Zacatecas, Zac.- “Yo siempre he sido partidario de la sencillez y la claridad”, compartió David Castañeda Álvarez, joven poeta que busca transmitir sus sentimientos y momentos de regocijo a partir de un lenguaje claro y no de palabras rebuscadas.
Originario de Tula, Hidalgo, pero radicado en Zacatecas desde hace varios años, inició su experiencia en el mundo de las letras leyendo e imitando, para después profesionalizarse en la poesía en el taller de Javier Acosta.
Con formación en la Licenciatura en Letras en la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) y la Maestría en Investigaciones Humanísticas y Educativas en la orientación de Literatura hispanoamericana, a sus 33 años de edad, ha conseguido trascender en el género poético.
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“Mis poemas pertenecen a lo que me pasa, a lo que escucho y a lo que veo”. En reconocimiento a su obra inédita “Un hombre, una mujer y un mirlo”, Castañeda Álvarez, fue galardonado con el Premio Nacional de Poesía Ramón López Velarde en el 2015.
Posteriormente lanzó lo que sería su segunda publicación denominada “Y el verbo se hizo polvo”, un compendio que incluye cerca de 70 poemas con una temática bíblica, con inspiraciones que resultan ser una alegoría de una metáfora de personalidad; entre ellos sobresalen varias historias en donde los principales personajes son nombres que aparecen en la Biblia como Isaac y Moisés.
Atendiendo a la admiración que tiene por la plástica mexicana, este 2018 decidió aventurarse en la publicación de lo que es su más reciente propuesta, una recopilación de 10 poemas bajo el sello de Cartonera la Cecilia, que integra un grabado del creativo Juan Manuel Jiménez.
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Se trata de poesía apropiada de una pintura impresionista de Monet, que atendió a una deuda que tenía Castañeda con el pintor, en donde hizo suyo el cuadro inspirándose en la realidad, que busca la pasión –de aficionado- por dicha obra. “Estos poemas no tratan de ser artificiales, sino que buscan la voz que los rodea”.
Actualmente, David cursa un doctorado en Estudios Novohispanos, por lo que se enfoca en el ensayo; particularmente trabaja en un tema de investigación sobre la poesía laberíntica -mejor conocida como poesía visual- mismos trabajos que pretende compartir muy pronto.
Asimismo, el poeta aseguró que también formalizará un proyecto sobre poemas del mar. “Debes de dejar pasar un año, luego leer tus poemas para saber si son buenos o no” concluyó.
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