Esperemos mejores tiempos y reflexionemos en torno a la difícil situación que vivimos como seres humanos, necesitamos paz, solidaridad y empatía.